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| esteban_faulkner,05.10.2005
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Esta semana se conoceran los resultados sobre el Nobel de Literatura y de la Paz. Se rumorea que Bono (el vocalista de U2) está nominado para éste último. No sé si saldrá, existen versiones diversas al respecto, sobre todo aquella que no lo harán porque el Nobel "perdería seriedad".
Bueno, a lo que iba es a lo de Literatura. Acá quisiera compartir con uds. el discurso que dió GGM cuando ganó el Nobel. Las cosas que menciona, en buena parte siguen siendo las mismas, en clave de realismo mágico.
bLa soledad de America latina/b
Antonio Pigafetta, un navegante florentino que acompañó a bMagallanes/b en el primer viaje alrededor del mundo, escribió a su paso por nuestra América meridional una crónica rigurosa que sin embargo parece una aventura de la imaginación. Contó que había visto cerdos con el ombligo en el lomo, y unos pájaros sin patas cuyas hembras empollaban en las espaldas del macho, y otros como alcatraces sin lengua cuyos picos parecían una cuchara. Contó que había visto un engendro animal con cabeza y orejas de mula, cuerpo de camello, patas de ciervo y relincho de caballo. Contó que al primer nativo que encontraron en la bPatagonia/b le pusieron enfrente un espejo, y que aquel gigante enardecido perdió el uso de la razón por el pavor de su propia imagen.
Este libro breve y fascinante, en el cual ya se vislumbran los gérmenes de nuestras novelas de hoy, no es ni mucho menos el testimonio más asombroso de nuestra realidad de aquellos tiempos. Los Cronistas de Indias nos legaron otros incontabels. bEldorado/b, nuestro país ilusorio tan codiciado, figuró en mapas numerosos durante largos años, cambiando de lugar y de forma según la fantasía de los cartógrafos. En busca de la fuente de la Eterna Juventud, el mítico Alvar Núñez Cabeza de Vaca exploró durante ocho años el norte de bMéxico/b, en una expedición venática cuyos miembros se comieron unos a otros, y sólo llegaron cinco de los 600 que la emprendieron. Uno de los tantos misterios que nunca fueron descifrados, es el de las once mil mulas cargadas con cien libras de oro cada una, que un día salieron del bCusco/b para pagar el rescate de Atahualpa y nunca llegaron a su destino. Más tarde, durante la colonia, se vendían en Cartagena de Indias unas gallinas criadas en tierras de aluvión, en cuyas mollejas se encontraban piedrecitas de oro. Este delirio áureo de nuestros fundadores nos persiguió hasta hace poco tiempo. Apenas en el siglo pasado la misión alemana encargada de estudiar la construcción de un ferrocarril interoceánico en el istmo de bPanamá/b, concluyó que el proyecto era viable con la condición de que los rieles no se hicieran de hierro, que era un metal escaso en la región, sino que se hicieran de oro.
La independencia del dominio español no nos puso a salvo de la demencia. El general bAntonio López de Santana/b, que fué tres veces dictador de México, hizo enterrar con funerales magníficos la pierna derecha que había perdido en la llamada Guerra de los Pasteles. El general Gabriel García Morena gobernó al bEcuador/b durante 16 años como un monarca absoluto, y su cadáver fue velado con su uniforme de gala y su coraza de condecoraciones sentado en la silla presidencial. El general Maximiliano Hernández Martínez, el déspota teósofo de bEl Salvador/b que hizo exterminar en una matanza bárbara a 30 mil campesinos, había inventado un péndulo para averiguar si los alimentos estaban envenenados, e hizo cubrir con papel rojo el alumbrado público para combatir una epidemia de escarlatina. El monumento al general Francisco Morazán, erigido en la plaza mayor de bTegucigalpa/b, es en realidad una estatua del mariscal Ney comprada en Paris en un depósito de esculturas usadas.
Hace once años, uno de los poetas insignes de nuestro tiempo, el chileno bPablo Neruda/b, iluminó este ámbito con su palabra. En las buenas conciencias de Europa, y a veces también en las malas, han irrumpido desde entonces con más ímpetus que nunca las noticias fantasmales de la bAmérica Latina, esa patria inmensa de hombres alucinados y mujeres históricas, cuya terquedad sin fin se confunde con la leyenda/b. No hemos tenido un instante de sosiego. Un presidente prometeico atrincherado en su palacio en llamas murió peleando solo contra todo un ejército, y dos desastres aéros sospechosos y nunca esclarecidos segaron la vida de otro de corazón generoso, y la de un militar demócrata que había restaurado la dignidad de su pueblo. Ha habido 5 guerras y 17 golpes de estado, y surgió un dictador luciferino que en el nombre de Dios lleva a cabo el primer etnocidio de América Latina en nuestro tiempo. Mientras tanto, 20 millones de niños latinoamericanos morían antes de cumplir dos años, que son más de cuantos han nacido en Europa desde 1970. bLos desaparecidos por motivos de la represión son casi 120 mil, que es como si hoy no se supiera donde están todos los habitantes de la cuidad de Uppsala/b. Numerosas mujeres encintas fueron arrestadas dieron a luz en cárceles argentinas, pero aun se ignora el paradero y la identidad de sus hijos, que fueron dados en adopción clandestina o internados en orfanatos por las autoridades militares. Por no querer que las cosas siguieran así han muerto cerca de 200 mil mujeres y hombres en todo el continente, y bmás de 100 mil perecieron en tres pequeños y voluntariosos países de la América Central, Nicaragua, El Salvador y Guatemala/b. Si esto fuera en los Estados Unidos, la cifra proporcional sería de un millón 600 muertes violentas en cuatro años.
- De Chile, pais de tradiciones hospitalarias, ha huído un millón de personas: el 12 % por ciento de su población.
- El Uruguay, una nación minúscula de dos y medio millones de habitantes que se consideraba como el pais más civilizado del continente, ha perdido en el destierro a uno de cada cinco ciudadanos.
- La guerra civil en El Salvador ha causado desde 1979 casi un refugiado cada 20 minutos.
bEl país que se pudiera hacer con todos los exiliados y emigrados forzosos de América Latina, tendría una población más numerosa que Noruega./b
Me atrevo a pensar, que es esta realidad descomunal, y no sólo su expresión literaria, la que este año ha merecido la atención de la Academia Sueca de las Letras. Una realidad que no es la del papel, sino que vive con nosotros y determina cada instante de nuestras incontables muertes cotidianas, y que sustenta un manantial de creación insaciable, pleno de desdicha y de belleza, del cual este colombiano errante y nostálgico no es más que una cifra más señalada por la suerte. Poetas y mendigos, músicos y profetas, guerreros y malandrines, todas las criaturas de aquella realidad desaforada hemos tenido que pedirle muy poco a la imaginación, porque el desafío mayor para nosotros ha sido la insuficiencia de los recursos convencionales para hacer creíble nuestra vida. bEste es, amigos, el nudo de nuestra soledad/b.
Pues si estas dificultades nos entorpecen a nosotros, que somos de su esencia, no es difícil entender que los talentos racionales de este lado del mundo, extasiados en la contemplación de sus propias culturas, se hayan quedado sin un método válido para interpretarnos. Es comprensible que insistan en medirnos con la misma vara con que se miden a sí mismos, sin recordar que los estragos de la vida no son iguales para todos, y que la búsqueda de la identidad propia es tan ardua y sangrienta para nosotros como lo fué para ellos. La interpretación de nuestra realidad con esquemas ajenos sólo contribuye a hacernos cada vez más desconocidos, cada vez menos libres, cada vez más solitarios. Tal vez la Europa venerable sería más comprensiva si tratara de vernos en su propio pasado. Si recordara que Londres necesitó 300 años para construirse su primera muralla y otros 300 para tener un obispo, que Roma se debatió en las tinieblas de la incertidumbre durante 20 siglos antes de que un rey etrusco la implantara en la historia, y que aun en el siglo XVI los pacíficos suizos de hoy, que nos deleitan con sus quesos mansos y sus relojes impávidos, ensangrentaron a Europa como soldados de fortuna. Aun en el apogeo del Renacimiento, 12 mil lansquenetes a sueldo de los ejércitos imperiales saquearon y devastaron a Roma, y pasaron a cuchillo a ocho mil de sus habitantes.
No pretendo encarnar las ilusiones de Tonio Kröger, cuyos sueños de unión entre un norte casto y un sur apasionado exaltaba Thomas Mann hace 53 años en este lugar. Pero creo que los europeos de espíritu clarificador, los que luchan también aquí por una patria grande más humana y más justa, podrían ayudarnos mejor si revisaran a fondo su manera de vernos. bLa solidaridad con nuestros sueños no nos hará sentir menos solos, mientras no se concrete con actos de respaldo legítimo a los pueblos que asuman la ilusión de tener una vida propia en el reparto del mundo./b
América latina no quiere ni tiene por qué ser un alfil sin albedrío, ni tiene nada de quimérico que sus designios de independencia y originalidad se conviertan en una aspiración occidental. No obstante, los progresos de la navegación que han reducido tantas distancias entre nuestras Américas y Europa, parecen haber aumentado en cambio nuestra distancia cultural. b¿Por qué la originalidad que se nos admite sin reservas en la literatura se nos niega con toda clase de suspicacias en nuestras tentativas tan difíciles de cambio social?/b ¿Por qué pensar que la justicia social que los europeos de avanzada tratan de imponer en sus países no puede ser también un objetivo latinoamericano con métodos distintos en condiciones diferentes? No: la violencia y el dolor desmesurados de nuestra historia son el resultado de injusticias seculares y amarguras sin cuento, y no una confabulación urdida a 3 mil leguas de nuestra casa. Pero muchos dirigentes y pensadores europeos lo han creído, con el infantilismo de los abuelos que olvidaron las locuras fructíferas de su juventud, como si no fuera posible otro destino que vivir a merced de los dos grandes dueños del mundo. Este es, amigos, el tamaño de nuestra soledad.
bSin embargo, frente a la opresión, el saqueo y el abandono, nuestra respuesta es la vida. /bNi los diluvios ni las pestes, ni las hambrunas ni los cataclismos, ni siquiera las guerras eternas a través de los siglos y los siglos han conseguido reducir la ventaja tenaz de la vida sobre la muerte. Una ventaja que aumenta y se acelera: cada año hay 74 millones más de nacimientos que de defunciones, una cantidad de vivos nuevos como para aumentar siete veces cada año la población de Nueva York. La mayoría de ellos nacen en los países con menos recursos, y entre estos, por supuesto, los de América Latina. En cambio, los paises más prósperos han logrado acumular suficiente poder de destrucción como para aniquilar cien veces no sólo a todos los seres humanos que han existido hasta hoy, sino la totalidad de los seres vivos que han pasado por este planeta de infortunios.
bUn día como el de hoy, mi maestro William Faulkner dijo en este lugar: "Me niego a admitir el fin del hombre"/b. No me sentiría digno de ocupar este sitio que fue suyo si no tuviera la conciencia plena de que por primera vez desde los orígenes de la humanidad, el desastre colosal que él se negaba a admitir hace 32 años es ahora nada más que una simple posibilidad científica. Ante esta realidad sobrecogedora que a través de todo el tiempo humano debió de parecer una utopía, los inventores de fábulas que todo lo creemos nos sentimos con el derecho de creer que todavía no es demasiado tarde para emprender la creación de la utopía contraria. Una nueva y arrasadora utopía de la vida, donde nadie pueda decidir por otros hasta la forma de morir, donde de veras sea cierto el amor y sea posible la felicidad, y donde las estirpes condenadas a cien años de soledad tengan por fin y para siempre una segunda oportunidad sobre la tierra.
iFrom Les Prix Nobel. The Nobel Prizes 1982, Editor Wilhelm Odelberg, [Nobel Foundation], Stockholm, 1983/i
* Me tomé la licencia de colocar negritas a discreción.
* Gracias por compartir éste discurso en éste foro.
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| gaviotapatagonica,05.10.2005
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gracias a vos Edu...por compartirlo con nosotros ...piquitos de gracias por eso..y me llevo este final entre las alas...
"Una nueva y arrasadora utopía de la vida, donde nadie pueda decidir por otros hasta la forma de morir, donde de veras sea cierto el amor y sea posible la felicidad, y donde las estirpes condenadas a cien años de soledad tengan por fin y para siempre una segunda oportunidad sobre la tierra"
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| mariaclaudina,05.10.2005
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| Me duele, y a la vez me reconforta el alma. | | |
| maitencillo,05.10.2005
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Sobre el Premio Nobel de la Paz, este año es record de “candidatos” ¡199! Bono es el nombre que más suena y esta no es la primera vez que es postulado a este premio ¿las razones? Más que nada su trabajo por la condonación de la deuda externa de los países en vías de desarrollo (especialmente Africa). Otros de los nombres que suenan son G. Schroeder, C. Powell y V. Havel. Como dato anecdótico: Chavez y Bush también fueron postulados al Nobel de la Paz de este año.
Sobre el discurso de García Márquez… ¡cuanta verdad tienen sus palabras!
Lo que para un europeo puede ser sólo imaginación, aquí son realidades: me atrevo a decir que cualquier habitante de Sudamérica tiene alguna historia de contar que puede parecer irreal, de personajes caminando en medio de la nada como si en una calle del centro de la ciudad estuvieran; o de niños que cada día salen de sus casas a las 05:00 AM para caminar 10 Km (o más) en medio del barro hasta llegar a la escuela dónde le darán un pan y una leche como incentivo para hacerlo ir a clases, mismo pan que guardará para llevarlo a casa y compartirlo con su familia en la tarde. “¡Cuanta imaginación!”, puede pensar un europeo desinformado; cuanta distancia entre mundos pienso yo. Mundos diferentes, y como tal, no se pueden medir de la misma forma.
i“La interpretación de nuestra realidad con esquemas ajenos sólo contribuye a hacernos cada vez más desconocidos, cada vez menos libres, cada vez más solitarios.”/i
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| maitencillo,07.10.2005
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Nada que ver con el tema del foro, pero como también se mencionó algo sobre el Nobel de la Paz... No se lo llevó Bono de U2, sino que lo comparten el egipcio Mohamed ElBaradei (Direrecto General de la IAEA), y la IAEA (International Atomic Energy Agency) que es la Agencia Internacional de Energía Atómica con sede en Viena. ¿Las razones? sus esfurzos por prevenir que la energía nuclear sea usada en propósito militaresfo y preocuparse que sea usada con fines pacíficos y del modo más seguro posible.
Esta misma agencia fue la encargada de buscar en Irak las pruebas que Bush esgrimía para atacar ese país: pruebas que nunca la IAEA nunca encontró... | | |
| miss_matanza_1,07.10.2005
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| mas apitutao el premio... | | |
| esteban_faulkner,08.10.2005
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| berrarum humanum est/b | | |
| rutina,11.10.2005
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GARCIA MARQUEZ!
Bueno, el premio nobel partió cojeando, ha cojeado siempre. Los reyes de suecia son fomes, por eso le dan la weá de premio a puros fomes. Discurso de García Márques y la weá! Discurso de Neruda y la weá! Discurso de la américa sodomizada y la weá! Sólo valen verga. Bueno, la américa sodomizada no, es un tema delicado, no es fome, es triste, no es triste, es cierto.
No me leí el discurso porque me dio lata, pero bueno, uno ya ve las letras conjugadas de esta manera "GARCIA MARQUEZ" y ya sabe con qué clase de mierda se van a enlodar las zapatillas, los pies, los pulmones, el cerebro, etc. En vez de leer a García Márquez hagan yoga, que eso es lo que hacen los lectores actuales de G M, u oren por su cáncer, que bien merecido que lo tiene (durante mucho tiempo fue el cáncer de la literatura latinoamericana, aunque a tal enfermedad todos han contribuido su granito de arena), etc etc etc bla bla bla. | | |
| rutina,11.10.2005
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| Otra cosa, Latinoamérica no está sola, está rodeada de gente, está en el centro de una orgía snuff donde ella es la víctima. | | |
| rutina,11.10.2005
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| Y una última cosa. ¡¿Cómo van a desprestigiar el nobel de la paz si se lo han dado hasta a Koffi Anan?! (disculpen si no lo escribí bien, es la emoción de teclear) | | |
| rutina,11.10.2005
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Ni Bono ni cualquier grupo pop ni cualquier estrella pop con """""compromiso social""""" van a desprestigiar algo así. El Nobel es farandulería academicosa, y ni eso. Es farandulería arbitraria, estúpida, descerebrada y subnormal. Otro instrumento más.
Lo peor son aquellos que se sicotizan por el nobel. Lo peor son aquellos que compran las colecciones de escritores "que ganaron el nobel", como si pudiesen armar un burdel aparte del resto de los escritores, como si con ello obtuvieran visa para encularse libremente, como si con ello ya no más les quedase chupársela a ellos mismos y a los otros nóbeles, o masturbarse hasta que los ojos se les sequen y las manos se les tullan. | | |
| maitencillo,11.10.2005
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| ¿un mal día o cansada/o de tanta rutina? | | |
| esteban_faulkner,12.10.2005
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| La rutina de ser mediocre. | | |
| esteban_faulkner,12.10.2005
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Ya me formo una idea de con quién trato si éste emite una opinión antecedida de:
b"No me leí el discurso porque me dio lata..."/b | | |
| gaviotapatagonica,12.10.2005
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uffff..porque la gente no podrá simplemente "contar" q le pasa por la piel o por el alma con respecto a un autor...o nada si no le pasa nada o todo si lo provoca apasionadamente. Sólo eso y sudar literatura sin aromas q frunzan la nariz ...
gaviota utópica | | |
| nakasone,12.10.2005
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..eduardo.....
no me leí el discurso por que me dio lata
que opinas >D | | |
| esteban_faulkner,14.10.2005
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Vaya a leerlo ipso facto!
O en su defecto, a escuchar "El derecho de vivir en paz" de Victor Jara. | | |
| rutina,18.10.2005
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O el cover de la misma de Otomo Yoshihide.
Me leí el discurso, después del primer post, pero mi religión me prohibe decir que he leido más de tres cosas de García Márquez. Siento parecer pueril, siento parecer eyaculador precoz, etcétera. Pero es que a estas alturas, ¿quién puede creer en García Márquez? Es que su propio sentimentalismo mata sus dotes. Él mismo se encargó de enlodar "Cien años de Soledad", que funciona bastante bien, que es una novela bastante buena, pero bueno, va y lanza chorrocientos libros que no es que sean horribles, sino que son parte del boscaje hediondo y aburrido de esa literatura que no sabe ser honesta y que no es más que la proliferación de las nefastas máscras de macramé. | | |
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