Amarras

Tus besos flotan invisibles carenando en el muelle del olvido
Mientras velozmente se disipan en la densidad de la niebla
Se oyen suspiros elocuentes de inertes fantasmas dormidos
Que alguna vez anidaron inmersos y prietos en mi pecho.

Las amarras se deslizaron quedas, lentamente por la borda
Y sigilosamente, tu barca del puerto, sin rumbo fijo, partió
Sin adioses, sin penas, sin gloria, se soltaron las ligaduras
Recalaras en otro puerto lejano, pero como en este jamás.

Tus ojos verdes claros subsistirán en el espejo, grabados
Tu perfume excitante flotando en mis sueños se quedó
Se adhieren a mi piel sopores, cual peso ligero, lánguido
Hoy sé que fueron anhelos y ficciones huecas del amor.
Ray