TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / MAAD / Resurrección

[C:25726]

Estaba sobre el césped, revolcándose sobre su propia ignominia, maldiciendo a la incordiante fortuna que lo había convertido en un ser vil y miserable. Podía sentir sobre de sí las miradas acusadoras, el desprecio que inspiraba en cada uno de sus compañeros. Ahora era uno más de esos traidores, igual que Judas o el centauro Neso; una de esas almas que se despojan de la virtud y terminan por perderse en el camino de la deshonra y el pecado. Tal vez ni el mismo Raskolnikov había experimentado una culpa tan ardiente, ni tan lacerante, luego de haber cometido el par de asesinatos. Sobre todo porque al menos había tenido un motivo filosófico para hacerlo. De algún modo pensaba que lo que hacía era un acto de justicia. En cambio él, carecía de un por qué. Eso era lo más terrible: ni siquiera había tenido la intención de hacerlo. Había sido un movimiento imprudente, fuera de lugar y de tiempo; suficiente para apagar la llama de esperanza que hasta hace unos segundos brillaba en el interior de sus camaradas.

Tal era el sentir de este pobre individuo, que estaba siendo condenado al ostracismo sin posibilidad de ser indultado. Pero es sabido por todos que la naturaleza busca la forma de equilibrar sus elementos, y darle a cada quien lo que ha cosechado en toda una vida de sacrificios y humanas acciones. Así, ocurrió un suceso que a todos pareció maravilloso; sobre todo al personaje al que nos hemos referido. Este hecho le abría las puertas de la expiación, le brindaba una oportunidad inmejorable de reivindicarse, de volver a la batalla, en cierto sentido, de volver a nacer: el árbitro había hecho sonar su silbato y el autogol estaba siendo anulado; todo por causa de una falta de los contrarios. Una nueva batalla se libraría en los tiempos extras y sólo entonces se conocería al nuevo dueño del campeonato. Sobra decir que él, sintió una alegría indescriptible, y corrió como nunca en los tiempos suplementarios.













Texto agregado el 06-02-2004, y leído por 712 visitantes. (1 voto)


Lectores Opinan
09-02-2004 Dicen que JM, afamado relator deportivo de nuestro país, le ponía tanto pino a sus relatos que eran verdaderos discursos épicos. En cierto sentido hacía lo mismo que tú: dotaba de trascendencia lo trivial. Buen cuento gui
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]