Existen niños atrapados
saboreando montaraces espejos,
colgados en vitrinas domesticas
observando taciturnos
Como pasa la vida mascando chicle.

Pequeños infantes colorados y felices
como globos en un cumpleaños,
se pierden tras las cortinas
como un fugitivo a la policia.

Encerrados en el infanticidio,
cocinan ansias en sus ojos
y solo cuentan los espacios
de una casa repleta de televisores.

Intimos secretos, tras los ventanales
como los de un aprendiz conejo,
¡pequeño hijo de eva!
abre la puerta sin miedo...
el día aún pregona
que tus pasos son los más tiernos.