Me pides que te crea
Como si fuera tan fácil
Después de ver
Que tu verdad cambia
Al llegar la nueva marea.
Hablas de certeza, de ir de frente,
Mientras, de tanto mirarte,
Gastas tu reflejo y olvidas ver
Los ojos que tienes enfrente.
Observa tus manos vacías
Con las mías acariciando,
Nerviosas, mi propia pierna.
Imagino que eres ya otra
Así no duele haberte perdido.
Fue tan corto el camino.
No te preocupes, soy dura
Y aunque cale no llega
A estos tristes huesos.
Déjalo, por más que digas
No consigues explicar
Por qué si tu boca dice "siempre"
Mis pies son quienes huyen.
Déjalo, pretendes ser mar
Donde otra fue océano.
Desfilas por mi vida
Como en una pasarela
Y la única que yo conozco
Es la tabla de madera
Donde el pirata amordaza
Y salta cada traidor que se amotina.
Déjalo.
Nunca me gustaron los espejos
Prefiero escribir en la pared
Y reflejarme en las palabras
O en los ojos que las descubren.
Déjalo, es preferible que te vayas
Y encuentres otra cintura
A la que asirte cual salvavidas
En la próxima madrugada
Que necesites ser rescatada.