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Inicio / Lista de Foros / Literatura :: Talleres / Cuento compartido 2 - [F:9:12398]


ninive,05.08.2012
Por un lamentable error mio se borró lo publicado hasta ahora. Les ruego comprensión y los que consevan sus partes pueden mandarlas de nuevo.

lider-de-masas, lagunita, silvimar y sendero.

Stromboli les pedirá privadamente la colaboración de emergencia. Buena oportunidad para hacer cuadrar los tiempos del relato.

Lo siento en el alma. Ya sucedió dos veces y las veces anteriores no creí ser responsable, ahora estoy segura que fui yo. Lástima
 
leobrizuela,05.08.2012
¿Será un mensaje? Será acaso que los espíritus de los gandes creadores de literatura nos censuran? jajaja.
 
ninive,05.08.2012
Yo ya creo que algo me falla. espero no hacer daños mayores.

En el caso de creer en los malos espíritus que nos censuran yo pensaría en que nos envidian. Pero esta vez, no hay vuelta que darle, lo borré yo por un movimiento incierto .
 
silvimar-,05.08.2012
No te hagas problemas ninive, errar es de humanos, no quisiera estar en tu lugar, años de responsabilidad y buen trabajo, nosotros somos creadores a nuestra manera y estamos aprendiendo, aunque yo quisiera ver a algunos de nuestros escritores publicando, no por ser grande se es mejor, cada uno hace lo que puede y algunos tienen mas suerte o se deciden a vivir de la escritura, no te aflijas, todos son buena gente y nadie se enojará ni te juzgará por una equivocación, te mando un gran abrazo.
 
Stromboli,05.08.2012
Cuenteros, póngase a corregir algunos errores que había en el cuento nº 20. Fíjense mucho en seguir en la misma línea del inicio. Comprueben si es primera persona, segunda...

Alguna reencarnación de Neruda se ve que se enojó con el resultado, o las Musas andan traviesas. El cuento número 20 ¡Empieza ya!


 
Stromboli,05.08.2012

Inicio

Líder_de_masas

Roberto vuelve a leer en voz alta, por enésima vez el poema 20, le imprime una entonación seca, rotunda, su voz denota dolor, un dolor que se va acrecentando en cada lectura, y ya son muchas las lecturas de esta noche, y aún mas las lecturas de este poema, en las últimas dos semanas ...

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: " La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.


Roberto cierra con cuidado el libro de Neruda, lo deja perfectamente alineado al borde de la mesa baja del salón, mira el reloj de diseño colgado en la pared, junto al cuadro, un Tápies auténtico, - regalo de bodas de su suegro- , ya son las 3 de la madrugada, la televisión lleva horas encendida sin señal, con ese color azul absurdo, el color de la lealtad y la confianza, - que ironía, - desde que terminó la película en el Blue Ray, Rebecca de Alfred Hitchcock versión original subtitulada. Roberto siente la abrumadora sensación de soledad, aunque aún percibe su presencia por toda la casa, un hogar abandonado, con una simple nota

“Te dejo, vuelvo a casa de mis padres con los niños, nuestros abogados arreglarán los asuntos, no te quiero, adiós.”

Veinte palabras, veinte, otra vez el veinte, ¿ Acaso se puede romper un matrimonio en veinte palabras?

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos ...

-y éstos sean los últimos versos que yo le escribo...

-¡ Zorra ¡ - exclama entre dientes, con gran frialdad, sus ojos tiritan como los astros azules del poema, pero no con ese sentimiento de frío por la soledad del amor perdido, es odio, un profundo, agobiante y paranoico odio.

Roberto se dirige lentamente, por el pasillo a su despacho, lleva más de 48 horas sin pegar ojo, antes podía dormir algo tomándose varias pastillas, pero ahora ni siquiera lo intenta. Toda la casa está en silencio, las risas, los juegos con Andrea y Marcos, nuestras broncas, nuestras frecuentes y acaloradas broncas, ya son parte del pasado, los cuartos de los niños en total oscuridad, inmensos, ordenados, dolorosamente vacíos, los ojos de las súper-nenas del póster gigante de la habitación de Andrea, se clavan en la patética figura de un derrotado

Sigue mascullando su triste retahíla ...

-Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

-De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Al llegar a su despacho, se sienta en su escritorio y en la pantalla de cristal líquido del ordenador se refleja un hombre desaliñado, con barba de dos semanas, el pelo revuelto y sucio, - déjame en paz, inútil, no vales para nada – le espeta a su propio reflejo, garabatea rápidamente unas letras, con la pluma Mont Blanc que le regalo para su cumpleaños, dobla meticulosamente la carta por la mitad exacta, y la introduce en un sobre blanco, remitente, Roberto Sánchez de Elizalde, y dándole la vuelta al sobre, escribe el destinatario “Al Juez de este caso”.

Roberto, pulcramente vestido, afeitado y con su traje de lana fría gris, detiene en la calle, maleta en mano a un taxi, levantando el brazo y haciendo una señal.

Un maravilloso olor de Allure Sport de Chanel, inunda el taxi.

- Al aeropuerto del Prat, rápido, tengo que coger el puente aéreo hasta Madrid.

desarrollo:
Lagunita
 
hugodemerlo,05.08.2012
Grande maestra! Me vino joya el error, para el celu es mejor, ya estaba muy largo y el dedo gordo de la nano no da más, jajaja!

Los cuentos pueden ir cambiando de narrador según lo dicte la historia,
 
ninive,05.08.2012
El error que yo creo que hay en el cuento es que en el inicio habla de que la mujer lo abandonó con dos niños y en el de silvimar cuando recupera el conocimiento están a su lado dos jóvenes adolescentes que no saben donde está la madre. Hay un desfasaje de tiempos o es que no entendí. A lo mejor se despertó después de años. No sé habría que ver donde está la falla.
 
silvimar-,05.08.2012
se me pasaron algunas cosas..pero si pensé que pasaron algunos años..esto me da tiempo para ver lo de lagunita y ver de nuevo lo que pongo...
 
rhcastro,05.08.2012
Cuando las cosas se complican un poco, creo que cromatica tiene razón en eso de tomarse el tiempo necesario para desarrollar el texto.
No todos recibimos la idea como por arte de magia. Algunos somos un poco más lentos, no por ello menos efectivos.

Saludos.-
 
hugodemerlo,05.08.2012
No hay caso, sigo pensando en establecer obligatorio un día entre cada cuentero!
 
Stromboli,05.08.2012
El secreto de los cuentos compartidos reside en la inmediatez, el seguir al anterior siguiendo fielmente el hilo de la historia, o cambiando algunos aspectos de ella. Es libre de darle una vuelta de tuerca, y llevar un desarrollo alternativo. Siempre siguiendo los tiempos, poniendo cuidado si es en primera o tercera persona, no cambiando los nombres, ni dar un "salto en el tiempo".

Sé, que lagunita es una cuentera que sabe manejarse a la perfección en estas lides (lo digo porque es la que tiene que continuar), todos los participantes sin excepción ponen lo mejor de sí mismos.

Coincido de que unos necesitamos más tiempo que otros. Hay que "dejar madurar el texto". Saludos a todos, gracias por sus intervenciones.
 
silvimar-,05.08.2012
¿Que apuro tenemos? O es que somos ansiosos como dije al principio, esperamos como lectores que siga el otro, y nosotros no somos lectores, somos escritores, cuando el cuento queda bien terminado, entonces si que lo leeran, no todos tenemos la misma rapidez o ligereza mental..jeje...como algunos genios que conozco...yo hasta diría que pongamos los escritos en privado, que nos consultemos si vemos algo mal, en fin, ustedes disponen, es hermoso que salga a la luz un cuento prolijo, aunque no sea de un gran argumento, a veces no sale, pero si que sea coherente uno con el otro, seguir el hilo, si se habla neutro, o sea de tú o de vos, tienes o tenés... estúdienlo..puede salir algo bueno.
 
hugodemerlo,06.08.2012
Coincido con Silvi en muchos aspectos, insisto en un día entre partes!!!!!!!!!
para que lo mediten, lo mastiquen, antes de subir.
también por un tema de tiempos, algunos trabajan gran parte del día y quizá disponen de poco tiempo para ver como seguir la trama.
otros tal vez lo resuelven mas rápido, ya saben como seguir con el relato pero después de subirlo descubren que tenían para darle mas desarrollo y se rompen la cabeza contra la pared. (tengo un par de chichones).
como dice Silvi, no hay apuro!
dos cuentos por semana estaría bien.
 
umbrio,06.08.2012
Creo que la presión es autoimpuesta al leer los comentarios de los que siguen la historia. No recuerdo leer que el coordinator apremie a alguien. Cada quien tome el tiempo necesario para aportar su parte.
 
ninive,06.08.2012
Mi idea es que sigan este ritmo con razonables esperas pero que al final el cuento no se de enseguida vuelta de página y a otra coasa. Entremos en una fase más madura del trabajo grupal.

Una vez acabado el cuento salga como salga los autores y lectores señalarán los errores corregirán y mejorarán la forma y la coherencia de su propia parte teniendo en cuenta las indicaciones.

Probemos con este cuento a trabajar cada producción como taller.
Si no gusta si se desvirtúa la idea del cuentocompartido que va tan bien hacemos un pasito atrás y seguimos de la misma manera.
Creo que nos estamos volviendo muy permisivos. Creo que los inicios son demasiado explicativos en general, creo que no se lee atentamente lo escrito por el predecesor, creo que nos estamos volcando en general hacia lo mágico y la ciencia ficción para que todo sea permitido.
Creo que alguien tiene que hacerme dejar de hablar
 
Stromboli,06.08.2012
Me despierto con una mala noticia, el talentoso cuentero sendero tendrá que ausentarse por unos días. Se queda su sitio vacante. He intentado dar paso a nuevos cuenteros que no han escrito todavía en ningún cuentocompartido.

He aquí algunos. ¿Se anotan?

chilichilita
rigores
Utopia76
Divinaluna
andrurdna
cuenterodeilusione s

Por favor, sin demora se anota el que quiera colaborar en el fin de este cuento.

Si de lagunita no sabemos nada en el plazo de 24h tendremos que reemplazarla con todo el dolor del mundo.

Un saludo.
 
silvimar-,06.08.2012
Que no decaiga este foro, es lo mejor que vi desde que comencé en la página, se aprende mucho del otro, pero coincido con ninive, tenemos que corregir al otro sin pensar que se va a ofender. ¿O es que no queremos crecer? Corregir digo sin cambiar la vuelta que quiera darle el otro, solo en la forma literaria o si se le pasó algo por alto como a mi, a hugo le veo la idea muy parecida a la mia, todos tenemos que hacer algo en nuestra vida particular, solo dedicarle un tiempo a la página, aunque yo entro como 5 o 6 veces por día difícil que me quede, tenemos otra vida, aprendamos reglas como nos puso tan amablemente lider, siempre hay algo que aprender, pero dejemos volar nuestra imaginación y soltémonos para escribir.Me dijeron una frase "el inconsciente es el mejor escritor"
Seguí hablando ninive, que tenes toda la razón jaja, ojo que es contagioso.
Abrazosss
 
silvimar-,06.08.2012
tambien propongo algo. ¿No podemos abrir un foro solo para comentar estas cosas? y los textos que queden solos y comentarlos en el otro...o abrir un foro para poner el cuento entero, no se..aunque esta el club, ustedes digan...
 
IGnus,06.08.2012
Me encanta la idea de silvimar- de comentar en otro foro. A veces uno tiene ganas de comentar algo, pero por no estorbar a la historia o a los participantes es preferible no decir nada. Al ponerlo en otro foro, el que no quiera distraerse no lo lee y listo!.
Casi totalmente de acuerdo con nínive, en casi todos los aspectos. Excepto en lo de la ciencia ficción y fantasía (a veces uno se va para ese lado porque es su fuerte, como en mi caso; además dicen que la ciencia ficción también tiene su dificultad...).
Abrazos a todos, y como siempre, a disposición.
 
Stromboli,06.08.2012
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Líder_de_masas

Roberto vuelve a leer en voz alta, por enésima vez el poema 20, le imprime una entonación seca, rotunda, su voz denota dolor, un dolor que se va acrecentando en cada lectura, y ya son muchas las lecturas de esta noche, y aún mas las lecturas de este poema, en las últimas dos semanas ...

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: " La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.


Roberto cierra con cuidado el libro de Neruda, lo deja perfectamente alineado al borde de la mesa baja del salón, mira el reloj de diseño colgado en la pared, junto al cuadro, un Tápies auténtico, - regalo de bodas de su suegro- , ya son las 3 de la madrugada, la televisión lleva horas encendida sin señal, con ese color azul absurdo, el color de la lealtad y la confianza, - que ironía, - desde que terminó la película en el Blue Ray, Rebecca de Alfred Hitchcock versión original subtitulada. Roberto siente la abrumadora sensación de soledad, aunque aún percibe su presencia por toda la casa, un hogar abandonado, con una simple nota

“Te dejo, vuelvo a casa de mis padres con los niños, nuestros abogados arreglarán los asuntos, no te quiero, adiós.”

Veinte palabras, veinte, otra vez el veinte, ¿ Acaso se puede romper un matrimonio en veinte palabras?

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos ...

-y éstos sean los últimos versos que yo le escribo...

-¡ Zorra ¡ - exclama entre dientes, con gran frialdad, sus ojos tiritan como los astros azules del poema, pero no con ese sentimiento de frío por la soledad del amor perdido, es odio, un profundo, agobiante y paranoico odio.

Roberto se dirige lentamente, por el pasillo a su despacho, lleva más de 48 horas sin pegar ojo, antes podía dormir algo tomándose varias pastillas, pero ahora ni siquiera lo intenta. Toda la casa está en silencio, las risas, los juegos con Andrea y Marcos, nuestras broncas, nuestras frecuentes y acaloradas broncas, ya son parte del pasado, los cuartos de los niños en total oscuridad, inmensos, ordenados, dolorosamente vacíos, los ojos de las súper-nenas del póster gigante de la habitación de Andrea, se clavan en la patética figura de un derrotado

Sigue mascullando su triste retahíla ...

-Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

-De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Al llegar a su despacho, se sienta en su escritorio y en la pantalla de cristal líquido del ordenador se refleja un hombre desaliñado, con barba de dos semanas, el pelo revuelto y sucio, - déjame en paz, inútil, no vales para nada – le espeta a su propio reflejo, garabatea rápidamente unas letras, con la pluma Mont Blanc que le regalo para su cumpleaños, dobla meticulosamente la carta por la mitad exacta, y la introduce en un sobre blanco, remitente, Roberto Sánchez de Elizalde, y dándole la vuelta al sobre, escribe el destinatario “Al Juez de este caso”.

Roberto, pulcramente vestido, afeitado y con su traje de lana fría gris, detiene en la calle, maleta en mano a un taxi, levantando el brazo y haciendo una señal.

Un maravilloso olor de Allure Sport de Chanel, inunda el taxi.

- Al aeropuerto del Prat, rápido, tengo que coger el puente aéreo hasta Madrid.

desarrollo:
Lagunita
Roberto ya dentro del coche piensa que su vida a tomado un giro increíblemente impensado, nunca se dio cuenta que ella no lo amaba, siente cumpas que aún desconoce.
Sube al avión, la desazón va tomando cuerpo y su corazón sufre un decepción se siente muy frágil, y recuerda su niñez, el dolor cuando perdió a su madre fue tremendo, nunca pudo recuperase ahora se siente así.
Se desespera no solo perderá a su la mujer que ama, lamenta y duele saber que sus hijos al pasar el tiempo ya no lo querrán como su padre, ella, su madre algún día formara pareja y será el fin.
Llegando al aeropuerto se siente tan deprimido, tan inútil, muy solo, comienza una oración pidiendo a Dios poder rehacer su hogar que ahora esta desbastado, sabe que esta siendo hipócrita, que nunca creyó en Dios, hoy por primera vez siente que lo necesita, siente que lo escucha, y llorando musita unas pocas palabras.
Sale presuroso del aeropuerto sube a un taxi, le da la dirección de la casa de sus suegros.
Comienza a hilar una larga lista de cosas que hiso mal, de las que su mujer también tuvo mucho que ver, sueña desesperado con regresar al pasado y corregir todo aquello pero sabe que es imposible. Roberto se hunde en el asiento del taxi, sacude su alma que llora desolada.
De pronto el coche comienza a dar tumbos, la vista se le oscurece siente un fuerte golpe en su sien derecha en un segundo advierte que su vida depende de una mano amiga- Dios piensa

Desarrollo hacia el final
silvimar-
 
Stromboli,06.08.2012
Tenemos vacante el final: Os invito en mi LVD a los interesados a terminar este interesante cuento.

¡Les dejo mensaje a los nuevos en el LDV!

Los pesos pesados entre los cuenteros, si quieren... no tienen más que decirlo, les anoto en este final.

Gracias.
 
silvimar-,06.08.2012
silvimar
hacia el final...

Tuvo muchas noches de silencio y oscuridad, parecía sentir voces a su alrededor pero volvía a caer en un sopor que le hacía perder la realidad, tuvo sueños, soñó con ella y una cantinela de versos rotos lo perturbaba y no podía despertar,..

-”Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos” - Y su cabeza estallaba de dolor.

Una mano suave acariciaba sus cabellos, el no podía verla, solo percibía un suave perfume a rosas.

Quiso levantar la mano para tocar sus ojos y no podía, las tenía atadas a la cama, solo oía pasos a su alrededor,

De pronto recordó todo, el avión, el accidente, y la carta al juez, no la abrirían hasta que el cometiera lo que se propuso, eso esperaba.

Vino el medico a revisarlo y vio que había reaccionado, comenzó a hacerle preguntas para saber como se llamaba, sus documentos se habían perdido con el accidente.
--Mi nombre es Roberto Rojas..¿Que me pasó? Vine en busca de mi familia y ahora me encuentro aquí, no puedo ver doctor!
--Es que un coagulo de sangre le afectó su visión, esperamos que este se disuelva y usted vuelva a ver, quédese tranquilo.

--Porque tengo las manos atadas?

--No están atadas, lo lamento… usted no puede moverlas, el mismo coagulo le impide muchas cosas, inclusive caminar, solo funciona su parte neurológica que lo deja hablar.

Roberto desesperado intenta moverse y no puede, lagrimas de dolor caen por los costados de su rostro.

Cae en un estado de depresión y ya no quiere hablar con nadie, viene alguien con una voz muy dulce a leerle y hablarle, el le grita:

--¡Basta!, déjeme solo.

Durante meses el quedó inmóvil en esa cama, después lo trasladaron a un hospicio, buscaron a sus familiares pero nada, a alguien se le ocurrió publicar una foto con su rostro y se divulgó por toda la ciudad, nadie acudía por el, estaba solo…pero un día….
 
Stromboli,06.08.2012
Cuento compartido nº 20. Un homenaje

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Líder_de_masas

Roberto vuelve a leer en voz alta, por enésima vez el poema 20, le imprime una entonación seca, rotunda, su voz denota dolor, un dolor que se va acrecentando en cada lectura, y ya son muchas las lecturas de esta noche, y aún mas las lecturas de este poema, en las últimas dos semanas ...

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: " La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.


Roberto cierra con cuidado el libro de Neruda, lo deja perfectamente alineado al borde de la mesa baja del salón, mira el reloj de diseño colgado en la pared, junto al cuadro, un Tápies auténtico, - regalo de bodas de su suegro- , ya son las 3 de la madrugada, la televisión lleva horas encendida sin señal, con ese color azul absurdo, el color de la lealtad y la confianza, - que ironía, - desde que terminó la película en el Blue Ray, Rebecca de Alfred Hitchcock versión original subtitulada. Roberto siente la abrumadora sensación de soledad, aunque aún percibe su presencia por toda la casa, un hogar abandonado, con una simple nota

“Te dejo, vuelvo a casa de mis padres con los niños, nuestros abogados arreglarán los asuntos, no te quiero, adiós.”

Veinte palabras, veinte, otra vez el veinte, ¿ Acaso se puede romper un matrimonio en veinte palabras?

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos ...

-y éstos sean los últimos versos que yo le escribo...

-¡ Zorra ¡ - exclama entre dientes, con gran frialdad, sus ojos tiritan como los astros azules del poema, pero no con ese sentimiento de frío por la soledad del amor perdido, es odio, un profundo, agobiante y paranoico odio.

Roberto se dirige lentamente, por el pasillo a su despacho, lleva más de 48 horas sin pegar ojo, antes podía dormir algo tomándose varias pastillas, pero ahora ni siquiera lo intenta. Toda la casa está en silencio, las risas, los juegos con Andrea y Marcos, nuestras broncas, nuestras frecuentes y acaloradas broncas, ya son parte del pasado, los cuartos de los niños en total oscuridad, inmensos, ordenados, dolorosamente vacíos, los ojos de las súper-nenas del póster gigante de la habitación de Andrea, se clavan en la patética figura de un derrotado

Sigue mascullando su triste retahíla ...

-Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

-De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Al llegar a su despacho, se sienta en su escritorio y en la pantalla de cristal líquido del ordenador se refleja un hombre desaliñado, con barba de dos semanas, el pelo revuelto y sucio, - déjame en paz, inútil, no vales para nada – le espeta a su propio reflejo, garabatea rápidamente unas letras, con la pluma Mont Blanc que le regalo para su cumpleaños, dobla meticulosamente la carta por la mitad exacta, y la introduce en un sobre blanco, remitente, Roberto Sánchez de Elizalde, y dándole la vuelta al sobre, escribe el destinatario “Al Juez de este caso”.

Roberto, pulcramente vestido, afeitado y con su traje de lana fría gris, detiene en la calle, maleta en mano a un taxi, levantando el brazo y haciendo una señal.

Un maravilloso olor de Allure Sport de Chanel, inunda el taxi.

- Al aeropuerto del Prat, rápido, tengo que coger el puente aéreo hasta Madrid.

desarrollo:
lagunita

Roberto ya dentro del coche piensa que su vida a tomado un giro increíblemente impensado, nunca se dio cuenta que ella no lo amaba, siente cumpas que aún desconoce.
Sube al avión, la desazón va tomando cuerpo y su corazón sufre un decepción se siente muy frágil, y recuerda su niñez, el dolor cuando perdió a su madre fue tremendo, nunca pudo recuperase ahora se siente así.
Se desespera no solo perderá a su la mujer que ama, lamenta y duele saber que sus hijos al pasar el tiempo ya no lo querrán como su padre, ella, su madre algún día formara pareja y será el fin.
Llegando al aeropuerto se siente tan deprimido, tan inútil, muy solo, comienza una oración pidiendo a Dios poder rehacer su hogar que ahora esta desbastado, sabe que esta siendo hipócrita, que nunca creyó en Dios, hoy por primera vez siente que lo necesita, siente que lo escucha, y llorando musita unas pocas palabras.
Sale presuroso del aeropuerto sube a un taxi, le da la dirección de la casa de sus suegros.
Comienza a hilar una larga lista de cosas que hiso mal, de las que su mujer también tuvo mucho que ver, sueña desesperado con regresar al pasado y corregir todo aquello pero sabe que es imposible. Roberto se hunde en el asiento del taxi, sacude su alma que llora desolada.
De pronto el coche comienza a dar tumbos, la vista se le oscurece siente un fuerte golpe en su sien derecha en un segundo advierte que su vida depende de una mano amiga- Dios piensa

silvimar
hacia el final...

Tuvo muchas noches de silencio y oscuridad, parecía sentir voces a su alrededor pero volvía a caer en un sopor que le hacía perder la realidad, tuvo sueños, soñó con ella y una cantinela de versos rotos lo perturbaba y no podía despertar,..

-”Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos” - Y su cabeza estallaba de dolor.

Una mano suave acariciaba sus cabellos, el no podía verla, solo percibía un suave perfume a rosas.

Quiso levantar la mano para tocar sus ojos y no podía, las tenía atadas a la cama, solo oía pasos a su alrededor,

De pronto recordó todo, el avión, el accidente, y la carta al juez, no la abrirían hasta que el cometiera lo que se propuso, eso esperaba.

Vino el medico a revisarlo y vio que había reaccionado, comenzó a hacerle preguntas para saber como se llamaba, sus documentos se habían perdido con el accidente.
--Mi nombre es Roberto Rojas..¿Que me pasó? Vine en busca de mi familia y ahora me encuentro aquí, no puedo ver doctor!
--Es que un coagulo de sangre le afectó su visión, esperamos que este se disuelva y usted vuelva a ver, quédese tranquilo.

--Porque tengo las manos atadas?

--No están atadas, lo lamento… usted no puede moverlas, el mismo coagulo le impide muchas cosas, inclusive caminar, solo funciona su parte neurológica que lo deja hablar.

Roberto desesperado intenta moverse y no puede, lagrimas de dolor caen por los costados de su rostro.

Cae en un estado de depresión y ya no quiere hablar con nadie, viene alguien con una voz muy dulce a leerle y hablarle, el le grita:

--¡Basta!, déjeme solo.

Durante meses el quedó inmóvil en esa cama, después lo trasladaron a un hospicio, buscaron a sus familiares pero nada, a alguien se le ocurrió publicar una foto con su rostro y se divulgó por toda la ciudad, nadie acudía por el, estaba solo…pero un día….

Final
 
Stromboli,06.08.2012
Un llamamiento a todos: Nadie se presentó para el final, algunos no podían por trabajo, u otros motivos.

Así que esperemos hasta mañana martes si hay algún alma piadosa que se ofrezca.

 
hugodemerlo,06.08.2012
Dolores me pidió sí puedo tomar el final, no puedo decirle que no a una dama!
 
lider_de_masas,06.08.2012
Gracias Hugo.
 
Stromboli,06.08.2012
¡Te estoy eternamente agradecida, muy amable hugodermerlo por tu parte!. Bueno, el cuento es todo tuyo. Con tu valía sé que darás un buen final que nos deje a todos boquiabiertos!

Final
hugodemerlo
 
rhcastro,06.08.2012
Gracias hugo.
 
Stromboli,06.08.2012
Sí, porque ya me veía yo escribiendo la continuación, y ¡a saber qué saldría! Gracias, cuenteros por ser como sois. Los mejores del mundo.
 
silvimar-,07.08.2012
en una frase puse dos veces suave...redundancia...
me alegro que hugo termine este cuento!!!
 
hugodemerlo,07.08.2012
Pero un día Roberto despertó…sintiendo sus extremidades, movió las manos y los pies, luego los brazos, las piernas.
¡Es un milagro! Se dijo, todo funciona nuevamente, se tocó la cara, el cuerpo, y se sentó en la cama, todo estaba de maravillas, menos el corazón…el corazón aun continuaba herido.

En ese mismo instante decidió continuar el plan, nadie lo vio salir del hospicio, se vistió silenciosamente tomó sus pertenencias que estaban guardadas en un armario y se marchó delante de todo el mundo como si nada, como un fantasma entre la gente que no lo vio, un fantasma herido de amor, que no asusta, que no vuela, un alma en pena que deambula solo, buscando la liberación eterna de un amor desesperado.

Rebecca leyendo el diario en la casa de verano de sus padres frente al mar, se sorprende con la foto de Roberto, llama a su abogado y se dirigen al hospicio donde al llegar le cuentan de la huida de su marido, inútiles llamados al celular de Roberto y un largo deambular por las calles en busca de su paradero sin resultado, acabaron en un triste y frustrante retorno a la casa de la playa.

Pasaron los días sin noticias de Roberto, una noche Rebecca se encontraba sentada en la hamaca de la galería mirando hacia la oscuridad del mar en una noche esplendida de verano, con un cielo estrellado y recordando que una noche como esta conoció a Roberto en la playa, caminando bajo el cielo estrellado, él se le acercó y le dijo
¡Nunca imaginé encontrarme una estrella fugaz en la arena!
Eran otros tiempos, el abogado le interrumpió los recuerdos

¡Buenas noches Rebecca!, del susto salto de la hamaca

¡Buenas noches, que susto! Contesto exaltada, ¿Qué le trae por aquí?

¡Le traigo una carta del juez, en realidad es de su marido, se la envió al juez para que se la entreguen a usted personalmente esta noche exactamente a esta hora las diez de la noche!

Rebecca sacudió la cabeza, ¡Es la hora aproximada en que conocí a Roberto! Le dijo al abogado que escuchaba atentamente

¡Tome, le entrego el sobre, que tenga buenas noches mañana la veo en mi oficina!

¡Gracias!, tomó la carta y se sentó nuevamente en la hamaca para leerla

Lee las primeras líneas

“Emerge tu recuerdo de la noche en que estoy.
Abandonado como los muelles en el alba.
Es la hora de partir, oh abandonado”

Un par de lágrimas comienzan a rodar por las pálidas mejillas de Rebecca

“En ti se acumularon las guerras y los vuelos.
De ti alzaron las alas los pájaros del canto.
Todo te lo tragaste, como la lejanía.
Como el mar, como el tiempo. Todo en ti fue naufragio”

En ese mismo instante a pocos metros de Rebecca, la figura de un hombre comienza un lento camino en busca del mar

“Era la alegre hora del asalto y el beso.
La hora del estupor que ardía como un faro.
Ansiedad de piloto, furia de buzo ciego,
turbia embriaguez de amor, todo en ti fue naufragio”

Una parejita que se daba arrumacos en la arena observó al hombre entrando a la mar, se reían de este loco de traje caminando por la arena recitando un poema

“Hice retroceder la muralla de sombra.
Anduve más allá del deseo y del acto.
Oh carne, carne mía, mujer que amé y perdí,
a ti en esta hora húmeda, evoco y hago canto”

A Rebecca la temblaba la carta en las manos, y el corazón en el pecho

“Ah mujer, no sé cómo pudiste contenerme
en la tierra de tu alma, y en la cruz de tus brazos!
Mi deseo de ti fue el más terrible y corto,
el más revuelto y ebrio, el más tirante y ávido”

El hombre se sumergía lentamente recitando a viva voz, la pareja de la playa comprendió de que se trataba y llamó a emergencias rápidamente

“Ese fue mi destino y en él viajó mi anhelo,
y en el cayó mi anhelo, todo en ti fue naufragio!
Oh sentina de escombros, en ti todo caía,
qué dolor no exprimiste, qué olas no te ahogaron”

Rebecca era un mar de lagrimas, bajo un mar de estrellas que tiritaban en la lejana galaxia de los recuerdos, en la nebulosa oculta del arrepentimiento, en el infinito lamento del universo.

“Es la hora de partir, la dura y fría hora
que la noche sujeta a todo horario.
El cinturón ruidoso del mar ciñe la costa.
Surgen frías estrellas, emigran negros pájaros”

Se escuchan sirenas acercarse a lo lejos, las luces de las ambulancias llegan hasta la casa de la playa tiñendo de azul y rojo el rostro de Rebecca en llantos.
El hombre se entregó a la mar, en un canto desesperado.

“Sólo la sombra trémula se retuerce en mis manos.
Ah más allá de todo. Ah más allá de todo.
Es la hora de partir. Oh abandonado”

FIN
 
ninive,07.08.2012
Parto difícil el de este cuento, pero felizmente ha nacido una criatura sana y hermosa.
En este cuento se verifica "el intertexto"
 
Stromboli,07.08.2012
Se termina con "La canción desesperada de Neruda" Ooohhhh Qué maravilla de final!! Mi más sentida enhorabuena a todos, pero estuviste genial hugodemerlo.

Me alegra de estar en la Página Azul, entre personas de gran valía. Gracias por dejarme escribir con ustedes.





 
Stromboli,07.08.2012
Cuento compartido nº 20. Un homenaje

Inicio

Líder_de_masas

Roberto vuelve a leer en voz alta, por enésima vez el poema 20, le imprime una entonación seca, rotunda, su voz denota dolor, un dolor que se va acrecentando en cada lectura, y ya son muchas las lecturas de esta noche, y aún mas las lecturas de este poema, en las últimas dos semanas ...

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: " La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.


Roberto cierra con cuidado el libro de Neruda, lo deja perfectamente alineado al borde de la mesa baja del salón, mira el reloj de diseño colgado en la pared, junto al cuadro, un Tápies auténtico, - regalo de bodas de su suegro- , ya son las 3 de la madrugada, la televisión lleva horas encendida sin señal, con ese color azul absurdo, el color de la lealtad y la confianza, - que ironía, - desde que terminó la película en el Blue Ray, Rebecca de Alfred Hitchcock versión original subtitulada. Roberto siente la abrumadora sensación de soledad, aunque aún percibe su presencia por toda la casa, un hogar abandonado, con una simple nota

“Te dejo, vuelvo a casa de mis padres con los niños, nuestros abogados arreglarán los asuntos, no te quiero, adiós.”

Veinte palabras, veinte, otra vez el veinte, ¿ Acaso se puede romper un matrimonio en veinte palabras?

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos ...

-y éstos sean los últimos versos que yo le escribo...

-¡ Zorra ¡ - exclama entre dientes, con gran frialdad, sus ojos tiritan como los astros azules del poema, pero no con ese sentimiento de frío por la soledad del amor perdido, es odio, un profundo, agobiante y paranoico odio.

Roberto se dirige lentamente, por el pasillo a su despacho, lleva más de 48 horas sin pegar ojo, antes podía dormir algo tomándose varias pastillas, pero ahora ni siquiera lo intenta. Toda la casa está en silencio, las risas, los juegos con Andrea y Marcos, nuestras broncas, nuestras frecuentes y acaloradas broncas, ya son parte del pasado, los cuartos de los niños en total oscuridad, inmensos, ordenados, dolorosamente vacíos, los ojos de las súper-nenas del póster gigante de la habitación de Andrea, se clavan en la patética figura de un derrotado

Sigue mascullando su triste retahíla ...

-Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

-De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Al llegar a su despacho, se sienta en su escritorio y en la pantalla de cristal líquido del ordenador se refleja un hombre desaliñado, con barba de dos semanas, el pelo revuelto y sucio, - déjame en paz, inútil, no vales para nada – le espeta a su propio reflejo, garabatea rápidamente unas letras, con la pluma Mont Blanc que le regalo para su cumpleaños, dobla meticulosamente la carta por la mitad exacta, y la introduce en un sobre blanco, remitente, Roberto Sánchez de Elizalde, y dándole la vuelta al sobre, escribe el destinatario “Al Juez de este caso”.

Roberto, pulcramente vestido, afeitado y con su traje de lana fría gris, detiene en la calle, maleta en mano a un taxi, levantando el brazo y haciendo una señal.

Un maravilloso olor de Allure Sport de Chanel, inunda el taxi.

- Al aeropuerto del Prat, rápido, tengo que coger el puente aéreo hasta Madrid.

desarrollo:
lagunita

Roberto ya dentro del coche piensa que su vida a tomado un giro increíblemente impensado, nunca se dio cuenta que ella no lo amaba, siente cumpas que aún desconoce.
Sube al avión, la desazón va tomando cuerpo y su corazón sufre un decepción se siente muy frágil, y recuerda su niñez, el dolor cuando perdió a su madre fue tremendo, nunca pudo recuperase ahora se siente así.
Se desespera no solo perderá a su la mujer que ama, lamenta y duele saber que sus hijos al pasar el tiempo ya no lo querrán como su padre, ella, su madre algún día formara pareja y será el fin.
Llegando al aeropuerto se siente tan deprimido, tan inútil, muy solo, comienza una oración pidiendo a Dios poder rehacer su hogar que ahora esta desbastado, sabe que esta siendo hipócrita, que nunca creyó en Dios, hoy por primera vez siente que lo necesita, siente que lo escucha, y llorando musita unas pocas palabras.
Sale presuroso del aeropuerto sube a un taxi, le da la dirección de la casa de sus suegros.
Comienza a hilar una larga lista de cosas que hiso mal, de las que su mujer también tuvo mucho que ver, sueña desesperado con regresar al pasado y corregir todo aquello pero sabe que es imposible. Roberto se hunde en el asiento del taxi, sacude su alma que llora desolada.
De pronto el coche comienza a dar tumbos, la vista se le oscurece siente un fuerte golpe en su sien derecha en un segundo advierte que su vida depende de una mano amiga- Dios piensa

silvimar
hacia el final...

Tuvo muchas noches de silencio y oscuridad, parecía sentir voces a su alrededor pero volvía a caer en un sopor que le hacía perder la realidad, tuvo sueños, soñó con ella y una cantinela de versos rotos lo perturbaba y no podía despertar,..

-”Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos” - Y su cabeza estallaba de dolor.

Una mano suave acariciaba sus cabellos, el no podía verla, solo percibía un delicado perfume a rosas.

Quiso levantar la mano para tocar sus ojos y no podía, las tenía atadas a la cama, solo oía pasos a su alrededor,

De pronto recordó todo, el avión, el accidente, y la carta al juez, no la abrirían hasta que el cometiera lo que se propuso, eso esperaba.

Vino el medico a revisarlo y vio que había reaccionado, comenzó a hacerle preguntas para saber como se llamaba, sus documentos se habían perdido con el accidente.
--Mi nombre es Roberto Rojas..¿Que me pasó? Vine en busca de mi familia y ahora me encuentro aquí, no puedo ver doctor!
--Es que un coagulo de sangre le afectó su visión, esperamos que este se disuelva y usted vuelva a ver, quédese tranquilo.

--Porque tengo las manos atadas?

--No están atadas, lo lamento… usted no puede moverlas, el mismo coagulo le impide muchas cosas, inclusive caminar, solo funciona su parte neurológica que lo deja hablar.

Roberto desesperado intenta moverse y no puede, lagrimas de dolor caen por los costados de su rostro.

Cae en un estado de depresión y ya no quiere hablar con nadie, viene alguien con una voz muy dulce a leerle y hablarle, el le grita:

--¡Basta!, déjeme solo.

Durante meses el quedó inmóvil en esa cama, después lo trasladaron a un hospicio, buscaron a sus familiares pero nada, a alguien se le ocurrió publicar una foto con su rostro y se divulgó por toda la ciudad, nadie acudía por el, estaba solo…pero un día….

Final
hugodemerlo

Pero un día Roberto despertó…sintiendo sus extremidades, movió las manos y los pies, luego los brazos, las piernas.
¡Es un milagro! Se dijo, todo funciona nuevamente, se tocó la cara, el cuerpo, y se sentó en la cama, todo estaba de maravillas, menos el corazón…el corazón aun continuaba herido.

En ese mismo instante decidió continuar el plan, nadie lo vio salir del hospicio, se vistió silenciosamente tomó sus pertenencias que estaban guardadas en un armario y se marchó delante de todo el mundo como si nada, como un fantasma entre la gente que no lo vio, un fantasma herido de amor, que no asusta, que no vuela, un alma en pena que deambula solo, buscando la liberación eterna de un amor desesperado.

Rebecca leyendo el diario en la casa de verano de sus padres frente al mar, se sorprende con la foto de Roberto, llama a su abogado y se dirigen al hospicio donde al llegar le cuentan de la huida de su marido, inútiles llamados al celular de Roberto y un largo deambular por las calles en busca de su paradero sin resultado, acabaron en un triste y frustrante retorno a la casa de la playa.

Pasaron los días sin noticias de Roberto, una noche Rebecca se encontraba sentada en la hamaca de la galería mirando hacia la oscuridad del mar en una noche esplendida de verano, con un cielo estrellado y recordando que una noche como esta conoció a Roberto en la playa, caminando bajo el cielo estrellado, él se le acercó y le dijo
¡Nunca imaginé encontrarme una estrella fugaz en la arena!
Eran otros tiempos, el abogado le interrumpió los recuerdos

¡Buenas noches Rebecca!, del susto salto de la hamaca

¡Buenas noches, que susto! Contesto exaltada, ¿Qué le trae por aquí?

¡Le traigo una carta del juez, en realidad es de su marido, se la envió al juez para que se la entreguen a usted personalmente esta noche exactamente a esta hora las diez de la noche!

Rebecca sacudió la cabeza, ¡Es la hora aproximada en que conocí a Roberto! Le dijo al abogado que escuchaba atentamente

¡Tome, le entrego el sobre, que tenga buenas noches mañana la veo en mi oficina!

¡Gracias!, tomó la carta y se sentó nuevamente en la hamaca para leerla

Lee las primeras líneas

“Emerge tu recuerdo de la noche en que estoy.
Abandonado como los muelles en el alba.
Es la hora de partir, oh abandonado”

Un par de lágrimas comienzan a rodar por las pálidas mejillas de Rebecca

“En ti se acumularon las guerras y los vuelos.
De ti alzaron las alas los pájaros del canto.
Todo te lo tragaste, como la lejanía.
Como el mar, como el tiempo. Todo en ti fue naufragio”

En ese mismo instante a pocos metros de Rebecca, la figura de un hombre comienza un lento camino en busca del mar

“Era la alegre hora del asalto y el beso.
La hora del estupor que ardía como un faro.
Ansiedad de piloto, furia de buzo ciego,
turbia embriaguez de amor, todo en ti fue naufragio”

Una parejita que se daba arrumacos en la arena observó al hombre entrando a la mar, se reían de este loco de traje caminando por la arena recitando un poema

“Hice retroceder la muralla de sombra.
Anduve más allá del deseo y del acto.
Oh carne, carne mía, mujer que amé y perdí,
a ti en esta hora húmeda, evoco y hago canto”

A Rebecca la temblaba la carta en las manos, y el corazón en el pecho

“Ah mujer, no sé cómo pudiste contenerme
en la tierra de tu alma, y en la cruz de tus brazos!
Mi deseo de ti fue el más terrible y corto,
el más revuelto y ebrio, el más tirante y ávido”

El hombre se sumergía lentamente recitando a viva voz, la pareja de la playa comprendió de que se trataba y llamó a emergencias rápidamente

“Ese fue mi destino y en él viajó mi anhelo,
y en el cayó mi anhelo, todo en ti fue naufragio!
Oh sentina de escombros, en ti todo caía,
qué dolor no exprimiste, qué olas no te ahogaron”

Rebecca era un mar de lagrimas, bajo un mar de estrellas que tiritaban en la lejana galaxia de los recuerdos, en la nebulosa oculta del arrepentimiento, en el infinito lamento del universo.

“Es la hora de partir, la dura y fría hora
que la noche sujeta a todo horario.
El cinturón ruidoso del mar ciñe la costa.
Surgen frías estrellas, emigran negros pájaros”

Se escuchan sirenas acercarse a lo lejos, las luces de las ambulancias llegan hasta la casa de la playa tiñendo de azul y rojo el rostro de Rebecca en llantos.
El hombre se entregó a la mar, en un canto desesperado.

“Sólo la sombra trémula se retuerce en mis manos.
Ah más allá de todo. Ah más allá de todo.
Es la hora de partir. Oh abandonado”

FIN
 
cromatica,07.08.2012
Lamento mucho no haber andado por aquí para colaborar, Strom... :S más.. qué bien salió éste cuento! me ha gustado mucho! Hugo: te has lucido... Silvi: tú siempre sumando, facilitando, agregando... Lagunita: hacía tiempo que no te leía y me gusta tanto hacerlo! celebro encontrarte precisamente en este foro!... y a Líder qué decirle? que ha dado el puntapié para este espacio creativo, intertexto incluido, que se ha sumergido en los estados de ánimo del personaje, en su aparente locura y en la cordura que da el tener claro el amor, al punto de no ver más alternativas. Bravo por los cuatro!

Estaré más atenta, Strom, por si puedo aportar. Felicidades a tí por tu trabajo, encomiable.

 
rhcastro,07.08.2012
Creo que es la primera vez que escriben un cuento triste.
 
musas-muertas,07.08.2012
Quedo muuuuyyy bien... Neruda estaria Orgulloso y yo tambien de Uds...Felicitaciones a todos, dificil y excelente final Hugo... muy buen trabajo...
Adhiero a los comentarios de Stromboli... un honor estar entre Uds.
 
lider_de_masas,07.08.2012
Acabo de conectarme, y veo con agrado que el cuento 20 ha finalizado. ¡ Y de qué manera ¡. Hugo has estado soberbio, gracias de nuevo por el ofrecimiento y por esta maravilla de final. A mis compañeros de cuento, que decirles, que han estado soberbios, Silvi, laguninta, felicidades, de corazón.

bEmpieza la fase de taller:/b

El inicio ( como todos mis inicios ) ahora empieza la crítica – extenso y con demasiados detalles – pero yo soy así, trate de dibujar una situación límite, el protagonista roto, con una angustia tal, que podía desarrollar cualquier conducta, pero me cuide mucho de no mostrar ningún culpable. La idea del poema 20 me vino en flash, con una conversación con Stromboli. Otra cosa, no me ha gustado nada, mi descripción de la televisión encendida, la idea me gusta, pero no como me ha quedado, y la parte cuando Roberto toma el taxi, está mal diseñada. Eso es todo, ahora os toca a todos vosotros, opinar/criticar en la fase de taller, verdaderamente es lo que va a enriquecernos.
 
Stromboli,07.08.2012
Líder_de_ masas:
Idea original de Líder-de-masas: Comparar el cuento nº 20 con el poema nº 20 de Neruda.
Leo por enésima vez el texto. No encuentro sentido a hablar del color azul de la televisión, no el comentar que ve la película por Blue Ray dá indicios de cierto nivel económico de Roberto, el protagonista.
Juega con el nª 20, “20 palabras, en una despedida”. Una manera muy fría de despedirse, en una nota.
El personaje, un tanto paranóico, se deja llevar por la derrota y los celos. Su nota para el juez deja entrever que “algo va a pasar”. Nos deja a los lectores en suspenso.

Lagunita: Se adentra en el perfil psicológico del personaje, su derrota, sus celos. Se intuye un accidente…. (Loable el tener que rehacer el texto, al borrarse el foro accidentalmente)
Silvimar – (Tengo que dar las gracias públicamente por la paciencia que tuvo conmigo. También rehízo su parte) Nos presenta a Roberto en el hospital. Sin recordar nada. Enlaza a mi modo de ver, a la perfeccion la parte de Líder y de Lagunita. Enlaza la idea original mencionando partes del poema nº 20, trama una situación angustiosa, vemos al protagonista abandonado a su suerte en un hospicio.
Hugodemerlo:
Hábil, hugodemerlo nos lleva a Rebecca, la mujer, que lo busca sin éxito. Sigue con el homenaje a Neruda incluyendo los poemas de “La canción desesperada”, en palabras de Roberto cobrán fuerza, Roberto en su desesperación…. Un final trágico, pero que en este cuento no podría ser de otra manera.
Un relato desde sus incios nos conmueve la melancolía, depresión del personaje, su ira, miedo a perder a su familia, desesperación. Creo que los cuatro han sabido componer un texto difícil, pero han salido airosos. Mi más sincera felicitación.
 
silvimar-,07.08.2012
Me gustó el final de Hugo, no podía ser de otra manera o si...pero le dio el toque dramático que todos habíamos querido decir, después de tantos accidentes con el foro creo que fue para bien, por lo menos de mi parte que cambie casi todo, felicitaciones a mis compañeros que cada día se superan mas, abrazoossss!!!!!!
Con lagunita me llevé una sorpresa, siempre pensé que era una poetiza, o muy buena prosista, me encanta que participen y nos den tantas sorpresas, de lider ni hablar!!! ugo un capo!
 
silvimar-,07.08.2012
me faltó la h de hugo porque no me anda bien la tecla de la mayúscula..perdón
 
IGnus,07.08.2012
Quedó muy entretenido el relato. Es cierto, la primera vez que leo aquí uno con triste final.
Me quedó igual una pequeña discordancia en la mente. Me parece que el protagonista viajaba en auto (taxi), luego el accidente sucedió en avión.
Al margen de este pequeño detalle, la historia quedó muy bien armada, y casi no se notan los nexos entre autores.
Nota aparte para el final de Hugo: Hermoso. Una nueva faceta que no te conocía Amigo, y creo que vos tampoco sabías que podías escribir así!.
Un Abrazo a todos y mis felicitaciones.
 
ZEPOL,07.08.2012
Lider abre el escenario. Con el poema de Neruda inaugura una amplia avenida que invita a caminar hacia la soledad y la tristeza. Y al avanzar en esa dirección, va dejando caer detalles que afianzan el rumbo y consolidan la sensación de abandono. ¿Acaso se puede premiar tan buen oficio con sólo veinte palabras?

Lagunita se adentra en la mente del protagonista y le retuerce el brazo a los recuerdos intentando perfilar la naturaleza del sujeto.

Silvimar inmoviliza al protagonista y lo casa con la soledad en el altar de un hospital y lo divorcia de la vida al abandonarlo en un hospicio.

Y al final, qué final ! el señor Hugo, don Hugo, nos regala un poema que desde mi humilde perspectiva de diletante desconocedor de las letras, supera al señor Neruda (del cual sólo conozco el poema que nos transcribe Lider). Por una cabeza, don Hugo. Por una cabeza gana usted al famoso.
 
silvimar-,07.08.2012
Ignus, quizás me expresé mal , quise decir que el recordó el avión que había tomado en el aeropuerto de Prat, después tomó el taxi del accidente.
 
Stromboli,07.08.2012
"El cuento nº 20. Un homenaje a Neruda" creo que podría ser el título.
¿A alguién se le ocurre otro?

Pronto empezaremos con el cuento nº 20. Les diré que los escritores nos nutrimos de las críticas, de los comentarios, de las correcciones. Ahora es el momento de que lo hagan libremente, el cuento nº 21 se está fraguando...
 
Stromboli,07.08.2012
Fé de erratas: "Pronto comenzaremos con el cuento nº 21" Disculpen
 
IGnus,07.08.2012
Está bien Silvimar-, tal vez yo tampoco lo leí profundamente. La idea que me quedó en la cabeza era esa, pero también puede ser mala lectura.
Saludos!
 
umbrio,07.08.2012
Felicidades a todos. Hugo ingenioso rematar con la canción desesperada.
 
hugodemerlo,07.08.2012
Por una cabeza,
todas las locuras.
Su boca que besa,
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabezaaaa!
Muchachos y muchachas creo que nuestro querido Zepol, a perdido la cabeza! Jajaja!

Bueno, me gusta bastante como quedó el cuento (que por nadada de casualidad, es el número 20), espero que nuestra gran maestra le haga los retoques necesarios antes de ponerlo en el club.
Ignus tiene razón, mi yo pensé poder escribir algo así, que tampoco es para tanto!
Creo que estaba para alguien como Cromita!
Pero nos quedó un lindo cuento entre los cuatro, un pequeño homenaje a un grande entre los grandes, (sí habremos levantado minas juntos) y con un "toque" de Alfonsina en el final.
 
IGnus,07.08.2012
Es cierto Hugo!... Me hiciste acordar todo el tiempo de Alfonsina, pero este era "Alfonsino", Igual no dice si era en Mar del Plata!.. Jaja!. Genial Amigo!
 
hugodemerlo,07.08.2012
Que les parece
"20 poemas de amor y un hombre desesperado"
 
ninive,07.08.2012
Queremos taller¿¿ pue allí va: miren que soy dura!!

Inicio :comenzamos con la primera frase que es en la lista de Zepol que recordarán lo que se denomina REDUNDANCIA
Roberto VUELVE a leer en voz alta por ENESIMA VEZ. Uno de esos dos conceptos redunda, está de más.

un dolor que se va acrecentando en cada” lectura", y ya son muchas las" lecturas” de esta noche, y aún mas las” lecturas “de este poema, en las últimas dos semanas ...

El autor puede alegar que lo hizo a propósito pero señalo esto también como repetición o redudndancia. Una “lectura” se puede obviar.
La televisión que queda encendida no molesta, molesta a citación del color azul abasurdo de la lealtad y la confianza.


................Veinte palabras, veinte, otra vez el veinte, ¿ Acaso se puede romper un matrimonio en veinte palabras?Aquí la repetición sí se justifica recalca penetra, está muy bien..................

Los ojos “”tiritan”””, no me parece logrado
.........................
garabatea rápidamente unas letras, con la pluma Mont Blanc que le regalo para su cumpleaños,” dobla meticulosamente la carta por la mitad “””””””””exacta”””””””””””, ¿necitábamos la palabra exacta?, ¿no era suficiente la mitad?
...................
detiene en la calle, maleta en mano a un taxi, “””””””””””levantando””””””” el brazo (y haciendo una señal.)
No era suficiente levantar el brazo¿¿¿¿¿¿¿

DE LO que Llego a la conclusión que el inicio adolece de repeticiones inútiles . Parece que lider-de-masas no le tiene confianza a la capacidad de comprensión del lector.
 
Stromboli,07.08.2012
El título propuesto por hugodemerlo lo considero de lo más acertado.

El cuento nº 20 pasará a englosar elclubdelapaginaazul, cuando nuestra coordinadora ninive lo considere oportuno.

Mientras.... Vayan afilando lápices, poniendo en marcha sus PC que el cuento nº 21 viene cargado de sorpresas con el inicio de un gran autor.

Dejemos reposar las ideas... ¡Mañana miércoles empezamos!
 
leobrizuela,07.08.2012
Confieso que ando un poco distraído por la ocupaciones (hay que comer a diario), el tiempo es corto y la lectura del foro es larga. No elaboré, por ello, una crítica desmenuzada del cuento 20 en su totalidad; no obstante me impresionó gratamente el final de hugodemerlo. Le dió un toque estético superlativo introduciendo otro gran poema muy a tono con el propósito del cuento, concretando un final de jerarquía. Me gustó el cuento en general, al margen de las desinteligencias en los indicios que no hacen al fondo de la historia. Mis felicitaciones y mi placer por la llegada de varios cuenteros deseosos de intervenir en el taller. Para Stromboli y Nínive, mi saludo y agradecimiento por sus trabajos.
 
rhcastro,07.08.2012
El cierre me pareció de lo mejor. Leí algunas faltas ortográficas que supongo ya corrigieron.
Es todo.-
 
hugodemerlo,07.08.2012
Me encanta lo que dice ninive!
no tener confianza en la capacidad de comprensión del lector!
es algo que aprendí aquí, en la pagina azul, me iba por las ramas queriendo explicar cosas obvias, y en estos talleres lo fui corrigiendo, y espero seguir corrigiendo y aprendiendo todo lo que pueda, al lado de tanto talento que inunda la pagina!
son unos genios y ademas muy buenas personas, de todos se aprende algo.
quiero agregar algo, la gran dedicación y las ganas que le pone Dolores al taller!
mi voto para que siga hasta que vuelva la maestra!
 
leobrizuela,07.08.2012
Hugo, el mensaje de Nínive apunta a algo que debemos manejar con mucho equilibrio.
A veces escribimos tratado de ser muy explícitos, para no resultar incomprensibles para cierto público y eso es peligroso en la medida que, para el ojo lector consuetudinario, resultará superfluo; más aún, se arriesga uno a ofender su inteligencia. Existirá necesariamente una dosis sutil de misterio, cuya revelación se debe inducir en la mente del lector a fin de que comparta el mensaje y le permita cierta complicidad no expresada.
Tampoco por ello se debe incurrir en un hermetismo que torne incomprensible o ambiguo un texto, en la suposición que el lector siempre es avezado y reconoce sin más un concepto o antecedente literario o no.
El equilibrio es un secreto que se llega a conocer cuando se juntan la experiencia y el conocimiento del público al que nos dirigimos. Y es otra de las condiciones que rijen el oficio del buen escritor.
 
hugodemerlo,08.08.2012
Comparto totalmente!
Hay que ser cuidadoso en no ser muy exagerados en detalles obvios y no muy simples y escasos a veces!
Otra cosa también que me interesa son el uso de palabras "raras" por no decir de usos no muy frecuentes, soy de los que no le gusta leer un libro con un diccionario al lado.
Hay que tener cuidado de no caer en el abuso de palabras extrañas para quedar más "cool" en el relato y que lleven al lector al abandono por "nocaut técnico"
 
ninive,08.08.2012
Una anotación más y después ya no señalo detalles en este cuento.
Si les molesta lo que hago me lo dicen. Yo soy maestra de alma y cuando dijerontaller, correccón, crecimiento por medio de la crítica me llamaron a mi juego.
Soy breve. Aconsejo que le den una repasadita al uso del gerundio. en esta frase que copio del FINAL está muy mal usado y MUY usado. tres gerundios en una frase corta.

Una parejita que se daba arrumacos en la arena observó al hombre "entrando" a la mar, se reían de este loco de traje "caminando" por la arena "recitando" un poema.

EL GERUNdio es El segundo verbo del mismo sujeto.
Aquí el sujeto es UNA PAREJITA entonces los gerundios son el segundo verbo de ese sujeto

Les doy un ejemplo muy comprensible.
Si digo El niño entró en la casa con el perro ladrando .¿qué entendemos? que quien ladra es elniño porque es el sujeto de la frase.
SE DEBE decir El niño entró en la casa con el perro que ladraba.

 
hugodemerlo,08.08.2012
No entendí un pomo maestra!
un poco mas explicativo? lo del perro y el niño está bien.
en mi caso como es?
 
hugodemerlo,08.08.2012
uf! tengo mucho que aprender!
 
ninive,08.08.2012
Una parejita que se daba arrumacos en la arena observó al hombre que ESTABA"entrando" a la mar, se reían de este loco de traje QUE caminaba ( "caminando") por la arena "recitando" un poema.

hola Hugo. Di el ejemplo del perro yel niño porque siendo obvio que el niño no ladra es fácil de comprender.

en tu caso, como ves, si dejamos a UNA PAREJITA como sujeto todos los gerundios están mal usados,con el retoque se puede enmendar el problema. Consulta una gramática . Esta es la regla que rige en tu caso pero hay muchas otras.





 
lider_de_masas,08.08.2012
A mi no me molesta en absoluto, la nueva forma que toma el taller, es absolutamente necesaria si queremos crecer. Estoy totalmente de acuerdo en la correcciones que a mi me tocan, solo dos cosas: lo de los ojos tiritan, es un guiño al propio poema, “ los astros tiritan” y a veces ocurre, que cuando se va a romper a llorar los ojos tienen un movimiento ( véase la imagen en el comic manga ) es muy particular y propia.

En cuanto a la inclusión de la palabra “””””” exacta “””””””, con ello quería remarcar el estado paranoico de Roberto, los paranoicos suelen ser personas rigurosas y muy meticulosas en sus trabajos, no es lo mismo doblar una carta por la mitad, que cuidarse mucho de doblarla por la mitad exacta, aunque entonces vuelvo a caer en el error de dar demasiadas explicaciones, sin confiar en la capacidad de comprensión del lector. Creo que este es el verdadero sentido de este taller, desmenuzarnos, hacer ver los errores, para mejorar, a un taller se asiste para ser reparado, y en lo que a mi me toca, necesito un buen repaso. Seria lamentable no aprovechar la oportunidad que nos brinda Ninive, y además gratis, gracias a su admirable vocación. Un saludo

 
Stromboli,08.08.2012
lider_de_masas, sí me dí cuenta de el guiño que hacías del poema, "tiritan" en tu texto.
Lo que yo creo que se debió ahondar (cualquiera de los que te precedían como lagunita o silvimar) en el perfil psicológico del personaje de Roberto, para su mejor comprensión de por qué le abandonó su esposa con una fría nota. En vez de paranóico, le convertiría en obsesivo compulsivo. Alguien con quién es un infierno la convivencia.

hugodemerlo repito, me gustó su parte en la que incluyó como homenaje a Neruda "Una canción desesperada", con un pequeño error en la frase incluyendo un gerundio. Eso pasa en las mejores familias, compañero. No somos escritores profesionales, sino estaríamos firmando libros, publicando, y dedicándo todo el tiempo a escribir. Sólo somos aficionados a escribir, unos con mejor fortuna que otros.

Si nadie aporta algún otro título, coincido con el propuesto por hugodemerlo "20 poemas de amor y un hombre desesperado"

Cuenteros que aún no han escrito en este taller están a la espera de inciar el cuento nº 21.

Espero la inclusión de este cuento compartido en el clubdelapaginaazul.

Mientras... esten atentos al foro.
 
lagunita,08.08.2012

Hola a todos ustedes; no se imaginan la felicidad que tengo de participar en estos cuentos maravillosos.
Todos saben que escribo poesía, pero como soy una persona que me gusta escribir de todo, aunque muchas veces no los muestre lo hago con mucho placer.
Este cuento quedo espectacular, me sorprendió la rapidez que logramos.
Stromboli, lo comenzó muy bien se nota que le gusta escribir cuentos a través de la poesía.
Silvimar también me sorprendió de lo bien que lo siguió.
Yo solo trate de acompañar, pero me gusta mucho hacerlo.
Que decir del poeta Hugodemerlo, manejo muy bien el final y componiendo un cuento junto a un poema sensacional, realmente todo hermoso que gente bella y de corazón.
Quiero agradecer a Nínive por su cooperación y su tiempo, y a todos los compañeros que no nombre antes pero que participaron con ninive, felicitarlos de corazón, espero seguir con ustedes si me necesitan, gracias amigos.
 
silvimar-,08.08.2012
Gracias por desmenuzar los textos, mi parte veo que es muy superficial, tendría que haber ahondado un poco más en el perfil de Roberto, pero como estaba apurada lo deje allí inmovilizado, tengo muchas cosas particulares pero no debería comprometerme si hago las cosas a la ligera, cuando esté segura que me sobra tiempo me propondré para escribir, por ahora tengo pilas de deberes para el taller (con sus respectivas correcciones) mientras tanto los voy leyendo que se aprende mucho. Coincido totalmente con eso de no poner cosas obvias en el texto, el lector es nuestra otra parte, que imagine y cree su propia versión!
 
Stromboli,08.08.2012
Un poco de orden... Nadie se sienta ofendido. Yo sólo sugiero que se puede ahondar en la parte psicológica para que el lector "piense" "sienta" como Roberto en ese estado emocional en el que se encuentra. Es muy díficil "ponerse en lugar de", silvimar- no te sientas mal en ningún momento, yo fuí la culpable de que no guardé los textos de lagunita y tuyos cuando accidentalmente se borró todo el foro. Así que tanto lagunita como tú tuvisteis que escribir "contra reloj" y el resultado es bueno.

Quiero hacer hincapié que los cuentos compartidos se hacen un poco "a salto de mata", sin pensar en profundidad para dar continuidad al foro, que cada cuentero de acuerdo, piense, elabore, invente según lea las diferentes partes de cada uno. No hay que demorarse, pero considero que cada cuentero necesita su tiempo. Unos tienen más facilidad que otros al escribir, al elaborar una trama.

Repito que todos somos válidos, y ninguno es profesional de las letras.

Un error que quiero aclarar, lagunita: te invité porque sabía de tu valía pero el inicio no es mío, sino de líder_de_masas.

 
ZEPOL,08.08.2012
Vengo como estraterreste, solo paso y me voy volando. Es para felicitar (y si acaso envidiar un poco, pero cada uno en lo suyo) el tremendo caudal de conocimientos de Nínive. Es un pozo en el que se puede abrevar con confianza.
 
silvimar-,08.08.2012
Hola extraterrestre! coincido totalmente con vos aunque no seas de este planeta....jajaja
 
hugodemerlo,08.08.2012
Zepol. "mi marciano favorito" se acuerdan de la serie? Nano nano, jajaja (tenemos que hacer una de marcianos) es verdad ninive es un pozo del que nunca voy a salir! Jajaja como sabe esta mujer por Dios!
Y bueno trataré de mejorar de a poquito, lo bueno es que tenemos a ninive para corregir jeje!
Me encantó lo de lagunita, me recibí de Poeta! Jajaja, es que no me conoce todavía.
Ma gusta todo esto siempre se rescata algo!
Bueno sigamos adelante muchachos y muchachas!
 
Stromboli,08.08.2012
¡Cuenteros tengo el honor de participarles que el cuento nº 20 lo pueden comentar en el clubdelapaginaazul!

Pongase a trabajar las neuronas, echénle imaginación, y sin demora empezamos ya con el cuento nº 21. ¡Ya tenía ganas! Las diferentes nacionalidades de los cuenteros lo hacen más interesante.


CUENTO Nº 21
inicio musas-muertas
desarrollo - cuenterodeilusiones
desarrollo hacia el final . rigores
final- yosoyasi2


Me despierta el olor intenso. Casi no puedo respirar, identifico, aceite, mezclado con un desagradable tufo a carne chamuscada. La oscuridad es absoluta. Un fuerte dolor de cabeza me genera nauseas, me palpo y noto un liquido viscoso que mana de mi frente, felizmente la herida no es profunda. un ominoso siseo eléctrico se percibe a mis espaldas, fuera de ese sonido no hay otros signos de vida. Claramente he estado desmayado, mis recuerdos vuelven como fogonazos a mi pasado inmediato.

Soy un pasajero común y corriente del vuelo de Aerolíneas Argentinas numero AR1302 con partida desde Ezeiza, Buenos Aires y destino el aeropuerto Miami International, en Miami Florida, EEUU. El vuelo partió sin demoras a las 23:15 y horario previsto de arribo a las 07:25 hora local de la mañana siguiente.
Dormía plácidamente cuando un sacudón me despertó. Dos minutos después, una azafata con voz nerviosa nos comunico de cierto desperfecto en el avión y que intentarían aterrizar de emergencia en el aeropuerto más cercano. Con un "Por favor abróchense los cinturones de seguridad" corto la comunicación. Recuerdo que verifique mi reloj pulsera mientras al avión iniciaba un descenso abrupto y un escalofriante temblor provenía de la parte trasera de la nave. La hora era 03:05 de la madrugada. El griterío a bordo del avión es infernal a mi lado un pasajero llora desconsoladamente. Cierro los ojos, un acto totalmente innecesario, me agacho sobre mis piernas, involuntariamente me abrazo a mi bolso de mano y espero lo peor. Un ruido estruendoso, un golpe y me desmayo.

Obviamente soy protagonista de un accidente aéreo. No puedo ver nada, todavía tengo entre mis manos mi bolso de viaje, me aferro a él y trato de incorporarme. el asiento delantero me oprime las piernas. Luego de varios intentos logro destrabarme, en mis movimientos empujo sin querer el cuerpo de mi compañero de asiento. Mo me toma mucho determinar al tacto de que el hombre que lloraba ahora está muerto.
Aguzo todos mis sentidos. una breve brisa me indica que "adelante y a la derecha" el casco del avión tiene una fisura que comunica con el exterior. Me arrastro sobre asientos valijas, cadáveres y bolsos de mano. Aparentemente nadie ha sobrevivido, solo yo. Finalmente llego a una abertura, tomo coraje y salto desconociendo la altura del piso.
Caigo rodando y termino sentado sobre un mullido frondoso follaje, a lo lejos se escucha el murmullo de agua.
Respiro profundamente y hago mis cálculos.
Mentalmente imagino el globo terráqueo, trazo una línea entre Buenos Aires y Miami. Distancia? poco más de siete mil kilómetros.
Sigo calculando mentalmente tiempo de viaje hora de salida, hora de llegada, diferencia horaria de ciudades ..."hmmm" me digo, "un poco más de nueve horas de vuelo". Divido los kilómetros por las horas, sumo las horas de viaje hasta el accidente y visualizo mentalmente un punto en el mapamundi. Un terror invade mi alma. Estoy en el medio del "Mato Grosso" en Brasil, probablemente cerca de las nacientes del mismísimo rio Amazonas. La oscuridad es total, no veo nada, Poco importa que sea de noche, cuando salga el sol seguiré igual... me olvide de comentar. Soy ciego de nacimiento.





 
hugodemerlo,08.08.2012
aaaah, buenísimoooo! Da para tantas cosas!
Uf, las que estoy imaginando!
 
IGnus,08.08.2012
¡Wow!. ¡Wow! ¡Wow!.... Me tildé........
 
cuenterodeilusiones,08.08.2012
Ya dejé mi aporte y se verá próximamente, saludos amigos cuenteros y poetas sin sueldo je je ...
 
cuenterodeilusiones,08.08.2012
Ya dejé mi aporte y se verá próximamente, saludos amigos cuenteros y poetas sin sueldo je je ...
 
hugodemerlo,08.08.2012
Hay que subirlo acá, no mandarlo en privado
 
hugodemerlo,08.08.2012
Hay que subirlo acá, no mandarlo en privado
 
Stromboli,08.08.2012
CUENTO Nº 21
inicio musas-muertas
desarrollo - cuenterodeilusiones
desarrollo hacia el final . rigores
final- yosoyasi2


Me despierta el olor intenso. Casi no puedo respirar, identifico, aceite, mezclado con un desagradable tufo a carne chamuscada. La oscuridad es absoluta. Un fuerte dolor de cabeza me genera nauseas, me palpo y noto un liquido viscoso que mana de mi frente, felizmente la herida no es profunda. un ominoso siseo eléctrico se percibe a mis espaldas, fuera de ese sonido no hay otros signos de vida. Claramente he estado desmayado, mis recuerdos vuelven como fogonazos a mi pasado inmediato.

Soy un pasajero común y corriente del vuelo de Aerolíneas Argentinas numero AR1302 con partida desde Ezeiza, Buenos Aires y destino el aeropuerto Miami International, en Miami Florida, EEUU. El vuelo partió sin demoras a las 23:15 y horario previsto de arribo a las 07:25 hora local de la mañana siguiente.
Dormía plácidamente cuando un sacudón me despertó. Dos minutos después, una azafata con voz nerviosa nos comunico de cierto desperfecto en el avión y que intentarían aterrizar de emergencia en el aeropuerto más cercano. Con un "Por favor abróchense los cinturones de seguridad" corto la comunicación. Recuerdo que verifique mi reloj pulsera mientras al avión iniciaba un descenso abrupto y un escalofriante temblor provenía de la parte trasera de la nave. La hora era 03:05 de la madrugada. El griterío a bordo del avión es infernal a mi lado un pasajero llora desconsoladamente. Cierro los ojos, un acto totalmente innecesario, me agacho sobre mis piernas, involuntariamente me abrazo a mi bolso de mano y espero lo peor. Un ruido estruendoso, un golpe y me desmayo.

Obviamente soy protagonista de un accidente aéreo. No puedo ver nada, todavía tengo entre mis manos mi bolso de viaje, me aferro a él y trato de incorporarme. el asiento delantero me oprime las piernas. Luego de varios intentos logro destrabarme, en mis movimientos empujo sin querer el cuerpo de mi compañero de asiento. Mo me toma mucho determinar al tacto de que el hombre que lloraba ahora está muerto.
Aguzo todos mis sentidos. una breve brisa me indica que "adelante y a la derecha" el casco del avión tiene una fisura que comunica con el exterior. Me arrastro sobre asientos valijas, cadáveres y bolsos de mano. Aparentemente nadie ha sobrevivido, solo yo. Finalmente llego a una abertura, tomo coraje y salto desconociendo la altura del piso.
Caigo rodando y termino sentado sobre un mullido frondoso follaje, a lo lejos se escucha el murmullo de agua.
Respiro profundamente y hago mis cálculos.
Mentalmente imagino el globo terráqueo, trazo una línea entre Buenos Aires y Miami. Distancia? poco más de siete mil kilómetros.
Sigo calculando mentalmente tiempo de viaje hora de salida, hora de llegada, diferencia horaria de ciudades ..."hmmm" me digo, "un poco más de nueve horas de vuelo". Divido los kilómetros por las horas, sumo las horas de viaje hasta el accidente y visualizo mentalmente un punto en el mapamundi. Un terror invade mi alma. Estoy en el medio del "Mato Grosso" en Brasil, probablemente cerca de las nacientes del mismísimo rio Amazonas. La oscuridad es total, no veo nada, Poco importa que sea de noche, cuando salga el sol seguiré igual... me olvide de comentar. Soy ciego de nacimiento.
Desarrollo – cuenterodeilusiones

¡Ay! horror del que no posee la luz de sus ojos y se siente abandonado en la fronda inhumana , herido, cansado, y con la angustia infernal del sediento que no sabe si encontrará agua antes de morir. Mi mente parecía entrar en ebullición, el resto de mis sentidos desaparecieron de repente. Traté de utilizar la ecolocalización para orientarme, esta técnica consiste en chasquear la lengua e interpretar los ecos a mí alrededor para definir mentalmente el tamaño y la ubicación de los objetos pero no me había dado cuenta de algo, mi lengua sangraba, estaba partida en dos. Creí desmayarme con el olor a carne humana chamuscada mezclado con gasolina y caucho derretido, vomité muchas veces , hasta quedar desmadejado en el suelo del bosque.

Me desmayé nuevamente y volví a despertar rato después, no sé cuánto tiempo habría pasado, minutos, horas, no lo sabía. Me sentí como un niño desamparado y anhelé la dulce voz de mi madre que en mis eternas noches sin luz me arrulló con sus cantos, entonces mis sentidos fueron regresando nuevamente poco a poco, escuché nuevamente un arroyo a unos cuantos metros, podían ser diez o veinte, no sabía en realidad pero debía conseguir agua. Me arrastré como pude entre el barro y la hojarasca, las espinas se clavaban en mis manos, sentía que me sudaba el rostro pero el sabor dulzón en mis labios me hacía saber que era mi propia sangre la que chorreaba por mis mejillas. ¡Upa! ¡Vamos! ¡Tú puedes! ¡Solo un esfuerzo más!. Después de una lucha titánica logré alcanzar el riachuelo y estiré mis manos para sacar el preciado líquido, algo atenazó mi mano, creo que era un cangrejo pero soporté el dolor.

Gracias Dios mío que inventaste el agua para revitalizar el cuerpo y el alma. Saciada la inclemente sed volví a calcular nuevamente mi derrotero, "El Mato Grosso", evidentemente era casi imposible que me rescatarán, moriría de hambre o devorado por las fieras de la selva. Retrocedí un poco en el tiempo y recordé cuando mi amigo Juan Clemente Rodríguez, un prestigioso oftalmólogo de la ciudad de Buenos Aires me habló de ese tratamiento casi milagroso a base de células madre que podía restaurar las corneas de mis ojos. Tú no ibas a nacer ciego me dijo, es un caso raro el tuyo pero te aseguro que hay una gran posibilidad de que puedas llegar a ver la luz del día.

Con esa esperanza me trasladaba a la ciudad de Miami pero ahora me veía abandonado en la mitad de las amazonas. Oré en silencio, nunca creí en ti Señor pero ahora necesito tu ayuda clamé en la oscuridad. De repente me pareció que percibía una claridad en los cielos infinitos

desarrollo hacia el final -rigores
 
Stromboli,08.08.2012
Tiene razón hugodemerlo, en el anterior foro de cuentocompartido cada cuentero ponía su participación directamente en el foro, para darle continuidad. El resto, comentaba, diseccionaba, discernía sobre el trabajo del escritor seleccionado para la ocasión.

Pedí que me mandaran sus partes en mi LDV en privado, pero eso es para los INICIOS, y voluntarios que se anoten para futuros cuentoscompartidos.

Disculpen, y demos continuidad a este foro. Dejemos que rigores dé el do de pecho y haga su desarrollo. Sin prisa pero sin pausa.

Y para broche de oro de este cuento una valiente mujer, que dará el final: yosoyasi2

Cuenteros, disponen de tiempo desde ¡YA!

 
silvimar-,08.08.2012
Recién vengo y me encuentro con tantas novedades!!! Bien por los nuevos escritores y por los viejos también, me alegro que se vayan arrimando gente, saludos!!!
 
leobrizuela,08.08.2012
¿Eso de viejo por quién va?
 
cuenterodeilusiones,08.08.2012
Una pregunta cuando el ciego verificó el reloj pulsera a que se refiere, teniendo en cuanta que es ciego y como sabía exactamente los horarios de las cosas...
 
hugodemerlo,09.08.2012
Oiga!
viejos son los trapos!
 
IGnus,09.08.2012
Cuenterodeilusiones... Los ciegos utilizan relojes de pulsera sin la tapa de vidrio, para tocar las agujas. (Lo vi en muchas películas, Jaja).
 
musas-muertas,09.08.2012
Asi es Ignus..., Cuenterodeilusiones por eso verificó el reloj y no "vió"...
 
ninive,09.08.2012
Recomiendo a los participantes del cuento 21 que conserven copia de su texto para prevenir posibles pérdidas del foro y se pueda reconstruir el cuento sin problemas.
 
Stromboli,09.08.2012
cuenterodeilusicones, los invidentes tienen relojes especiales, "son relojes parlantes" que te hablan según la hora, pulsando un botón.

Tengo guardado en word el cuento, para que no pase lo que en el anterior.

¿rigores? ¿dónde estas rigores? Esperamos tu participación a la mayor brevedad posible.

Buenos días a todos. ¡Seguimos!
 
Stromboli,09.08.2012
Rectifico: el nick correcto es :cuenterodeilusiones, perdona Jose. He leído con atención tu desarrollo y es brillante, te pusiste en la piel de un invidente. Derroche de imaginación la tuya y dás paso al cuentero rigores, con elegancia le pasas el relevo.

 
rigores,09.08.2012
Bueno tranquilos, ya llegue lo que pasa es que andaba de viaje...muy interesante la trama de cuenterodeilusiones, espero que la amiga yosoyasi, que me anda apurando, se sienta a gusto, para realizar su remate de 4 X 100, hablando pues, en terminos olimpicos...
 
Stromboli,09.08.2012
Amigo rigores, lea detenidamente. Deje madurar la idea. Y con calma se pone a escribir. Es tarde para mí. Buenas noches a todos.
 
rigores,09.08.2012
Mi condición de ciego pudiera ser vista por ustedes como una sentencia de muerte para estas circunstancias, pero no les parece extraño que dentro de todos los pasajeros...precisamente yo, haya sido el único sobreviviente.

Pero así como hay malas noticias también las hay buenas y estas son que cuando uno pierde o no posee un sentido los demás de alguna manera tratan de reducir la brecha, en eso de percibir al mundo y más en esta hora menguada de la 3 de la madrugada donde igualmente nadie con su mas perfecta visión hubiera podido verse la punta del píe en esta oscuridad total.

Y así percibiendo la diferencia de temperatura,... cual detector de infrarrojo, a través del tacto pude conseguir la ruta de salida del avión, y una vez fuera de él, el olor de la selva, no sé de que otra forma describírselos, me reto internamente a seguir luchando,...se ve que mis enlazadores de endorfinas funcionaban perfectamente.

¿Y que de mis oídos? oohhh que maravilloso concierto el de esa noche, y cual orquesta de cámara, los insectos eran los instrumentos de viento, los mamíferos predadores eran los tonos graves y el río que sonaba a los lejos era como un arpa, que me guiaría a la vida nuevamente,...realmente jamás pensé que la tecnología HD/estéreo/audio iba a ser tan útil en este trance.

Y finalmente el ultimo sentido, el gusto, poco tendría para ayudarme en este trance, salvo el de saber discernir cual tipo de comida sería eso, comida o por el contrario, sencillamente veneno,... menos mal que con el sensor cromatográfico que me fue instalado en las papilas gustativas hace un mes no voy a tener mayores problemas en detectar que será digerible y que no.


y así bien equipado como estaba, con toda la última tecnología cyborg realmente no fue problema encaminarme, ya me sentía cómodo caminando paralelo a la corriente del río rumbo al poblado más cercano, cuando un ruido ensordecedor parecido al de una avalancha o un tsunami venia incrementándose a una velocidad de 10 a la n por segundo, y pensé para que correr y así simplemente no opuse resistencia...

Y contra todo pronóstico desperté vivo en una sala que decía quirófano para cyborgs donde un doctor se me acerco y extendiéndome la mano me dijo: felicitaciones ejemplar Higgys ya puede pararse, venga conmigo a la sala de reuniones allá están esperándolo lo más granado en científicos e ingenieros de su sistema solar y todos están expectantes por escuchar el relato de sus experiencias.



 
rigores,09.08.2012
Me percate que el cuento lo seguí despues de musasmuertas y no despues de cuenterodeilusiones, sin embargo de alguna manera tambien funciona a partir del de cuentero, bueno ya ustedes verán que hacen con mi relato, jejeje.

Saludos y gracias por invitarme.
 
IGnus,10.08.2012
Estimado rigores y todos:
No quisiera herir tus sentimientos, pero a pesar de ser amante de la ciencia ficción (de chiquito tenía en una mano la mamadera y en la otra a Asimov), yo creo que te fuiste un poco de tema. Te voy a explicar por que:
musas-muertas y cuenterodeilusiones nos dejaron a un tipo ciego en el medio de la selva, con total incertidumbre acerca de su porvenir, con enormes limitaciones a causa de su ceguera, herido (hasta con la lengua partida), y especialmente con una cantidad infinita de miedo.
Todas esas cosas no se reflejan en tu relato, del cual no discuto. La calidad literaria ni la frondosa imaginación de hacer que el tipo sea un cyborg y forme parte de un plan mayor de ¿exploración? Por parte de alguna organización posiblemente alienígena... Pero este tipo tuyo no sentía nada de miedo, estaba muy seguro de si, y con medios cyborg para paliar su situación. es decir: un escenario demasiado diferente al de tus predecesores. Desde mi humilde entender, y quisiera saber lo que opina el reto del foro, yo te animaría a que intentes reescribir la historia, pero intentando mantener un poco mas la trama.
Perdón por interrumpir, pero no puedo con mi genio, ya intenté miles de veces meterlo de nuevo a la botella, pero se escapa el muy desgraciado....
 
rigores,10.08.2012
Ignus, arriba esta la explicación me confundi y segui el cuento de musas en lugar del de cuentero, por otro lado no estoy de acuerdo contigo en que hay que mantener la secuencia perse, eso sería muy aburrido.
 
cuenterodeilusiones,10.08.2012
Es verdad amigo rigores, tu escrito tiene mucha imaginación pero no se ajusta a la secuencia del relato. Saludos.
 
rigores,10.08.2012
Ojo, fue un error involuntario.
 
IGnus,10.08.2012
Amigo cuenterodeilusiones: Te cuento algo que descubrí hace poco: si después de hacer un post en el foro, presionas el botón de "actualizar" en tu navegador para ver si hay cambios en el foro, el sistema repetirá tu último post un montón de veces. La solución: hacer click en "Foros" y volver a entrar.
Saludos!
 
hugodemerlo,10.08.2012
Totalmente de acuerdo con Ignus, Rigores, seguro leíste bien a musas?
Está bueno lo que escribiste, pero no se ajusta, el hombre es de carne y hueso! Fíjate, repasa la parte de musas! Y sí escribes denuevo?
 
hugodemerlo,10.08.2012
jajaja ignus estaba por escribir lo mismo para cuentero! Jajaja estamos conectados en forma telesctica!
 
Stromboli,10.08.2012
He leído la parte de rigores, y no se ajusta en ningún momento al hilo conductor de cuenterodeilusiones, como el ha reconocido, se dejó llevar por el inicio de musas-muertas.

Una de las normas del cuento compartido, si no me equivoco es seguir el hilo conductor del antecesor cuentero, en este caso cuenterodeilusiones.

rigores, si te diste cuenta ¿por qué no rectificaste? Nuestra coordinadora ninive en un post anterior dice que para salir del paso no sirve eso de irse por la tangente, como es el caso de la ciencia-ficción.

No soy quién para decir si tienes que volver a reescribir el cuento. Es este un taller de aprendizaje, y creo que no es fácil seguir el cuento cuando no es tuyo, seguir el estilo, de otros. Es díficil, pero ahí reside el reto.

Espero que ninive dé su opinión, y todos los que escriben en este taller, o cualquier cuentero que lea este foro y quiera participar. (Repito por enésima vez, todos sin excepcion están invitados a comentar).

¡Por favor, emitan sus sugerencias con este cuento, porque me dejó K.O.!

 
yosoyasi2,10.08.2012
y cómo crees que me dejó a mi qu tenía que seguirlo¿
mejor me tomo una nave espacial y me voy a pasear con rigores
 
ninive,10.08.2012
Es comprensible que un nuevo colaborador se confunda y no asimile de primer momento el objetivo de este trabajo de creación grupal.
rigores aceptará que su parte no correspondía al tono de las partes anteriores y dirá si prefiere cambiar la parte o ceder el paso .
Podrás participar en un próximo cuento. Tu respuesta es esperada con urgencia ya que otra de las características de este foro es la fluidez.
Te doy tiempo para que copies tu parte antes de borrarla. Gracias y ánimo Un tropezón cualquiera da en la vía.
 
rhcastro,10.08.2012
Te esperamos rigores .
 
Stromboli,10.08.2012
Cuenteros, tenemos el fin de semana por delante. rigores, de tí depende. Si por algún motivo no puede ser. Avísanos, que estamos pendientes en el foro.
 
rigores,10.08.2012
Ok, a decir verdad despues que termine "mi obra maestra" y me di cuenta que tenia que seguir otro final (que pena) me dio fastidio por que ya el tema venía muy trillado y para poner "salidas honrosas" preferí dejarlo a su discreción, no obstante entendiendo que me he vuelto una piedrita en el zapato, voy a armar de tripas corazón a ver que me invento, les prometo que no será ciancia ficción para su alivio, pero nunca se sabe con que saldré...

PD: Hago un llamado a los participantes que traten de dejar su cuento en el climax, para que el que venga pueda tener un reto.
 
musas-muertas,10.08.2012
amigo Rigores... sin ningún animo de influenciar... este inicio pertenece a un cuento mio aun no finalizado, No digo que te hagan falta pero tengo algunas ideas que pueden serte de utilidad si quieres... si las necesitas me avisas...
 
Stromboli,10.08.2012
Buenas... son los dos excelentes escritores, creo que rigores saldrá del paso él solo. Le doy mil gracias por ponerse manos a la obra, e idear de nuevo otra continuación diferente. Doble mérito el suyo. Tomaté tu tiempo. Sin prisa, pero sin pausa.

Quedamos todos a la espera.
 
leobrizuela,10.08.2012
Para hugodmerlo: me apabullaste. ¿Qué cosa es la telesctica? Desasname, por favor.
Para rigores: El más pintado se equivoca y tenés razón al sugerir que quienes escriben los inicios y su continuación dejen el "pie" para el que sigue.
Por último, si se trata de terminar con un final fantástico conviene aclararlo de entrada, para no terminar con aquello de "...y al final me desperté. Por suerte era todo un sueño..." Salú.
 
rigores,10.08.2012
Stromboli, serías excelente editora, como le metes presión a la producción, jejeje
 
ninive,10.08.2012
Me gusta sacar provecho de los contratiempos. el despiste de rigores nos permite reflexionar sobre la responsabilidad de tomar la posta y correr en la misma dirección, nos permite a todos tener paciencia, ponernos en su lugar y desear que salga solo del atolladero. Lo esperamos y le aconsejo no desperdiciar la ayuda que le propone Musas-muertas.
 
hugodemerlo,10.08.2012
Leo amigo mío, eso me pasa por acelerar el dedo gordo en el teclado del celular! Jajaja, telepatica, era eso.
 
cuenterodeilusiones,10.08.2012
Yo no soy escritor, ni me precio de ser siquiera un buen aficionado, solo escribo lo que me dicta el alma, con un poco de pasión en cada palabra, no se de gramática ni conozco sus reglas, apenas me defiendo un poco con la ortografía, aún así sigo escribiendo porque es como plasmar un poco del alma, antes en un papel, ahora en un editor de texto en mi computadora, Saludos.
 
hugodemerlo,10.08.2012
cuenterodeilusiones...bienvenido al club!
 
cuenterodeilusiones,10.08.2012
Saludos, yo hice mi versión de una accidente de vuelo con mi propio tema central, le aclaro al señor hugodemerlo, que el tema de un accidente de vuelo, lo puede tomar cualquier persona.
 
IGnus,10.08.2012
Es lógico el escozor, amigo cuenterodeilusiones. Es el mismo tema... y es muy sugestivo que coincida justamente ahora con el cuento compartido. Creo que simplemente pecaste de inoportuno. Tal vez en otro momento...
Saludos!
 
rhcastro,10.08.2012
Bienvenido cuenterodeilusiones.
 
Stromboli,10.08.2012
Como todo puede pasar... si hay alguna "baja" de última hora que se anoten en mi ldv. No creo que los cuenteros teman a "la hoja en blanco" todos son de prestigio y han escrito bastante en esta Página.

A los "nuevos" tended un poco de paciencia con ellos, les puede venir "el miedo escénico" al saltar a la palestra, pero decidles que todos hemos pasado por ello, y hemos salido con un bien nutrido número de cuentos.

Buen fin de semana a todos.
 
cuenterodeilusiones,11.08.2012
Paso a despedirme de Stromboli, quién me invitó a este foro, gracias por haberlo hecho, ya te había explicado en privado mi opinión acerca del desarrollo del cuento, por eso había colocado en mi lugar un cuento, cuyo argumento es totalmente diferente con otros personajes y otra temática, obviamente es cierto que también al final de mi cuento narro un accidente de vuelo como yo creo que sería, en ningún momento tomé frases o palabras que no fuesen mías. Sin embargo, parece que un accidente de vuelo, es un tema que ya tiene derechos reservados, que pena, no sabía eso. A los señores Hugodemerlo e IGnus quienes quisieron hacer parecer eso como un plagio o algo peor, les digo que yo tengo mi conciencia tranquila porque el poco talento que Dios me haya dado es mío y no se lo he hurtado a nadie. La verdad no quiero participar ya en este foro, así que si pueden retirar mi aporte se los agradezco y que otros cuenteros continúen con el taller. Att: José Arbey Pacheco. Adiós.
 
IGnus,11.08.2012
Hey! Qué susceptible!.
Y bueno, los escritores nóbeles solemos ser seres my especiales. Te comprendo, cuenterodeilusiones, pero lo que no comparto es el renunciamiento a un compromiso asumido previamente con todo el foro.
Ysuponiendo que Hugo o yo estamos equivocados en nuestra apreciación, (aunque debes admitir que fue inoportuno de tu parte publicar ese cuento justamente ahora), lo que correspondería en todo caso sería un pedido de disculpas, previa presentación de las razones que te llevan a requerirlas.
Me parece poco serio renunciar a un trabajo en equipo por un simple o complejo malentendido o "bienentendido".
He dicho. Colorín colorado. Chim pum. Y me desquité de lo que pensaba. Ja!. Chupate esta mandarina!. En serio... No te lo tomes tan en serio!.
 
hugodemerlo,11.08.2012
Bueno que más agregar a lo que dice Ignus, lástima que el amigo cuenterodeilusiones haya eliminado el cuento así todos podían dar su opinión.
Pero es verdad son distintos el avión de musas cae en Brasil y el del amigo cuentero en Colombia...un par de metros más allá.
 
cuenterodeilusiones,11.08.2012
Como no tengo nada que ocultar, dejo aquí lo que había escrito en mi lugar. Siento que pasará esto amiga Stromboli. En el poco tiempo que hablamos te aprecié mucho, By By.

FUE BUENA LA VIDA

Esa noche antes del viaje tuve una extraña sensación, me dirigí hacia la cocina y vi a mi esposa cortando los tomates para la cena, quise abrazarla y darle besitos en el cuello pero ella me rechazaba,

-Déjame mi amor que estoy haciendo la cena- me decía.

-Ya Juliana deja eso un momento- insistí. Por favor, necesito abrazarte y decirte que te quiero. Te quiero Juliana, eres lo mejor que pasó en mi vida, gracias por todos estos años de felicidad, gracias por nuestra hija, gracias por no abandonarme en los momentos difíciles.
Recuerdo que la abracé largo rato, mientras que ella me interrogaba acerca del porque ese ataque repentino de sentimentalismo, hasta insinuó que si la había engañado con alguien y tenía un cargo de conciencia.

-No mi amor, nunca te he engañado, solo he sentido el deseo de decirte que te amo, ya sabes como soy yo a ratos me pongo tan sentimental.

-No me vayas a hacer llorar José, mira que hace un rato me hizo llorar la cebolla- bromeó dejando escapar una sonrisa.

Me dirigí a la sala y vi a mi niña jugando con sus muñecas, la contemplé por largo rato, como había pasado el tiempo, siete años ya, no hacía nada la había tenido por primera vez en mis brazos en ese hospital y ya era toda una pequeña mujercita.

-Ven con papi mi amor- le dije extendiéndole mis brazos y ella corrió hacía a mí y la levanté muy alto en tanto que la acercaba para besar su rostro.

Y en la cena no dejé de contemplarlas a ambas, y en mi interior di gracias a Dios y a la vida por haberme regalado tan bonita familia.
Esa mañana debía salir para Madrid en viaje de negocios, trabajaba como vendedor para una empresa de software y gracias a mis buenas actitudes había sido promovido como agente de ventas internacional. Cuando iba en el taxi rumbo hacía al aeropuerto me invadía la nostalgia de abandonar otra vez a mi familia por largo tiempo, en mi mano el libro de Og Mandino que me había hecho creer el vendedor más grande del mundo, había sido buena la vida sin duda, la mayor parte de mis sueños se habían hecho realidad. Miré la foto en que abrazó a mis dos amores y la guardé junto a mi corazón.

Antes de subir al avión en el aeropuerto el Dorado de Bogotá miré hacía el horizonte de mi país y le dije adiós. Había volado muchas veces a distintos destinos en el mundo siempre en viajes de negocios, era algo habitual para mí, sin embargo no me gustaban los viajes así que siempre tomaba una pastilla para dormir.

No sé cuánto tiempo llevábamos de vuelo cuando un gran estruendo me hizo despertar de repente, el avión se sacudía, escuché a la tripulación que impartía instrucciones por los altoparlantes en las cuales decían que estábamos sufriendo una turbulencia que por favor mantuviéramos la calma y abrocháramos nuestros cinturones, muchas veces escuché las mismas palabras así que no les di ninguna importancia, pero el avión volvió a sacudirse por segunda vez y más violentamente. Por primera vez sentí miedo, mi corazón empezó a dar grandes latidos y presentí el desastre.

Escuché los gritos ensordecedores de los pasajeros, llantos, suplicas, oraciones y esa trágica sentencia que brota del corazón humano ¡Vamos a morir! ¡Vamos a morir!. Yo también oré en silencio, Dios no permitas que muera, no permitas que muera. Toda mi vida pasó por mi mente en esos instantes, mi alocada infancia, mi adolescencia llena de desengaños, mi juventud que traía consigo la ilusión del amor, las promesas a mi esposa, el primer llanto de mi hija, la alegría de tener por fin un vehículo nuevo.

Recordé la fotografía que guardaba junto a mi corazón y con mis manos temblorosas la saqué y besé a mis amores, ¡adiós!, ¡adiós!. ¡Ay! de las fuerzas del universo, ¡Ay! de la fragilidad humana. Mayday grita la esperanza, la ayuda no llega y el hombre es arrastrado como por un huracán hacia la muerte mientras que intenta aferrarse desesperadamente a la vida con sus deseos. ¡Sálvanos Dios! ¡Sálvanos capitán!.

Minutos de espanto transcurrieron y las instrucciones de mantengan la calma no las entiende el corazón ante la inminencia de la muerte. Y entonces el peor temor se hace realidad ante la desesperación. El avión totalmente descontrolado en caída libre, los objetos empiezan a caer y a volar por todos lados hiriendo los rostros, la resignación aparece y esa última oración que pide por la salvación del alma brota en silencio. Entonces el estruendo infernal, el pavor al dolor, la bola de fuego que se abre como la boca del infierno que devora la carne.

Desperté, vi las ambulancias, los bomberos, la policía. Por el acento español me di cuenta en qué país estaba. Pedí ayuda pero nadie escuchaba mi súplica. Estaba ahí en medio de los escombros, todos pasaban por mi lado pero me ignoraban, nadie determinaba mi presencia, ¡Ayuda!, ¡Ayuda!.

-Ayúdeme señor por favor- le dije a un bombero.

Ya no había ayuda, miré a un hombre muerto con una fotografía chamuscada en su mano, me arrodillé para ver más de cerca. Ya no podía llorar, pero pensé, fue buena la vida.


Por José Arbey Pacheco

FIN

“Siempre di lo que sientes y haz lo que piensas.

Si supiera que hoy fuera la última vez que te voy a ver dormir, te abrazaría fuertemente y rezaría al Señor para poder ser el guardián de tu alma.

Si supiera que esta fuera la última vez que te vea salir por la puerta, te daría un abrazo, un beso y te llamaría de nuevo para darte más.

Si supiera que esta fuera la última vez que voy a oír tu voz, grabaría cada una de tus palabras para poder oírlas una y otra vez indefinidamente.

Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo diría "te quiero" y no asumiría, tontamente, que ya lo sabes.”

Autor desconocido.

 
rhcastro,11.08.2012

Agradecer a los participantes, sobre todo a los nuevos y disculparnos por los malos entendidos.

El foro está full de comentarios sobre comentarios. Dice un dicho por allí, que el trabajo mata el ocio. Pienso lo más sano es eso. Trabajar.


Muy bueno su texto cuenterodeilusiones.

Si se pudiera recomenzar el texto. No sé dónde empezar a leer. Disculpen.
 
ninive,11.08.2012
Hagamos un poco de orden. Silencio en el foro ya todo está en calma... Ahora pongo otra vez el inicio del cuento 21. stromboli decidirá a quien asignar las diversas partes. Borrón y cuenta nueva.

 
ninive,11.08.2012
Cuento 21 Inicio musas-muertas


Me despierta el olor intenso. Casi no puedo respirar, identifico, aceite, mezclado con un desagradable tufo a carne chamuscada. La oscuridad es absoluta. Un fuerte dolor de cabeza me genera nauseas, me palpo y noto un liquido viscoso que mana de mi frente, felizmente la herida no es profunda. un ominoso siseo eléctrico se percibe a mis espaldas, fuera de ese sonido no hay otros signos de vida. Claramente he estado desmayado, mis recuerdos vuelven como fogonazos a mi pasado inmediato.

Soy un pasajero común y corriente del vuelo de Aerolíneas Argentinas numero AR1302 con partida desde Ezeiza, Buenos Aires y destino el aeropuerto Miami International, en Miami Florida, EEUU. El vuelo partió sin demoras a las 23:15 y horario previsto de arribo a las 07:25 hora local de la mañana siguiente.
Dormía plácidamente cuando un sacudón me despertó. Dos minutos después, una azafata con voz nerviosa nos comunico de cierto desperfecto en el avión y que intentarían aterrizar de emergencia en el aeropuerto más cercano. Con un "Por favor abróchense los cinturones de seguridad" corto la comunicación. Recuerdo que verifique mi reloj pulsera mientras al avión iniciaba un descenso abrupto y un escalofriante temblor provenía de la parte trasera de la nave. La hora era 03:05 de la madrugada. El griterío a bordo del avión es infernal a mi lado un pasajero llora desconsoladamente. Cierro los ojos, un acto totalmente innecesario, me agacho sobre mis piernas, involuntariamente me abrazo a mi bolso de mano y espero lo peor. Un ruido estruendoso, un golpe y me desmayo.
*
Obviamente soy protagonista de un accidente aéreo. No puedo ver nada, todavía tengo entre mis manos mi bolso de viaje, me aferro a él y trato de incorporarme. el asiento delantero me oprime las piernas. Luego de varios intentos logro destrabarme, en mis movimientos empujo sin querer el cuerpo de mi compañero de asiento. Mo me toma mucho determinar al tacto de que el hombre que lloraba ahora está muerto.
Aguzo todos mis sentidos. una breve brisa me indica que "adelante y a la derecha" el casco del avión tiene una fisura que comunica con el exterior. Me arrastro sobre asientos valijas, cadáveres y bolsos de mano. Aparentemente nadie ha sobrevivido, solo yo. Finalmente llego a una abertura, tomo coraje y salto desconociendo la altura del piso.
Caigo rodando y termino sentado sobre un mullido frondoso follaje, a lo lejos se escucha el murmullo de agua.
Respiro profundamente y hago mis cálculos.
Mentalmente imagino el globo terráqueo, trazo una línea entre Buenos Aires y Miami. Distancia? poco más de siete mil kilómetros.
Sigo calculando mentalmente tiempo de viaje hora de salida, hora de llegada, diferencia horaria de ciudades ..."hmmm" me digo, "un poco más de nueve horas de vuelo". Divido los kilómetros por las horas, sumo las horas de viaje hasta el accidente y visualizo mentalmente un punto en el mapamundi. Un terror invade mi alma. Estoy en el medio del "Mato Grosso" en Brasil, probablemente cerca de las nacientes del mismísimo rio Amazonas. La oscuridad es total, no veo nada, Poco importa que sea de noche, cuando salga el sol seguiré igual... me olvide de comentar. Soy ciego de nacimiento.

**


 
Stromboli,11.08.2012
Les aconsejaría que no sean tan volubles en cuanto a cambiar sus participaciones, porque ahora mismo rigores que no sabe nada de los cambios, está escribiendo su parte ¿Y que se va a encontrar? Con el relato cambiado en su totalidad. Desconcierta, y es posible que se enoje ¡Y con razón?

Se necesitan CON URGENCIA cuenteros suplentes, por si hay alguna baja (no me extrañaría que con tanto cambio muchos desistieran de escribir).

Les diré que este es un espacio para aprender, para divertirse para comentar al otro desde el respeto. Ya somos mayores y no se puede decir ahora sí, ahora no). Somos adultos y sugiero que cuando nos comprometamos en algo... lo hagamos. Es un llamamiento a la responsabilidad.

Sugiero que podamos tener otro cuento alternativo, con el inicio de musas-muertas y la continuación de rigores.

Ustedes tienen la última palabra ¿Quién se anota?
 
ninive,11.08.2012
Aconsejo cambiar el equipo en la parte desarrollo .

rigores y cuenterode... entrarán a formar un cuento cuando deseen.
 
Stromboli,11.08.2012
Cuento 21 Inicio musas-muertas


Me despierta el olor intenso. Casi no puedo respirar, identifico, aceite, mezclado con un desagradable tufo a carne chamuscada. La oscuridad es absoluta. Un fuerte dolor de cabeza me genera nauseas, me palpo y noto un liquido viscoso que mana de mi frente, felizmente la herida no es profunda. un ominoso siseo eléctrico se percibe a mis espaldas, fuera de ese sonido no hay otros signos de vida. Claramente he estado desmayado, mis recuerdos vuelven como fogonazos a mi pasado inmediato.

Soy un pasajero común y corriente del vuelo de Aerolíneas Argentinas numero AR1302 con partida desde Ezeiza, Buenos Aires y destino el aeropuerto Miami International, en Miami Florida, EEUU. El vuelo partió sin demoras a las 23:15 y horario previsto de arribo a las 07:25 hora local de la mañana siguiente.
Dormía plácidamente cuando un sacudón me despertó. Dos minutos después, una azafata con voz nerviosa nos comunico de cierto desperfecto en el avión y que intentarían aterrizar de emergencia en el aeropuerto más cercano. Con un "Por favor abróchense los cinturones de seguridad" corto la comunicación. Recuerdo que verifique mi reloj pulsera mientras al avión iniciaba un descenso abrupto y un escalofriante temblor provenía de la parte trasera de la nave. La hora era 03:05 de la madrugada. El griterío a bordo del avión es infernal a mi lado un pasajero llora desconsoladamente. Cierro los ojos, un acto totalmente innecesario, me agacho sobre mis piernas, involuntariamente me abrazo a mi bolso de mano y espero lo peor. Un ruido estruendoso, un golpe y me desmayo.
*
Obviamente soy protagonista de un accidente aéreo. No puedo ver nada, todavía tengo entre mis manos mi bolso de viaje, me aferro a él y trato de incorporarme. el asiento delantero me oprime las piernas. Luego de varios intentos logro destrabarme, en mis movimientos empujo sin querer el cuerpo de mi compañero de asiento. Mo me toma mucho determinar al tacto de que el hombre que lloraba ahora está muerto.
Aguzo todos mis sentidos. una breve brisa me indica que "adelante y a la derecha" el casco del avión tiene una fisura que comunica con el exterior. Me arrastro sobre asientos valijas, cadáveres y bolsos de mano. Aparentemente nadie ha sobrevivido, solo yo. Finalmente llego a una abertura, tomo coraje y salto desconociendo la altura del piso.
Caigo rodando y termino sentado sobre un mullido frondoso follaje, a lo lejos se escucha el murmullo de agua.
Respiro profundamente y hago mis cálculos.
Mentalmente imagino el globo terráqueo, trazo una línea entre Buenos Aires y Miami. Distancia? poco más de siete mil kilómetros.
Sigo calculando mentalmente tiempo de viaje hora de salida, hora de llegada, diferencia horaria de ciudades ..."hmmm" me digo, "un poco más de nueve horas de vuelo". Divido los kilómetros por las horas, sumo las horas de viaje hasta el accidente y visualizo mentalmente un punto en el mapamundi. Un terror invade mi alma. Estoy en el medio del "Mato Grosso" en Brasil, probablemente cerca de las nacientes del mismísimo rio Amazonas. La oscuridad es total, no veo nada, Poco importa que sea de noche, cuando salga el sol seguiré igual... me olvide de comentar. Soy ciego de nacimiento.

**desarrollo
ninive

***desarrollo hacia el final
yosoyasi2

****Final
Ignus
 
ninive,11.08.2012

Cuento 21 *Inicio musas-muertas


Me despierta el olor intenso. Casi no puedo respirar, identifico, aceite, mezclado con un desagradable tufo a carne chamuscada. La oscuridad es absoluta. Un fuerte dolor de cabeza me genera nauseas, me palpo y noto un liquido viscoso que mana de mi frente, felizmente la herida no es profunda. un ominoso siseo eléctrico se percibe a mis espaldas, fuera de ese sonido no hay otros signos de vida. Claramente he estado desmayado, mis recuerdos vuelven como fogonazos a mi pasado inmediato.

Soy un pasajero común y corriente del vuelo de Aerolíneas Argentinas numero AR1302 con partida desde Ezeiza, Buenos Aires y destino el aeropuerto Miami International, en Miami Florida, EEUU. El vuelo partió sin demoras a las 23:15 y horario previsto de arribo a las 07:25 hora local de la mañana siguiente.
Dormía plácidamente cuando un sacudón me despertó. Dos minutos después, una azafata con voz nerviosa nos comunico de cierto desperfecto en el avión y que intentarían aterrizar de emergencia en el aeropuerto más cercano. Con un "Por favor abróchense los cinturones de seguridad" corto la comunicación. Recuerdo que verifique mi reloj pulsera mientras al avión iniciaba un descenso abrupto y un escalofriante temblor provenía de la parte trasera de la nave. La hora era 03:05 de la madrugada. El griterío a bordo del avión es infernal a mi lado un pasajero llora desconsoladamente. Cierro los ojos, un acto totalmente innecesario, me agacho sobre mis piernas, involuntariamente me abrazo a mi bolso de mano y espero lo peor. Un ruido estruendoso, un golpe y me desmayo.
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Obviamente soy protagonista de un accidente aéreo. No puedo ver nada, todavía tengo entre mis manos mi bolso de viaje, me aferro a él y trato de incorporarme. el asiento delantero me oprime las piernas. Luego de varios intentos logro destrabarme, en mis movimientos empujo sin querer el cuerpo de mi compañero de asiento. Mo me toma mucho determinar al tacto de que el hombre que lloraba ahora está muerto.
Aguzo todos mis sentidos. una breve brisa me indica que "adelante y a la derecha" el casco del avión tiene una fisura que comunica con el exterior. Me arrastro sobre asientos valijas, cadáveres y bolsos de mano. Aparentemente nadie ha sobrevivido, solo yo. Finalmente llego a una abertura, tomo coraje y salto desconociendo la altura del piso.
Caigo rodando y termino sentado sobre un mullido frondoso follaje, a lo lejos se escucha el murmullo de agua.
Respiro profundamente y hago mis cálculos.
Mentalmente imagino el globo terráqueo, trazo una línea entre Buenos Aires y Miami. Distancia? poco más de siete mil kilómetros.
Sigo calculando mentalmente tiempo de viaje hora de salida, hora de llegada, diferencia horaria de ciudades ..."hmmm" me digo, "un poco más de nueve horas de vuelo". Divido los kilómetros por las horas, sumo las horas de viaje hasta el accidente y visualizo mentalmente un punto en el mapamundi. Un terror invade mi alma. Estoy en el medio del "Mato Grosso" en Brasil, probablemente cerca de las nacientes del mismísimo rio Amazonas. La oscuridad es total, no veo nada, Poco importa que sea de noche, cuando salga el sol seguiré igual... me olvide de comentar. Soy ciego de nacimiento.

** ninive
¿Cuánto tiempo debería transcurrir antes de que localizan el lugar del accidente?¿Qué probabilidades tenía de que me encontraran?
Una angustia parecida al miedo me atenaza la garganta.
Me hundí en la desesperación.
Sólo en momentos de gran peligro se llega a conocer el verdadero carácter. Yo, el que desde niño trató de convivir con su invalidez y llegó a ser un joven casi feliz. Yo ,el hombre aplomado y seguro, rodeado siempre de amigos y positivo en todo, veía cómo me dejaba ahogar por una ola de impotencia.

En Miami me esperaría en vano un equipo de científicos . Me habían asegurado que mi ceguera era parcialmente curable. Un chip colocado en cierta parte del cerebro permitiría con una simple operación que se realizara el hasta ahora imposible milagro.. Muchos otros casos habían encontrado con este nuevo descubrimiento una solución a la ceguera. Loredana, decía que no era importante que yo recuperara la vista, si lo hacía para ella. “Soy muy fea” me decía con su voz de cascabel llena de risa. Y yo sabía que mentía, que era hermosa porque no había quien no me hubiera dicho que era hermosa. Y que aunque hubiera sido fea no me importaría nada, la amaba y quería verla, quería ver a los hijos que traeríamos al mundo. No sólo lo hacía por ella lo hacía también por mi madre y mucho más por mi. Ahora estaba todo perdido. Moriría como todos los demás en el corazón de la selva.
Traté de darme una sacudida. Recordé que tenía colgado a bandolera mi bolsón y en él podría encontrar alguna ayuda. Allí tenía mi bastón radar, y mi teléfono mail Braille.
Comprobé desolado que el teléfono estaba muerto como todos los demás y el bastón anunciaba PELIGRO hacia los puntos cardinales . Entonces grité y grité con toda la voz que tenía… a lo mejor no había sido el único sobreviviente. Entre pausa y pausa escuchaba solo el silencio hecho del canto de pájaros y del rumor del río cercano. Grité más de una hora. Al fín no pude más estaba agotado.Me quedé dormido o desmayado. Me despertaron de pronto unos golpes rítmicos, como de palos que se entrechocan, el sonido era cada vez más cercano, los golpes al acercarse me anunciaban que ….

***yosoyasí


 
rigores,11.08.2012
Bueno, me disponia a hacer mi parte cuando ya habian cambiado los participante. No hay problema invitenme para la próxima.

 
Stromboli,11.08.2012
Desde luego que sí, te aviso con tiempo. Eres un buen escritor, y lamento lo que ha ocurrido con este cuento, es lo que tiene que no todos podemos conectarnos al mismo tiempo, ni escribir a continuación del anterior cuentero.

Anótense para el próximo cuento. Así tendremos varios participantes por si hay bajas. (Mejor prevenir). Tengan un buen fin de semana.
 
Stromboli,11.08.2012

Cuento 21

*Inicio
musas-muertas


Me despierta el olor intenso. Casi no puedo respirar, identifico, aceite, mezclado con un desagradable tufo a carne chamuscada. La oscuridad es absoluta. Un fuerte dolor de cabeza me genera nauseas, me palpo y noto un liquido viscoso que mana de mi frente, felizmente la herida no es profunda. un ominoso siseo eléctrico se percibe a mis espaldas, fuera de ese sonido no hay otros signos de vida. Claramente he estado desmayado, mis recuerdos vuelven como fogonazos a mi pasado inmediato.

Soy un pasajero común y corriente del vuelo de Aerolíneas Argentinas numero AR1302 con partida desde Ezeiza, Buenos Aires y destino el aeropuerto Miami International, en Miami Florida, EEUU. El vuelo partió sin demoras a las 23:15 y horario previsto de arribo a las 07:25 hora local de la mañana siguiente.
Dormía plácidamente cuando un sacudón me despertó. Dos minutos después, una azafata con voz nerviosa nos comunico de cierto desperfecto en el avión y que intentarían aterrizar de emergencia en el aeropuerto más cercano. Con un "Por favor abróchense los cinturones de seguridad" corto la comunicación. Recuerdo que verifique mi reloj pulsera mientras al avión iniciaba un descenso abrupto y un escalofriante temblor provenía de la parte trasera de la nave. La hora era 03:05 de la madrugada. El griterío a bordo del avión es infernal a mi lado un pasajero llora desconsoladamente. Cierro los ojos, un acto totalmente innecesario, me agacho sobre mis piernas, involuntariamente me abrazo a mi bolso de mano y espero lo peor. Un ruido estruendoso, un golpe y me desmayo.
*
Obviamente soy protagonista de un accidente aéreo. No puedo ver nada, todavía tengo entre mis manos mi bolso de viaje, me aferro a él y trato de incorporarme. el asiento delantero me oprime las piernas. Luego de varios intentos logro destrabarme, en mis movimientos empujo sin querer el cuerpo de mi compañero de asiento. Mo me toma mucho determinar al tacto de que el hombre que lloraba ahora está muerto.
Aguzo todos mis sentidos. una breve brisa me indica que "adelante y a la derecha" el casco del avión tiene una fisura que comunica con el exterior. Me arrastro sobre asientos valijas, cadáveres y bolsos de mano. Aparentemente nadie ha sobrevivido, solo yo. Finalmente llego a una abertura, tomo coraje y salto desconociendo la altura del piso.
Caigo rodando y termino sentado sobre un mullido frondoso follaje, a lo lejos se escucha el murmullo de agua.
Respiro profundamente y hago mis cálculos.
Mentalmente imagino el globo terráqueo, trazo una línea entre Buenos Aires y Miami. Distancia? poco más de siete mil kilómetros.
Sigo calculando mentalmente tiempo de viaje hora de salida, hora de llegada, diferencia horaria de ciudades ..."hmmm" me digo, "un poco más de nueve horas de vuelo". Divido los kilómetros por las horas, sumo las horas de viaje hasta el accidente y visualizo mentalmente un punto en el mapamundi. Un terror invade mi alma. Estoy en el medio del "Mato Grosso" en Brasil, probablemente cerca de las nacientes del mismísimo rio Amazonas. La oscuridad es total, no veo nada, Poco importa que sea de noche, cuando salga el sol seguiré igual... me olvide de comentar. Soy ciego de nacimiento.

desarrollo
** ninive

¿Cuánto tiempo debería transcurrir antes de que localizan el lugar del accidente?¿Qué probabilidades tenía de que me encontraran?
Una angustia parecida al miedo me atenaza la garganta.
Me hundí en la desesperación.
Sólo en momentos de gran peligro se llega a conocer el verdadero carácter. Yo, el que desde niño trató de convivir con su invalidez y llegó a ser un joven casi feliz. Yo ,el hombre aplomado y seguro, rodeado siempre de amigos y positivo en todo, veía cómo me dejaba ahogar por una ola de impotencia.

En Miami me esperaría en vano un equipo de científicos . Me habían asegurado que mi ceguera era parcialmente curable. Un chip colocado en cierta parte del cerebro permitiría con una simple operación que se realizara el hasta ahora imposible milagro.. Muchos otros casos habían encontrado con este nuevo descubrimiento una solución a la ceguera. Loredana, decía que no era importante que yo recuperara la vista, si lo hacía para ella. “Soy muy fea” me decía con su voz de cascabel llena de risa. Y yo sabía que mentía, que era hermosa porque no había quien no me hubiera dicho que era hermosa. Y que aunque hubiera sido fea no me importaría nada, la amaba y quería verla, quería ver a los hijos que traeríamos al mundo. No sólo lo hacía por ella lo hacía también por mi madre y mucho más por mi. Ahora estaba todo perdido. Moriría como todos los demás en el corazón de la selva.
Traté de darme una sacudida. Recordé que tenía colgado a bandolera mi bolsón y en él podría encontrar alguna ayuda. Allí tenía mi bastón radar, y mi teléfono mail Braille.
Comprobé desolado que el teléfono estaba muerto como todos los demás y el bastón anunciaba PELIGRO hacia los puntos cardinales . Entonces grité y grité con toda la voz que tenía… a lo mejor no había sido el único sobreviviente. Entre pausa y pausa escuchaba solo el silencio hecho del canto de pájaros y del rumor del río cercano. Grité más de una hora. Al fín no pude más estaba agotado.Me quedé dormido o desmayado. Me despertaron de pronto unos golpes rítmicos, como de palos que se entrechocan, el sonido era cada vez más cercano, los golpes al acercarse me anunciaban que ….

desarrollo - hacia el final
***yosoyasí

****final
Ignus
 
yosoyasi2,12.08.2012
...las manos que las blandìan eran humanas. Una leve, casi imperceptible esperanza se abrochò a mi mente. Por segundos dudé entre gritar pidiendo auxilio o tratar de esconderme. Sobre el canibalismo de algunas tribus del Mato Grosso había oído algunas cosas no muy tranquilizadoras. Claro que no estaba seguro del lugar en que me encotraba, solo mis cálculos me habían llevado a deducir que habíamos caido en plena seva amazónica.
Las voces que comenzaba a escuchar eran indescifrables. De algo estaba seguro, ese idioma no me era familiar. Quienes quiera que fueran, estaban allí, cada vez más cerca. No tenía forma de saber mi posición respecto a ellos., si podrían verme, si ya me habían visto y yo era la causa de sus gritos. Traté de comprender lo que decían mediante la percepción del sonido. Siempre pensé que la voz de los seres vivos es el más elocuente y veraz reflejo de sus almas. Esas voces me indicaban que debía mantenerme en silencio... y esperar. Hasta Einsten pasó por mi cabeza en ese interminable momento. Tenía razón sobre la relatividad del tiempo. Toda mi vida cabía en ese fragmento. Lo breve de la infancia, las angustias del aprendizaje, las alegrías de los logros...todo transcurría en ese espacio de tiempo de la espera. La incertidumbre era lo más pesado y angustiante. Al menos, los que van al cadalso, conocen el final. Mi final era absolutamente incierto. Es decir, el final de esa parte de mi historia.
 
musas-muertas,12.08.2012
va buenisimo!!!! me encanta!!!
 
Stromboli,12.08.2012
¡El cuento va viento en popa! Seguro musas-muertas que no tiene nada que ver lo que tu ya tienes escrito. Es lo que tienen los cuentos compartidos... que los demás participantes nos sorprenden con su imaginación y saber hacer.

¡Ignus! Te esperamos con ansia, pero tomate tu tiempo. Seguro que darás un final que nos deje boquiabiertos.

¡Es mucho el talento que hay aquí! Les doy la enhorabuena a todos los participantes. El cuento nº 21 ya está en la recta final.

 
Stromboli,12.08.2012
Cuento 21

*Inicio
musas-muertas


Me despierta el olor intenso. Casi no puedo respirar, identifico, aceite, mezclado con un desagradable tufo a carne chamuscada. La oscuridad es absoluta. Un fuerte dolor de cabeza me genera nauseas, me palpo y noto un liquido viscoso que mana de mi frente, felizmente la herida no es profunda. un ominoso siseo eléctrico se percibe a mis espaldas, fuera de ese sonido no hay otros signos de vida. Claramente he estado desmayado, mis recuerdos vuelven como fogonazos a mi pasado inmediato.

Soy un pasajero común y corriente del vuelo de Aerolíneas Argentinas numero AR1302 con partida desde Ezeiza, Buenos Aires y destino el aeropuerto Miami International, en Miami Florida, EEUU. El vuelo partió sin demoras a las 23:15 y horario previsto de arribo a las 07:25 hora local de la mañana siguiente.
Dormía plácidamente cuando un sacudón me despertó. Dos minutos después, una azafata con voz nerviosa nos comunico de cierto desperfecto en el avión y que intentarían aterrizar de emergencia en el aeropuerto más cercano. Con un "Por favor abróchense los cinturones de seguridad" corto la comunicación. Recuerdo que verifique mi reloj pulsera mientras al avión iniciaba un descenso abrupto y un escalofriante temblor provenía de la parte trasera de la nave. La hora era 03:05 de la madrugada. El griterío a bordo del avión es infernal a mi lado un pasajero llora desconsoladamente. Cierro los ojos, un acto totalmente innecesario, me agacho sobre mis piernas, involuntariamente me abrazo a mi bolso de mano y espero lo peor. Un ruido estruendoso, un golpe y me desmayo.
*
Obviamente soy protagonista de un accidente aéreo. No puedo ver nada, todavía tengo entre mis manos mi bolso de viaje, me aferro a él y trato de incorporarme. el asiento delantero me oprime las piernas. Luego de varios intentos logro destrabarme, en mis movimientos empujo sin querer el cuerpo de mi compañero de asiento. Mo me toma mucho determinar al tacto de que el hombre que lloraba ahora está muerto.
Aguzo todos mis sentidos. una breve brisa me indica que "adelante y a la derecha" el casco del avión tiene una fisura que comunica con el exterior. Me arrastro sobre asientos valijas, cadáveres y bolsos de mano. Aparentemente nadie ha sobrevivido, solo yo. Finalmente llego a una abertura, tomo coraje y salto desconociendo la altura del piso.
Caigo rodando y termino sentado sobre un mullido frondoso follaje, a lo lejos se escucha el murmullo de agua.
Respiro profundamente y hago mis cálculos.
Mentalmente imagino el globo terráqueo, trazo una línea entre Buenos Aires y Miami. Distancia? poco más de siete mil kilómetros.
Sigo calculando mentalmente tiempo de viaje hora de salida, hora de llegada, diferencia horaria de ciudades ..."hmmm" me digo, "un poco más de nueve horas de vuelo". Divido los kilómetros por las horas, sumo las horas de viaje hasta el accidente y visualizo mentalmente un punto en el mapamundi. Un terror invade mi alma. Estoy en el medio del "Mato Grosso" en Brasil, probablemente cerca de las nacientes del mismísimo rio Amazonas. La oscuridad es total, no veo nada, Poco importa que sea de noche, cuando salga el sol seguiré igual... me olvide de comentar. Soy ciego de nacimiento.

desarrollo
** ninive

¿Cuánto tiempo debería transcurrir antes de que localizan el lugar del accidente?¿Qué probabilidades tenía de que me encontraran?
Una angustia parecida al miedo me atenaza la garganta.
Me hundí en la desesperación.
Sólo en momentos de gran peligro se llega a conocer el verdadero carácter. Yo, el que desde niño trató de convivir con su invalidez y llegó a ser un joven casi feliz. Yo ,el hombre aplomado y seguro, rodeado siempre de amigos y positivo en todo, veía cómo me dejaba ahogar por una ola de impotencia.

En Miami me esperaría en vano un equipo de científicos . Me habían asegurado que mi ceguera era parcialmente curable. Un chip colocado en cierta parte del cerebro permitiría con una simple operación que se realizara el hasta ahora imposible milagro.. Muchos otros casos habían encontrado con este nuevo descubrimiento una solución a la ceguera. Loredana, decía que no era importante que yo recuperara la vista, si lo hacía para ella. “Soy muy fea” me decía con su voz de cascabel llena de risa. Y yo sabía que mentía, que era hermosa porque no había quien no me hubiera dicho que era hermosa. Y que aunque hubiera sido fea no me importaría nada, la amaba y quería verla, quería ver a los hijos que traeríamos al mundo. No sólo lo hacía por ella lo hacía también por mi madre y mucho más por mi. Ahora estaba todo perdido. Moriría como todos los demás en el corazón de la selva.
Traté de darme una sacudida. Recordé que tenía colgado a bandolera mi bolsón y en él podría encontrar alguna ayuda. Allí tenía mi bastón radar, y mi teléfono mail Braille.
Comprobé desolado que el teléfono estaba muerto como todos los demás y el bastón anunciaba PELIGRO hacia los puntos cardinales . Entonces grité y grité con toda la voz que tenía… a lo mejor no había sido el único sobreviviente. Entre pausa y pausa escuchaba solo el silencio hecho del canto de pájaros y del rumor del río cercano. Grité más de una hora. Al fín no pude más estaba agotado.Me quedé dormido o desmayado. Me despertaron de pronto unos golpes rítmicos, como de palos que se entrechocan, el sonido era cada vez más cercano, los golpes al acercarse me anunciaban que ….

desarrollo - hacia el final
***yosoyasí

...las manos que las blandìan eran humanas. Una leve, casi imperceptible esperanza se abrochò a mi mente. Por segundos dudé entre gritar pidiendo auxilio o tratar de esconderme. Sobre el canibalismo de algunas tribus del Mato Grosso había oído algunas cosas no muy tranquilizadoras. Claro que no estaba seguro del lugar en que me encotraba, solo mis cálculos me habían llevado a deducir que habíamos caido en plena seva amazónica.
Las voces que comenzaba a escuchar eran indescifrables. De algo estaba seguro, ese idioma no me era familiar. Quienes quiera que fueran, estaban allí, cada vez más cerca. No tenía forma de saber mi posición respecto a ellos., si podrían verme, si ya me habían visto y yo era la causa de sus gritos. Traté de comprender lo que decían mediante la percepción del sonido. Siempre pensé que la voz de los seres vivos es el más elocuente y veraz reflejo de sus almas. Esas voces me indicaban que debía mantenerme en silencio... y esperar. Hasta Einsten pasó por mi cabeza en ese interminable momento. Tenía razón sobre la relatividad del tiempo. Toda mi vida cabía en ese fragmento. Lo breve de la infancia, las angustias del aprendizaje, las alegrías de los logros...todo transcurría en ese espacio de tiempo de la espera. La incertidumbre era lo más pesado y angustiante. Al menos, los que van al cadalso, conocen el final. Mi final era absolutamente incierto. Es decir, el final de esa parte de mi historia

****final
Ignus
 
IGnus,12.08.2012
Gente: les pido me tengan paciencia hasta mañana. Hoy es domingo, y es el día del niño acá en mi país. O sea, es un día especial para pasarlo junto a mi hijo. Por eso es que quise dedicarle todo el día a él.
Mañana les prometo que en algún momento del día me siento a escribir, y finalizo la historia.
De todas formas, mi cabeza ya empezó a funcionar, y tengo un par de ideas interesantes.
¡Hasta mañana!. Abrazo a todos.
 
musas-muertas,12.08.2012
Tranquilo Ignus Amigo... Feliz dia a tu hijo!!
 
Stromboli,12.08.2012
Pasa el día con tu pequeño hijo, en familia. El final tendrá que esperar. Sé que eres una persona responsable y seguro que nos sorprenderás. Mañana, con calma, te sientas en el ordenador, y ¡a escribir!

El resto de cuenteros que les he avisado en su LDV, estén atentos para que empiece el siguiente cuento compartido ¡el nº 23! Aprovecho la ocasión para felicitarles a todos sin excepción por su esfuerzo, ganas, entusiasmo que ponen en cada cuento compartido.

Recordadles que sin ustedes, no habría cuentos. No habría inicios sorprendentes ni finales asombrosos, con el esfuerzo de cada uno.

Y a los "nuevos" que pierdan el miedo escénico, que somos todos compañeros, unos y otros aportamos ideas, comentarios, y diferentes pareceres de cada cuento compartido.

Por favor, les recuerdo que queda por ajustar los integrantes del cuento nº 23. En mi libro de visitas se anotan, y dan su conformidad para que los anoten.

¡Cuenteros, a escribir! Ya tengo el incio... que es una sorpresa.
 
Stromboli,13.08.2012
Rectifico: El siguiente cuento compartido será el nº 22, ¡perdonen el despiste!
 
IGnus,13.08.2012
Uff... Me hicieron trabajar bastante para investigar sobre las tribus del Mato Grosso.
Me sorprendió algo: Ninive, ¿sabías de antemano que la tribu de los Txuccaramaes entrechocaban palos?, ¿o fue pura coincidencia?.
Bueno, espero que les guste el final:



Tuve que salir inmediatamente de mi sopor, cuando sentí una mano apoyarse sobre mi hombro, y una voz en perfecto francés habló a mi oído: “être calme et tranquille”. (Por suerte recordaba algunas clases de francés de mi escuela: “Quédate quieto y tranquilo”, me dijo).
Obedecí, ya que en esas circunstancias, cualquier signo de “civilización” era bienvenido por mi atribulada alma.
Los ruidos de golpes de madera se escuchaban bastante fuerte ahora, y tuve la impresión de que quienes los emitían estaban pasando frente a mí.
Lentamente, el ruido se fue atenuando, hasta perderse en la distancia. Entonces fue cuando mi salvador volvió a hablar. Me preguntó si hablaba francés, y traté de explicarle que era mucho mejor para mí utilizar el español.
- De acuerdo. –Dijo en español. –Eres un sobreviviente del accidente, ¿verdad?.
- Sí.
- Y además eres ciego.
- Totalmente.
- Entonces has tenido una suerte extraordinaria. Esos tipos que escuchaste golpeando palos son una tribu del Mato Grosso llamada Txuccaramaes. Son altamente agresivos. Con decirte que para expresar que una comida les gusta, se golpean la cabeza con los palos… Creo que eso habla un poco sobre su temperamento. Mi nombre es Jean Pierre Dutilleaux, soy un explorador y etnógrafo de origen belga. Estudio a esta tribu desde hace años, y la inoportuna caída de tu avión hizo que se malograra mi primer contacto con esta gente. Ellos jamás habían visto a un hombre blanco.
- Muy a mi pesar, creo que tu “primer contacto” es una realidad ahora…

Dije esto, mientras sentía en mi espalda la aguda punta de una lanza, que me apresuraba a caminar hacia adelante.

Los Txuccaramaes no eran una tribu tan agresiva después de todo. Al menos nos dejaron vivir bastante. Nos golpearon algunas veces con sus palos, pero más que nada a modo “correctivo”. Como si dijeran “Quedate quieto”, “Camina para allá”, etc.
Por suerte, Jean Pierre entendía bastante de su idioma, y me traducía lo que decían. Los aborígenes estaban totalmente intrigados por nuestra presencia. Ellos creían que éramos “muertos vivientes”, ya que nunca vieron a alguien caminar luego de “ponerse su piel blanca”. (Al morir).
Sin dudas estaban bastante atribulados por este tema, y el miedo los llevó a pensar en otras alternativas. ¿Se podrá matar de nuevo a un muerto viviente?. Estaban a punto de comprobar la teoría, cuando una voz de mando se impuso, y todos los indígenas se quedaron petrificados de inmediato.
Luego supimos que quien había hablado era el cacique de la tribu, un tal Raoni. Gracias a él es que todavía estamos vivos…
- Dejen en paz a los hombres blancos. Ellos son estúpidos pero inofensivos.
- Pero los “muertos vivientes” vienen a matarnos, cacique.
- No es así. Yo lo digo.

Por suerte para nosotros, los aborígenes le hacían mucho caso a su cacique, así que nos soltaron y nos permitieron acercarnos para hablar con él.
Jean Pierre tomó inmediatamente la palabra. No entendí nada de lo que dijo, pero como dije anteriormente, la voz de los seres vivos es el más elocuente y veraz reflejo de sus almas, y la voz de Jean Pierre me sonaba pacificadora, tranquila y a la vez grandilocuente. Como si él les estuviera contando sus peripecias para llegar a conocer a tan majestuoso e importante líder.
Luego tradujo para mí sus palabras explicándole al líder su origen, así como el mío. Dijo de mí que era “el hombre que cayó del cielo”, y esas palabras provocaron una inmediata reacción de los indígenas, quienes creían que todo lo que venía del cielo tenía que ser necesariamente “celestial”.

-Tranquilos, -dijo Jean Pierre. –Mi compañero cayó del cielo, porque un ave gigante que lo tenía atrapado lo liberó justamente aquí. Esa es su historia. Además, él no puede ver.

Entonces sentí la presencia del cacique acercándose hacia mí.

-Por lo que más quieras, quédate quieto. –Me susurró jean Pierre.

El olor que despedía el cacique era poco menos que nauseabundo, pero soporté estoicamente mientras él me tomaba de la cabeza, y sus dedos hurgaban en mi rostro, buscando quién sabe qué.

Luego el jefe dijo solemnemente:

- Este hombre no ve porque no quiere.

Acto seguido, sentí un zumbido sordo, como algo grueso moviéndose rápidamente por el aire. Enseguida, un fuerte golpe en mi cabeza, y eso es lo último que recuerdo del jefe aborigen.
Cuando desperté me encontraba en una butaca de avión. Estaba muy mareado y me dolía fuertemente la cabeza. Abrí los ojos y observé que junto a mi había una persona sentada. El tipo tenía el pelo un poco entrecano, y me miraba con sorpresa y satisfacción. Entonces caí en la cuenta de que lo estaba “¡viendo!”. Casi me desmayo, pero Jean Pierre (supe que era él por la voz), me tranquilizó, y me dijo que estaba todo bien, que estábamos en un avión rumbo a Buenos Aires, y que de alguna manera el cacique tenía razón. Yo no podía ver, pero mis ojos no tenían ningún defecto, todo estaba en mi psiquis. Seguramente el golpe que me dio en la cabeza, sumado al susto que sentía en ese momento hizo que se “destrabara” mi inconsciente, permitiéndome por fin interpretar lo que mis ojos veían desde hacía ya muchísimo tiempo.
Mientras yo cavilaba, y masticaba toda esa nueva información, Jean Pierre me contaba cómo él me había ayudado a salir de la selva, llevándome casi a rastras hasta donde estaba ubicado el resto de su equipo de exploradores. Hablaba rápidamente, con la emoción del hombre que ha logrado una meta importante en su vida. Sin duda, para un etnógrafo como él, haber contactado por primera vez a una tribu que jamás vio un hombre blanco, constituía uno de los máximos sueños que podía imaginar.
Sin embargo, para mí esos logros significaban muy poco. Tal vez porque mis sueños eran fundamentalmente distintos. Yo soñaba con llegar pronto a Buenos Aires, para cumplir una ilusión que desde hacía mucho estaba aprisionando mi corazón: Yo sólo quería poder admirar por fin, la belleza de mi amada Loredana.


FIN.
 
Stromboli,13.08.2012
Cuento 21

*Inicio
musas-muertas


Me despierta el olor intenso. Casi no puedo respirar, identifico, aceite, mezclado con un desagradable tufo a carne chamuscada. La oscuridad es absoluta. Un fuerte dolor de cabeza me genera nauseas, me palpo y noto un liquido viscoso que mana de mi frente, felizmente la herida no es profunda. un ominoso siseo eléctrico se percibe a mis espaldas, fuera de ese sonido no hay otros signos de vida. Claramente he estado desmayado, mis recuerdos vuelven como fogonazos a mi pasado inmediato.

Soy un pasajero común y corriente del vuelo de Aerolíneas Argentinas numero AR1302 con partida desde Ezeiza, Buenos Aires y destino el aeropuerto Miami International, en Miami Florida, EEUU. El vuelo partió sin demoras a las 23:15 y horario previsto de arribo a las 07:25 hora local de la mañana siguiente.
Dormía plácidamente cuando un sacudón me despertó. Dos minutos después, una azafata con voz nerviosa nos comunico de cierto desperfecto en el avión y que intentarían aterrizar de emergencia en el aeropuerto más cercano. Con un "Por favor abróchense los cinturones de seguridad" corto la comunicación. Recuerdo que verifique mi reloj pulsera mientras al avión iniciaba un descenso abrupto y un escalofriante temblor provenía de la parte trasera de la nave. La hora era 03:05 de la madrugada. El griterío a bordo del avión es infernal a mi lado un pasajero llora desconsoladamente. Cierro los ojos, un acto totalmente innecesario, me agacho sobre mis piernas, involuntariamente me abrazo a mi bolso de mano y espero lo peor. Un ruido estruendoso, un golpe y me desmayo.
*
Obviamente soy protagonista de un accidente aéreo. No puedo ver nada, todavía tengo entre mis manos mi bolso de viaje, me aferro a él y trato de incorporarme. el asiento delantero me oprime las piernas. Luego de varios intentos logro destrabarme, en mis movimientos empujo sin querer el cuerpo de mi compañero de asiento. Mo me toma mucho determinar al tacto de que el hombre que lloraba ahora está muerto.
Aguzo todos mis sentidos. una breve brisa me indica que "adelante y a la derecha" el casco del avión tiene una fisura que comunica con el exterior. Me arrastro sobre asientos valijas, cadáveres y bolsos de mano. Aparentemente nadie ha sobrevivido, solo yo. Finalmente llego a una abertura, tomo coraje y salto desconociendo la altura del piso.
Caigo rodando y termino sentado sobre un mullido frondoso follaje, a lo lejos se escucha el murmullo de agua.
Respiro profundamente y hago mis cálculos.
Mentalmente imagino el globo terráqueo, trazo una línea entre Buenos Aires y Miami. Distancia? poco más de siete mil kilómetros.
Sigo calculando mentalmente tiempo de viaje hora de salida, hora de llegada, diferencia horaria de ciudades ..."hmmm" me digo, "un poco más de nueve horas de vuelo". Divido los kilómetros por las horas, sumo las horas de viaje hasta el accidente y visualizo mentalmente un punto en el mapamundi. Un terror invade mi alma. Estoy en el medio del "Mato Grosso" en Brasil, probablemente cerca de las nacientes del mismísimo rio Amazonas. La oscuridad es total, no veo nada, Poco importa que sea de noche, cuando salga el sol seguiré igual... me olvide de comentar. Soy ciego de nacimiento.

desarrollo
** ninive

¿Cuánto tiempo debería transcurrir antes de que localizan el lugar del accidente?¿Qué probabilidades tenía de que me encontraran?
Una angustia parecida al miedo me atenaza la garganta.
Me hundí en la desesperación.
Sólo en momentos de gran peligro se llega a conocer el verdadero carácter. Yo, el que desde niño trató de convivir con su invalidez y llegó a ser un joven casi feliz. Yo ,el hombre aplomado y seguro, rodeado siempre de amigos y positivo en todo, veía cómo me dejaba ahogar por una ola de impotencia.

En Miami me esperaría en vano un equipo de científicos . Me habían asegurado que mi ceguera era parcialmente curable. Un chip colocado en cierta parte del cerebro permitiría con una simple operación que se realizara el hasta ahora imposible milagro.. Muchos otros casos habían encontrado con este nuevo descubrimiento una solución a la ceguera. Loredana, decía que no era importante que yo recuperara la vista, si lo hacía para ella. “Soy muy fea” me decía con su voz de cascabel llena de risa. Y yo sabía que mentía, que era hermosa porque no había quien no me hubiera dicho que era hermosa. Y que aunque hubiera sido fea no me importaría nada, la amaba y quería verla, quería ver a los hijos que traeríamos al mundo. No sólo lo hacía por ella lo hacía también por mi madre y mucho más por mi. Ahora estaba todo perdido. Moriría como todos los demás en el corazón de la selva.
Traté de darme una sacudida. Recordé que tenía colgado a bandolera mi bolsón y en él podría encontrar alguna ayuda. Allí tenía mi bastón radar, y mi teléfono mail Braille.
Comprobé desolado que el teléfono estaba muerto como todos los demás y el bastón anunciaba PELIGRO hacia los puntos cardinales . Entonces grité y grité con toda la voz que tenía… a lo mejor no había sido el único sobreviviente. Entre pausa y pausa escuchaba solo el silencio hecho del canto de pájaros y del rumor del río cercano. Grité más de una hora. Al fín no pude más estaba agotado.Me quedé dormido o desmayado. Me despertaron de pronto unos golpes rítmicos, como de palos que se entrechocan, el sonido era cada vez más cercano, los golpes al acercarse me anunciaban que ….

desarrollo - hacia el final
***yosoyasí

...las manos que las blandìan eran humanas. Una leve, casi imperceptible esperanza se abrochò a mi mente. Por segundos dudé entre gritar pidiendo auxilio o tratar de esconderme. Sobre el canibalismo de algunas tribus del Mato Grosso había oído algunas cosas no muy tranquilizadoras. Claro que no estaba seguro del lugar en que me encotraba, solo mis cálculos me habían llevado a deducir que habíamos caido en plena seva amazónica.
Las voces que comenzaba a escuchar eran indescifrables. De algo estaba seguro, ese idioma no me era familiar. Quienes quiera que fueran, estaban allí, cada vez más cerca. No tenía forma de saber mi posición respecto a ellos., si podrían verme, si ya me habían visto y yo era la causa de sus gritos. Traté de comprender lo que decían mediante la percepción del sonido. Siempre pensé que la voz de los seres vivos es el más elocuente y veraz reflejo de sus almas. Esas voces me indicaban que debía mantenerme en silencio... y esperar. Hasta Einsten pasó por mi cabeza en ese interminable momento. Tenía razón sobre la relatividad del tiempo. Toda mi vida cabía en ese fragmento. Lo breve de la infancia, las angustias del aprendizaje, las alegrías de los logros...todo transcurría en ese espacio de tiempo de la espera. La incertidumbre era lo más pesado y angustiante. Al menos, los que van al cadalso, conocen el final. Mi final era absolutamente incierto. Es decir, el final de esa parte de mi historia

****final
Ignus

Tuve que salir inmediatamente de mi sopor, cuando sentí una mano apoyarse sobre mi hombro, y una voz en perfecto francés habló a mi oído: “être calme et tranquille”. (Por suerte recordaba algunas clases de francés de mi escuela: “Quédate quieto y tranquilo”, me dijo).
Obedecí, ya que en esas circunstancias, cualquier signo de “civilización” era bienvenido por mi atribulada alma.
Los ruidos de golpes de madera se escuchaban bastante fuerte ahora, y tuve la impresión de que quienes los emitían estaban pasando frente a mí.
Lentamente, el ruido se fue atenuando, hasta perderse en la distancia. Entonces fue cuando mi salvador volvió a hablar. Me preguntó si hablaba francés, y traté de explicarle que era mucho mejor para mí utilizar el español.
- De acuerdo. –Dijo en español. –Eres un sobreviviente del accidente, ¿verdad?.
- Sí.
- Y además eres ciego.
- Totalmente.
- Entonces has tenido una suerte extraordinaria. Esos tipos que escuchaste golpeando palos son una tribu del Mato Grosso llamada Txuccaramaes. Son altamente agresivos. Con decirte que para expresar que una comida les gusta, se golpean la cabeza con los palos… Creo que eso habla un poco sobre su temperamento. Mi nombre es Jean Pierre Dutilleaux, soy un explorador y etnógrafo de origen belga. Estudio a esta tribu desde hace años, y la inoportuna caída de tu avión hizo que se malograra mi primer contacto con esta gente. Ellos jamás habían visto a un hombre blanco.
- Muy a mi pesar, creo que tu “primer contacto” es una realidad ahora…

Dije esto, mientras sentía en mi espalda la aguda punta de una lanza, que me apresuraba a caminar hacia adelante.

Los Txuccaramaes no eran una tribu tan agresiva después de todo. Al menos nos dejaron vivir bastante. Nos golpearon algunas veces con sus palos, pero más que nada a modo “correctivo”. Como si dijeran “Quedate quieto”, “Camina para allá”, etc.
Por suerte, Jean Pierre entendía bastante de su idioma, y me traducía lo que decían. Los aborígenes estaban totalmente intrigados por nuestra presencia. Ellos creían que éramos “muertos vivientes”, ya que nunca vieron a alguien caminar luego de “ponerse su piel blanca”. (Al morir).
Sin dudas estaban bastante atribulados por este tema, y el miedo los llevó a pensar en otras alternativas. ¿Se podrá matar de nuevo a un muerto viviente?. Estaban a punto de comprobar la teoría, cuando una voz de mando se impuso, y todos los indígenas se quedaron petrificados de inmediato.
Luego supimos que quien había hablado era el cacique de la tribu, un tal Raoni. Gracias a él es que todavía estamos vivos…
- Dejen en paz a los hombres blancos. Ellos son estúpidos pero inofensivos.
- Pero los “muertos vivientes” vienen a matarnos, cacique.
- No es así. Yo lo digo.

Por suerte para nosotros, los aborígenes le hacían mucho caso a su cacique, así que nos soltaron y nos permitieron acercarnos para hablar con él.
Jean Pierre tomó inmediatamente la palabra. No entendí nada de lo que dijo, pero como dije anteriormente, la voz de los seres vivos es el más elocuente y veraz reflejo de sus almas, y la voz de Jean Pierre me sonaba pacificadora, tranquila y a la vez grandilocuente. Como si él les estuviera contando sus peripecias para llegar a conocer a tan majestuoso e importante líder.
Luego tradujo para mí sus palabras explicándole al líder su origen, así como el mío. Dijo de mí que era “el hombre que cayó del cielo”, y esas palabras provocaron una inmediata reacción de los indígenas, quienes creían que todo lo que venía del cielo tenía que ser necesariamente “celestial”.

-Tranquilos, -dijo Jean Pierre. –Mi compañero cayó del cielo, porque un ave gigante que lo tenía atrapado lo liberó justamente aquí. Esa es su historia. Además, él no puede ver.

Entonces sentí la presencia del cacique acercándose hacia mí.

-Por lo que más quieras, quédate quieto. –Me susurró jean Pierre.

El olor que despedía el cacique era poco menos que nauseabundo, pero soporté estoicamente mientras él me tomaba de la cabeza, y sus dedos hurgaban en mi rostro, buscando quién sabe qué.

Luego el jefe dijo solemnemente:

- Este hombre no ve porque no quiere.

Acto seguido, sentí un zumbido sordo, como algo grueso moviéndose rápidamente por el aire. Enseguida, un fuerte golpe en mi cabeza, y eso es lo último que recuerdo del jefe aborigen.
Cuando desperté me encontraba en una butaca de avión. Estaba muy mareado y me dolía fuertemente la cabeza. Abrí los ojos y observé que junto a mi había una persona sentada. El tipo tenía el pelo un poco entrecano, y me miraba con sorpresa y satisfacción. Entonces caí en la cuenta de que lo estaba “¡viendo!”. Casi me desmayo, pero Jean Pierre (supe que era él por la voz), me tranquilizó, y me dijo que estaba todo bien, que estábamos en un avión rumbo a Buenos Aires, y que de alguna manera el cacique tenía razón. Yo no podía ver, pero mis ojos no tenían ningún defecto, todo estaba en mi psiquis. Seguramente el golpe que me dio en la cabeza, sumado al susto que sentía en ese momento hizo que se “destrabara” mi inconsciente, permitiéndome por fin interpretar lo que mis ojos veían desde hacía ya muchísimo tiempo.
Mientras yo cavilaba, y masticaba toda esa nueva información, Jean Pierre me contaba cómo él me había ayudado a salir de la selva, llevándome casi a rastras hasta donde estaba ubicado el resto de su equipo de exploradores. Hablaba rápidamente, con la emoción del hombre que ha logrado una meta importante en su vida. Sin duda, para un etnógrafo como él, haber contactado por primera vez a una tribu que jamás vio un hombre blanco, constituía uno de los máximos sueños que podía imaginar.
Sin embargo, para mí esos logros significaban muy poco. Tal vez porque mis sueños eran fundamentalmente distintos. Yo soñaba con llegar pronto a Buenos Aires, para cumplir una ilusión que desde hacía mucho estaba aprisionando mi corazón: Yo sólo quería poder admirar por fin, la belleza de mi amada Loredana.


FIN



 
Stromboli,13.08.2012
Compañeros cuenteros, es hora de comentar, diseccionar, desmembranar, el cuento compartido nº 21.

Se admiten todo tipo de críticas, aportes, de todos y cada uno de los cuenteros de la página.

Esperemos que este cuento englose elclubdelapaginaazul, para dar paso a los escritores del nº 22.

¡Ya pueden hacer sus críticas!
 
Copacampeon,13.08.2012
Ignus, me asombra tu ignorancia. Creo que eres el unico de la página que no sabe que desciendo de los indígenas del Mato Grosso y por eso voy dando de palos en la pagina, a derecha e izquierda.

Muy bueno tu final, Te felicito
 
IGnus,13.08.2012
Es que soy nuevecito... Jejejeje!
 
rhcastro,13.08.2012
Lo desarrollaron muy bien y el final es bastante bueno. Felicidades. Muy bien logrado.-
 
silvimar-,13.08.2012
Muy bueno el final!! Sorpresivo por el giro que se le dió, todos en general escribieron muy bien y coherentes, no le habrá puesto el chip el indígena? Va con onda Ignus, saludos!!
 
musas-muertas,13.08.2012
Genial Ignus....eres un Genius!!jjejeje excelente!!! me encanto!!! me gusto muchísimo como quedo el cuento. Felicitaciones...
 
leobrizuela,13.08.2012
Ignus ha escrito un final sorpresivo y en pocas lineas. Ha solucionado con inteligencia el obstáculo técnico que significa un protagonista huérfano y ciego en la selva introduciendo otro personaje, que permite lo que en técnica literaria se llama resumen, lo que abrevia mucho los explicativos.
Otro punto a favor es el haber hecho pie en la realidad para asistir a la ficción: la tribu Txuccaramaes existe y su jefe era Raoni, para el momento de su descubrimiento. Con lo que se advierte un trabajo de investigación previo al relato y propicio para la información tangencial del lector.
Acaso se le puede criticar no seguir la linea más connotativa del estilo de los dicho por Nínive, pero es comprensible en homenaje a la brevedad y premura que la tarea inviste por la condición de la página.
Mis felicitaciones a los intervinientes, que en cada caso subieron textos de buen nivel, y en especial a las esforzadas coordinadoras que supieron desentrañar el ovillo de malentendidos producidos.
 
hugodemerlo,13.08.2012
Inteligente final de Ignus! Por fin terminó el cuento 21 después de todo.
Bien logrado y un gran trabajo de investigación que me deja una luz para un gran negocio de "viajes curativos" al mato groso, jejeje!
 
Stromboli,13.08.2012
Este cuento ha tenido altibajos, pero ¡por fin! se ha terminado.
Dar las gracias a musas-muertas por ese inicio tan sorprendente y que daba mucho juego.
Gracias a ninive que con su aporte hizo que el cuento siguiera "viento en popa" después de algunas bajas.
yosoyasi2 dió indicios de la tribu del Mato Groso que con un buen fin acabó Ignus el cuento.
Mis felicitaciones a los cuatro, que han sabido dar "el todo". Creo que queda patente el amor a las artes.
Les sigo leyendo individualmente y en este foro.
 
musas-muertas,13.08.2012
Totalmente de acuerdo Stromboli...los aportes de ninive, yosoyasi2 e Ignus cerraron un cuento muy "abierto"... los felicito , quedo perfecto.
Yo acabo de terminar el mio. se llama "a oscuras" lo publicare en unos minutos, obviamente ya tenia mi idea de continuación (incluso lo comente con rigores). hay cosas algo parecidas y otras muy distintas. No se cual me gusta mas... creo que el nuestro salio mejor.
 
elclubdelapaginaazul,14.08.2012
El cuento 21 figura en el club en espera de lectores
El cuento 22 comenzara en nueva sede.
 
yosoyasi2,14.08.2012
genial como se desarolló el cuento
felicitaciones Ignus
y el nombre?
propongo uno: INCERTIDUMBRE
 
Stromboli,14.08.2012
Cuento nº 23

Inicio
rigores


La historia que hoy vengo a contarles sucedió en vísperas del 25 de diciembre de 1895 en mi Londres victoriano. Desde hace algún tiempo para acá venía sintiéndome progresivamente débil, las ganas de vivir ya me habían abandonado y mi familia otrora centro de mi universo la encontraba ajena y distante, mi contextura gallarda y mi sana semblanza se venían desdibujando como si a un cuadro de ardientes girasoles, como los pintados por Van Gogh le fueran quitando todos sus matices hasta dejarlos en un débil y monótono blanco y negro.

Pero no les quiero hacer esperar más, solo les diré que desde el último instante vital que recuerdo, de repente aparecí en aquel quirófano.

Huelo el éter tan usado por mi como anestésico, mi corazón late pero a un ritmo atípico apenas imperceptible, oigo pisadas y voces frenéticas, diciendo, el paciente se nos va, revivámoslo, de repente uno de los doctores se abalanza sobre mi y me golpea el pecho de manera sistemática, están tratando de revivirme y creo que no tiene fortuna por que él sentencio: Lo perdimos...

A todas estas yo podía sentir todo, verlo todo pero algo que solo después entendí, me hacia imposible comunicarme con el mundo exterior...

desarrollo:
leobrizuela

desarrollo hacia el final:
hugodemerlo

Final:
Egon
 
ninive,14.08.2012
A falta de título elclubdelapagina azul le puso al cuento 21 "Oscuridad en la selva" en forma provisoria. Cuando lo indiquen ,se cambiará por otro que crean más adecuado.

 
yosoyasi2,16.08.2012
a oscuras en la selva quedó muy bueno
 



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