No pidas que extienda mi mano por ti ahora... solo encontraras un gran vacio y nadie que pueda ayudarte.


No pidas que suspire por cada cosa dulce que me dices... nada que me digas podrá animarme.


No intentes levantarme el animo... tu eres mi amigo y ves el mundo color de rosa solo para mi.


No intentes convencerme... ya no soy una niña y he aprendido a pensar por mi misma.


No intentes que me perdone... no hay persona que odie más en el mundo que a mi misma.


No procures protejerme... tarde o temprano me vas a dejar sola.


No compares mi vida con la de alguien peor... de todos modos me siento miserable.


A todo esto... ¿¿por qué intento decirte lo que pienso si ni siquiera tratas de escuchar lo que grito??



Tal vez sea solo yo... que no siento ganas seguir viviendo.


Tatiana