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Inicio / Lista de Foros / Literatura :: Talleres / 5º Concurso: Cuentos con final inesperado. (concursosprosaypoesia) - [F:9:3330]


concursosprosaypoesia,08.07.2005
bBienvenidos al quinto concurso de concursosprosaypoesia.

TEMA: -No me hagas llorar.
CATEGORÍA: Cuentos con final inesperado.

"-No me hagas llorar." Esa frase debe aparecer como parte de algún diálogo en el cuento.
La fecha de comienzo es hoy, día 8 de Julio del 2005, el último día para exponer cuento es el 14. Los ganadores serán expuestos en la bibliografía entre los días 15, 16 y 17 de Julio.

Gracias por participar y suerte.

Atentamente, concursosprosaypoesia/b
 
Hermeset,08.07.2005
bAdelante, ¡participad!/b
 
amayrany,09.07.2005
en eso estoy¡
 
Hermeset,10.07.2005
bSi no participáis anularemos el concurso y daremos vida a otro.../b
 
corazonpartio,10.07.2005
jajaja, ya tranquilo , estaba sin pagina, asi que de ahi me lanzo
 
corazonpartio,10.07.2005
Vivía yo mi tránquilamente en un apartado lugar, de la ciudad, siempre rodeada de gente, muchas personas, que circulan a mi alrededor, entre ellos mis queridos hijos, personitas increíbles, que me alegran la vida, pero como en todo orden de cosas existe un alguién, que no alcanza para ser humano al quien le pido por favor " No me hagas llorar".

Es tanta la desesperación, angustia, que él me provoca que un día lo espere, y cuando se acerco a saludarme me abalanze sobre él y un cuchillo le clave. Ahora sí dije para nunca mas me haras llorar.FIN
 
corazonpartio,10.07.2005
corazonpartio,11.07.2005



PERDON DEBO CORREGIRLO, AQUI VA DE NUEVO
Vivía tránquilamente en un apartado lugar, de la ciudad, siempre rodeada de gente, muchas personas, que circulan a mi alrededor, entre ellos mis queridos hijos, personitas increíbles, que me alegran la vida, pero como en todo orden de cosas existe un alguién, que no alcanza para ser humano a quien le pido, muchas veces he tenido que rogarle para que por favor " No me hagas llorar".

Era tanta la desesperación, angustia, que él me provocaba que un día lo espere, tenía todo planificado, y cuando se acerco a saludarme me abalanze sobre él y un cuchillo le clave, lo dejé ahí tirado observandolo mientras se desengraba.

Ahora sí, me dije : nunca mas me haras llorar.FIN


Disculpen ahi esta gracias, un abrazo
 
vikus,11.07.2005
Sentada estaba yo, meditando, reflexionando...que sé yo haciendo qué. Y me pregunté lo que muchas personas hacen por diferentes causas: "porqué?". Claro, asi, porqué?, bueno en realidad, esto no tiene nada que ver...pero seguí pensando...en vidas, en hechos, en cosas...tantas cosas, que en un momento paré y vi que la muerte se estaba acercando ami. En ese momento, yo estaba en trance...quiero decir, como en una burbuja. Senti que mi burbuja se explotó, y una lluvia de gotitas minúsculas cayeron sobre mi.

Yo estaba pensando, tranquila...hasta que ella vino, me miro, la miré y le dije "no me hagas llorar".
 
theonlyerath,11.07.2005
Permíteme que seque tus lágrimas.
-¡Deja ya de lamentarte!-
Te he dicho mil veces que dejes de llorar, la decisión esta tomada, no hay marcha atrás, te dije que no habría una próxima vez y tu prometiste no cometer el mismo error. Confiaba en ti, lo sabes muy bien y por eso debes pagar.
– ¡Como pudiste hacerlo!-
No solo me defraudaste a mí, defraudaste a tus hijos, a tus padres, a tus amigos. No mereces vivir.
¡No me mires así! ¡No me hagas llorar!...

Al otro día, encontraron su cuerpo de frente a un gran espejo, un gran charco de sangre y su revolver.
 
HoneyRocio,11.07.2005

No me hagas llorar

(Cuento)

Todos los días, Liz, visitaba el estanque, allí quería olvidar conversando con sus amigos, su amor imposible.
Sabía que su amor era una locura, pero ¿Quién gobierna al corazón? se preguntaba.
El estanque estaba solitario lo cual le pareció extraño.
El día estaba hermoso, había una suave brisa, un calido sol y el estanque estaba cubiertos por bellas Flores, era extraño no ver juguetear los patos en él o las ranas brincar alegres, de flor en flor. ¿Qué pasara?, se preguntaba cuando alcanzo a ver a una buena amiga.
-Hola Maggy, solitario esta hoy el estanque. ¿Sabes que pasa?
-Hola Liz, me acerque al verte, para prevenirte que no te acerques al estanque. Se ha mudado en el Rodrigo y últimamente esta terrible, se ha vuelto un ogro.
-¿Rodrigo? ¿Vive aquí?- la sorpresa fue inmensa, su amor imposible ahí.
-Pues si, hacen semanas que se mudo para acá, desde ese día el estanque esta solitario, nadie desea acercarse a él, Rodrigo es peligroso y mas últimamente, Liz me dijiste tu secreto amor por él, por favor olvídalo, no te arriesgues.
¡Ay, Maggy!, cuanto daría por olvidar ese amor.
-Liz. ¡Vete!, El no es igual que tu y además es muy peligroso.
-Gracias amiga, tienes razón, me iré.-
Y para que ella creyera se marcho, escondiéndose detrás de unos matorrales hasta que Maggy se alejo por el camino.
No podía perder la oportunidad de ver a Rodrigo.
Se acerco al estanque con precaución, estaba enamorada de Rodrigo, pero no olvidaba las palabras de Maggy.
-¿Qué haces aquí? – apareció Rodrigo con una cara de pocos amigos.
-¿No me recuerdas? Soy yo, Liz.
-¿Liz?, ah si, ya recuerdo, siempre te acercabas por mi pantano. Nunca dijiste que buscabas allí.
-Me gusta su paisaje y el misterio que adivino en él.
-¿Misterio? Jajaja, quizás la muerte sea su único misterio.
-¿Por qué dejaste el pantano?
-Estaba aburrido, muy solo, mi última compañera se fue. Busco un amor. ¿Te gustaría ser mi nuevo amor?
- ¿Yo?, no sé, me dicen que me cuide de ti, que eres malo.-
Rodrigo la mira con tristeza y unas lágrimas brotan de sus ojos.
-No me hagas llorar, mi dulce y bella damita, ¿no ves que solo me encuentro?,
¿Malo? No, solo tengo un corazón triste sin amor.
-No llores, no fue mi intención herirte, si desde que te vi en el pantano te ame.
-¿Me amas?, ¡Oh, mi dulce amada!
¡Acércate!, déjame cuidarte y amarte.
Liz sintió que la felicidad la embargaba, su amado Rodrigo seria por fin de ella. Cuan equivocados estaban todos, él solo era una pobre alma solitaria, solo necesitaba ser amado y ella lo haría feliz.
Ya sin miedo se acerco a su Rodrigo.
Este abrió su boca para besarla y de un solo bocado se comió a la pobre Liz.
Liz al darse cuenta de su fin solo pudo recordar las sabias palabras de aquel viejo refrán:
… Lagrimas de cocodrilo, lloran para engañar…
Rodrigo con cara feliz y barriga llena se hundió en las frescas aguas del estanque pensando en lo tonta que fue Liz. ¿Como el un formidable cocodrilo iba a amar a una infeliz Palomita?
 
rosendo,11.07.2005
Esperé a que mis hijos se fueran al colegio para abordar a María y vomitarle mi desprecio en la cara. Le grité que ya sabía todo y de sus planes para envenenarme. Al principio se rió tristemente, me dijo loco, paranoico y otras atrocidades. Rojo de furia le exigí que reconociera la verdad, que no tenía sentido seguir la bufonada.
Se sentó en el sofá del living y lloró, cubriéndose la cara con las manos. Dijo que otra vez deliraba.
Yo encolericé y rompí adornos, platos y vasos mientras le propinaba terribles insultos y calificativos irreproducibles. Comprometiéndola a confesar el medio de la inoculación vacié mis botellas de vino, como un desquiciado rompí frascos de conservas, tiré sobras de comida, latas, frutas y verduras, el agua del dispensario y de todas las botellas plásticas. Luego fui al baño y tiré al inodoro mi cepillo de dientes, vacié el tubo de dentífrico y quemé mi peine y mis máquinas de afeitar, junto con la crema.
Por fin me detuve, enajenado, jadeando y sudando como perro. María, que había seguido mi deambular destructivo, y con la cara hundida en la profundidad de sus palmas, suplicó –no me hagas llorar mas.
Traté de calmarme. Ella se levantó y me tomó de la mano, llevándome hacia el sofá. Nos sentamos. Me suplicó que volviera en sí, que estos desvaríos debían terminar. Me juró por sus más santas creencias amor y fidelidad legítima. Me rogó que la mirara a los ojos y le dijera si podía ver en ellos alguna de las sandeces de las que acababa de acusarla. En el abismo cristalino de su mirada sólo vi amor, comprensión y verdad.
La cordura hizo efecto y todo me pareció un absurdo. Lloré, pedí perdón y clemencia. Ella tomó mi cara entre sus manos y me dijo “Te amo”. Yo contesté “Yo también”.
La besé en los labios. Pocos segundos mas tarde caía muerto sobre la alfombra del living.
 
gmmagdalena,11.07.2005
Curiosidad

Ya no se dónde esconder mis cosas personales para que no las toques. Ayer estuve haciendo un hoyo en el patio, con la idea de enterrar allí un cofre con todas mis cartas y recuerdos. Pero no es justo, yo no reviso tus cosas y detesto revises las mías para enterarte de lo que fue mi vida antes que ingresaras en ella. Creo que cada uno merece mantener su individualidad, sobre todo en las vivencias anteriores, en los recuerdos no compartidos. Cuando te dije que si seguías con tu curiosidad, ambos perderíamos, te sonreíste mimosa, pero yo me quedé serio.

- No me hagas llorar, sabes que te amo y quiero saber todo de vos – contestaste y, los ojos se te perlaron de lágrimas, pusiste tu mejor cara de niña consentida y tu boquita se frunció en una mueca de rabieta.

Me quedé mirándote y sin contestar pegué media vuelta y salí de la casa. No te voy a negar que muchas cosas pasaron por mi mente, el temor de perderte fue el más fuerte de los pensamientos.

Te dije que ayer estaba cavando un hoyo para guardar mis secretos. Pero lo pensé mejor, dejaré que leas las cartas y se que te sorprenderás y te horrorizarás, entonces no me quedará más que matarte y enterrarte en el patio, junto a las otras curiosas.

María Magdalena
 
muertelenta,11.07.2005
INCESTO

Cuando despertó, estaba de rodillas observándola, junto a su cama, con los ojos desorbitados y agitada su respiración. Con un rápido movimiento, Anita se enderezó y cubrió su cuerpo con la sábana. Una corazonada la alertó y la hizo despertar justo a tiempo. Era un momento que ya veía venir, con temor siempre, pero más con vergüenza porque en su inocencia abundaba la confusión. -¿Qué estás haciendo?- le preguntó. –Vine a buscar mi reloj- dijo él, volviendo de su absorto. – ¿Tu reloj? No tiene nada que hacer aquí… ¿por qué entraste así?... Sin decir una palabra, Osvaldo salió y no volvió hasta el siguiente día. En su caminar se preguntaba una y mil veces sobre su conducta, pero al mismo tiempo sentía una sensación de regodeo.

- Tengo que irme de aquí. ¡Estuvo a punto de hacerlo!... Esto no puede continuar- Pensaba Anita mientras preparaba sus cuadernos para ir a la escuela. –Pero ¿a dónde? Nadie me lo creería. Es el hijo predilecto y con un solo comentario de esto me ganaría el odio de mi madre. Recogió sus hermosos cabellos rizados, se puso unos jeans, chaqueta y salió en silencio.

- Tengo que hacer algo-, se decía así mismo Osvaldo, sin percatarse de que unos ojos curiosos femeninos hacía un rato que lo estaban mirando. Encendió un cigarrillo y entró a la taberna. Ahí un hombre desaliñado le entregó un paquete y él a cambio le dio el valioso reloj que una vez fuera de su abuelo y que había tomado del cofre de su madre. La mujer lo siguió y al entrar a la taberna sintió con fuerza las miradas de los hombres que ahí departían entre humo, alcohol y miseria en el alma. Ella cruzó el lugar con temor y vergüenza, pidió un tequila doble, de un sorbo lo tomó y se acercó a su hermano: - Lo he pensado bien y ya no tienes por qué callar y actuar entre las sombras. Yo tampoco quiero callar. Te amo, siempre te amé, desde que era niña y me arrullabas, cuando me contabas aquellas largas historias de fantasmas mientras acariciabas mi pelo y mi rostro, mientras lo que yo más deseaba era que tocaras mis piernas y mas allá aún… Vámonos de aquí, lejos de mi madre y de todo lo que hay aquí. Llévame a donde podamos descubrirnos como somos y entregarnos sin reserva. –¿Estás segura?, respondió él. Ella asintió, y sin pensarlo más, salieron sin mirar atrás.

 
muertelenta,11.07.2005
Una modificación...

INCESTO

Cuando despertó, estaba de rodillas observándola, junto a su cama, con los ojos desorbitados y agitada su respiración. Con un rápido movimiento, Anita se enderezó y cubrió su cuerpo con la sábana. Una corazonada la alertó y la hizo despertar justo a tiempo. Era un momento que ya veía venir, con temor siempre, pero más con vergüenza porque en su inocencia abundaba la confusión. -¿Qué estás haciendo?- le preguntó. –Vine a buscar mi reloj- dijo él, volviendo de su absorto. – ¿Tu reloj? No tiene nada que hacer aquí… ¿por qué entraste así?... Sin decir una palabra, Osvaldo salió y no volvió hasta el siguiente día. En su caminar se preguntaba una y mil veces sobre su conducta, pero al mismo tiempo sentía una sensación de regodeo.

-Tengo que irme de aquí. ¡Estuvo a punto de hacerlo!... Esto no puede continuar– Pensaba Anita mientras preparaba sus cuadernos para ir a la escuela. –Pero ¿a dónde? Nadie me lo creería. Es el hijo predilecto y con un solo comentario de esto me ganaría el odio de mi madre. Recogió sus hermosos cabellos rizados, se puso unos jeans, chaqueta y salió en silencio.

-Tengo que hacer algo–, se decía así mismo Osvaldo, sin percatarse de que unos ojos curiosos femeninos hacía un rato que lo estaban observando. Encendió un cigarrillo y entró a la taberna. Ahí un hombre desaliñado le entregó un paquete y él a cambio le dio el valioso reloj que una vez fuera de su abuelo y que había tomado del cofre de su madre. La mujer lo siguió y al entrar a la taberna sintió con fuerza las miradas de los hombres que ahí departían entre humo, alcohol y miseria en el alma. Ella cruzó el lugar con temor y vergüenza, pidió un tequila doble, de un sorbo lo tomó y se acercó a su hermano: - Lo he pensado bien y ya no tienes por qué callar y actuar entre las sombras. Yo tampoco quiero callar. Te amo, siempre te amé, desde que era niña y me arrullabas, cuando me contabas aquellas largas historias de fantasmas mientras acariciabas mi pelo y mi rostro, mientras lo que yo más deseaba era que tocaras mis piernas y mas allá aún… Vámonos de aquí, lejos de mi madre y de todo lo que hay aquí. Llévame a donde podamos descubrirnos como somos y entregarnos sin reserva. –¿Estás segura?–, respondió él. –No me hagas llorar–. Ella asintió, y sin pensarlo más, salieron sin mirar atrás.
 
mauricioarollo,11.07.2005
Recordaba haber muerto. ¿Hacía horas, o meses? Qué importa. Había sido tan rápido que no recordaba mayores detalles, sólo la respiración pegajosa, difícil, un olor a amoniaco que por poco le hace saltar la nariz, y la oscuridad más horrible que hasta entonces había visto, trepanándole el cráneo como una sierra de dolor.

"Fue mi muerte" decía, "pero. ¿Cuándo, si aún estoy vivo?".
Hizo un esfuerzo y descendió en el tiempo hasta donde su memoria se hundía en una sensación inconsistente, movediza, como de gelatina.

"Pero qué estúpido soy, si estoy vivo. ¿O muerto? ¡Dios mío! ¿O muerto?".

Se impacientó en el sillón, según él, se tocó, respiró. Porque si hace un instante tenia plena conciencia de su vida, ahora empezaba a caer en la plena conciencia de su muerte.

Concentró su energía mental, batalló.

"Peor si muerto, ¡Dios mío! peor si muerto" alcanzó a balbucear, mientras círculos concéntricos lo sobrevolaban. Iba a gritar cuando de su memoria se le fueron cayendo pedacitos de herrumbre, y se tranquilizó.
"Sofía, Sofía, acabo de tener un sueño que prueba que tenemos una vida anterior, quiero decirte, mi esposa, una vida...una...".
Vio las sábanas blancas y le llegó el olorcillo a yodoformo de la sala espaciosa.
"¿Dónde estoy, por favor, dónde estoy?".
Tranquilícese, doctor, está usted saliendo ahora mismo del efecto de la anestesia, le dijo la enfermera de turno.
 
mauricioarollo,11.07.2005
Recordaba haber muerto. ¿Hacía horas, o meses? Qué importa. Había sido tan rápido que no recordaba mayores detalles, sólo la respiración pegajosa, difícil, un olor a amoniaco que por poco le hace saltar la nariz, y la oscuridad más horrible que hasta entonces había visto, trepanándole el cráneo como una sierra de dolor.

"Fue mi muerte" decía, "pero. ¿Cuándo, si aún estoy vivo?".
Hizo un esfuerzo y descendió en el tiempo hasta donde su memoria se hundía en una sensación inconsistente, movediza, como de gelatina.

"Pero qué estúpido soy, si estoy vivo. ¿O muerto? ¡Dios mío! ¿O muerto?".

Se impacientó en el sillón, según él, se tocó, respiró. Porque si hace un instante tenia plena conciencia de su vida, ahora empezaba a caer en la plena conciencia de su muerte.

Concentró su energía mental, batalló.

"Peor si muerto, ¡Dios mío! peor si muerto" alcanzó a balbucear, mientras círculos concéntricos lo sobrevolaban. Iba a gritar cuando de su memoria se le fueron cayendo pedacitos de herrumbre, y se tranquilizó.
"Sofía, Sofía, acabo de tener un sueño que prueba que tenemos una vida anterior, quiero decirte, mi esposa, una vida...una...".
Vio las sábanas blancas y le llegó el olorcillo a yodoformo de la sala espaciosa.
"¿Dónde estoy, por favor, dónde estoy, no me hagan llorar?".
Tranquilícese, doctor, está usted saliendo ahora mismo del efecto de la anestesia, le dijo la enfermera de turno.
 
-Odin-,11.07.2005

ubLas Últimas Palabras/b/u

-¡Mátenlo!¡Mátenlo! -gritaba la multitud.
-Señor, ¿acaso no escucháis al pueblo?
-No, no debe ser condenado.
-Pero señ...
-Pensándolo bien tenéis razón, un perro como ese no merece la vida, ¡guardias! ¡que le corten la cabeza!
-¡No! Esposo mío, por favor, si aún en tu corazón queda un ápice de ese amor que profesaste, te pido que no lo matéis. Por favor, no me hagas llorar.
-Ya la orden fue dada; míralo, allá va... ese pobre extranjero.
-¡Esperad! ¡Por el amor de dios que no lo matéis!
-Dios no tiene nada que ver en esto amada mía -dijo el rey mientras extendía su mano derecha con el pulgar hacia abajo.


-Agachad, agachad, ¿qué no entendes? ¡que te agachéis he dicho! -dijo el verdugo mientras tumbaba al desconocido al suelo de un sólo golpe. Procedio entonces a tomarlo de los cabellos y luego arrastro su cabeza hasta la piedra en que cientos ya habían sufrido su futuro destino.
-Al menos... ¡al menos dejadle decir sus últimas palabras!
-¡Aguardad! No lo decapitéis... aún, yo también quiero oír "esas" últimas palabras.

El guardia levanto al mutilado, cogiéndolo por sus ropas desgarradas y le dijo:

-A ver, decid pues tus últimas palabras.

Un fulminante silencio se extendió por todo el coliseo, el forastero se volteo para pasar su mirada sobre la reina y luego mirar fijamente al rey, directamente al fulgor de sus ojos. Y allí, allí fue cuando dijo:

b-Yo aún te amo/b
 
jackievidela,12.07.2005

“Por Favor, No Me Hagas Llorar”

Una y otra vez sentía el murmullo, aquella voz que me repetía “no me hagas llorar”. Deambulaba en una dimensión ficticia, no veía nada, sin embargo me sentía observada por millones de personas. Giraba, corría, avanzaba y no llegaba a ninguna parte… una y otra vez la misma voz: “por favor, no me hagas llorar”.

De repente vi unos ojos, los ojos más bellos que he visto en mi vida, me observaban con amor, como ningún hombre en la vida me ha mirado, eran estos los ojos que me pedían no los hiciera llorar y les prometí que nunca llorarían.
- no, mi amor, tú jamás llorarás.

Despierto, veo los restos en el balde y reconozco sus pequeños ojitos suplicándome no hacerlos llorar.
- no, amor, tú jamás pudiste llorar, pero yo me pasé toda la vida llorando por no haberte dado a ti la oportunidad de hacerlo.
 
StellaRivera,14.07.2005
El último adios

Miré sola y callada por la ventana mientras el agua de la lluvia resbalaba lentamente por fuera del cristal, guardabas tus cosas en una maleta y yo lo único que pensaba era -Dios mio, por favor, no me hagas llorar- pero de nada valió la súplica porque mis ojos empezaron a llenarse de lagrimas de tal forma que comenzaron a desbordarse sin control.

Yo sólo deseaba en lo más profundo de mi alma que te dieras cuenta que te amaba y que quería que estuvieras a mi lado. Pero en el momento que tu auto arrancó dejando atras todo, incluyéndome a mi , me destrocé y caí en una profunda depresión que me llevó hasta aqui donde estoy ahora y aunque veo que estas aqui conmigo no me reconforta porque en mi sepulcro, no hay espacio para los dos.
 
alexandra,14.07.2005
No me hagas llorar

Un silencio inundaba la habitación, momentos antes todo era diversión y alegría que se convirtieron en desesperación e impotencia. Los niños lloraban, el abuelo solo miraba lo que quedaba de ella, antes llena de energía, vigorosa y radiante, ahora, sin vida, desparramada, mezclada con ese rojo frío que hacía todo más tenebroso.
Llego el momento del que querían escabullirse, llegó la abuela, debían decirle la verdad. Su esposo, con cuidado de no lastimarla contó lo que no podían callar, lo que no podían ocultar.
La abuela quería gritar, pero el grito lentamente murió en su garganta. Entre murmullos alcanzó a decir:
_ No me hagas llorar.
Y su mirada se perdió en la planta sin vida, mezclada con los pedazos esparcidos de la maceta roja y al lado, el arma homicida: la pelota de los nietos.
 
theonlyerath,14.07.2005
Se me olvido titular mi cuento.
Se titula "Perdóname"
 
soleli,14.07.2005
OBSCURO SECRETO

Siiiiiii !! Gritaste fuertemente cuando llego la maleta roja, te pregunte que era, pero preferiste dejarlo de sorpresa para la cena, yo estaba ansiosa, nerviosa... Sabia que desde algún tiempo esperabas algo, de alguien, de algún lado, pero nunca dijiste ni una palabra, entonces sonó el teléfono y una voz algo extraña pregunto al otro lado:
-¿El Sr. Alfonso Rodríguez, esta?
Te pase el teléfono, no quise preguntar quien era, porque al escuchar esa voz sentí un terrible escalofrió que me recorrió todo el cuerpo.
Tomaste el teléfono y fuiste para la otra habitación, no querías que escuchara, pero mi curiosidad pudo mas, me acerque a la puerta y tú decías:
-¡Si ya llegó!
-¡La estoy mirando!
-¡Aún lo creo!
Y cambiando tu tono de voz dijiste:
-Hoy…hoy voy a decirle toda la verdad, ella tiene que saberlo…
Tú colgaste, yo corrí hacia la sala y me senté, fingía que veía la tele, llegaste y te sentaste junto a mí, traías la maleta roja contigo, y dijiste:
–Tengo algo que decirte, voy a entrar a ese cuarto y cuando salga sabrás toda la verdad…
Yo asentí con la cabeza, mientras intentaba adivinar cual era tu tan preciado secreto, ¿será una beca en el extranjero? ¿Lo habrán nombrado miembro honorario del club de matemáticos? ¿Su ex le dio el divorcio? ¿Su jefe lo promueve?. Después de cuarenta minutos, diez cigarros y muchas preguntas, salio él, con tacones altos, medias de red, minifalda, peluca, y un maquillaje que hasta la artista mas reconocida le hubiera envidiado, entonces saco de la maleta una corona…
-¡Me han dado el premio a la reina de los travestis !
-¿Queeeeeee? ¿Como pudiste hacerme esto? ¿Me saliste gay? ¿Te di los mejores años de mi vida? ¿No te importo verdad? ¿Que voy a decirle a los niños? Y tu solo dijiste con un tono chillón y cara de puchero…

-No me hagas llorar…

-¡Que se me corre el rimel!




 
soleli,14.07.2005
mANDE MI CUENTO EL DIA DE HOY QUE ES 14 Y APARECE COMO SI LO HUBIERA MANDADO EL 15 ¿QUE PASA?
 
Hermeset,16.07.2005
No se preocupe soleli, consideraremos su cuento en el concurso.
 
Hermeset,18.07.2005
bDisculpas a todos los participantes en este concurso, ayer y hoy no me ha funcionado internet entonces no pude leer ni escoger a los ganadores. Mañana lo haré./b
 
concursosprosaypoesia,19.07.2005
buY LOS GANADORES HAN SIDO...:/b/u

uORO:/u mauricioarollo
uPLATA:/u jackievidela
uBRONCE:/u HoneyRocio

¡¡ENHORABUENA A LOS PARTICIPANTES Y A LOS GANADORES!!

Disculpas a todos por nuestro retraso en anunciar los ganadores.

Atentamente, concursosprosaypoesia.
 
muertelenta,19.07.2005
Felicidades a los ganadores... bien merecido!!!
 
corazonpartio,20.07.2005
Excelente, felicitaciones a todos los participantes y por supuesto a todos los GANADORES
 
alexandra,20.07.2005
hola
felicitaciones a todos los ganadores
en el otro concurso, apuesto que una de las ganadoras es corazon partio. Y Hermeset, buenas noches.
 



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