CABALLOS

Bajo raudo por avenida Kennedy desde el sector alto de santiago de Chile, atravieso el río Mapocho a la altura del puente frente a la calle Suecia, viro nuevamente hacia el sector oriente para tomar la calle Isidora Goyenechea ( que nombre mas cuico).
El sol está alto, lanzando sus mortíferos rayos sin contemplación sobre los transeúntes, dentro del auto hace aún mas calor...cuando de pronto...sorpresivamente...lo veo.
Está ahí parado en la vereda como un peatón cualquiera....es un gran caballo azul...si un verdadero caballo azul, del tamaño de un caballo, con cola de caballo, cabeza de caballo....no hay duda es un lindo caballo azul. Miro para la vereda del frente y que veo....otro hermoso caballo, pero este es rojo, no estoy loco..es verdad...sigo lento con los ojos muy abiertos y no lo van a creer....hay otro y otro caballo...uno color naranja fosforescente, otro verde oscuro al que se le ven a través de su piel, sus huesos...si... se le ve su esqueleto...sus grandes huesos blancos....Es verdad que son las cuatro de la tarde y se me pasó la hora sin almorzar...pero no alucino..esto está lleno de lindos caballos, esbeltos caballos, pacíficos caballos...este último tiene bellos tonos entre azul, rojo, amarillo es un verdadero muestrario equino de colores.
Bueno me voy a casa, fue una agradable sorpresa, el encontrarme en plena ciudad, en medio de grandes edificios, entre los concurridos cafés de este elegante barrio con tantos caballos...me voy feliz...que gran idea la de traer estos caballos.