Me duele tener un te quiero en mis labios
Y tu ausencia infectando mi garganta
Esos tiempos no vuelven…
Callan… otorgan heridas y costras
Cada hiel dolida
Todo un estupor de tu fragancia
Nublando mi mente
Mis pasos parecían firmes…
Pero desvaneciste lo que me quedaba de cordura
Con el calor de tus ojos
La tibieza de tus manos
Y el hielo de las sombras tristes
Lo que puede ser juguetea
A las posibilidades de la ciencia
Y a mi no me hace gracia
Verte en cada libro y en cada palabra
Como ansiando un vocablo dulce
Como mirando desde adentro al pecho
Me duele tener tan imagen en mi mente
Soñar absolutamente gratis
Y pagar por la realidad efímera y esquiva
Que no se encuentra cuando más se busca
Y ahí está otra vez…
Ese octubre solitario
Con jirones de la piel de septiembre
Con las armas del amor esparcidas
Tu integridad se me hace carne
Cuando siento otra vez ese sorbo de alcohol
Una vez más, infectando mis venas
Y delatando por mis poros el desenfreno de ti
Todo contenido en las miradas, en las lunas
Cada vez que pesa la noche
Está ahí la verdad cansada
No la ves… mírala con las pestañas
Y embriágate de tanto aliento que tengo
Para dejar este dolor
Y llegar juntos al encuentro de las almas…