La subida inclinada se dirigia al cielo, el motor se esforzaba para alcanzar su meta, el conductor en espera del encuentro.
Una mirada al frente, un aviso de pasion, nervios en el cuerpo. Ahi estaba en frente, el dilema resuelto.
Solo, en el interior de su auto sonríe y comprende la pasion que la envuelve. Ese aroma publicitado en el alto del cielo, ese aroma que le provoca, ese aroma que aprenderá a amar.
Cinema dice el aviso, pasion en tu piel y sensualidad en tus ojos.
Fragancia mágica que adorna tu cuerpo, te busco y no te encuentro, te llamo y no respondes, pero al partir mi mirada por el retrovisor apunta al perfume. Recuerdo tus letras, recuerdo la complicidad de un texto, recuerdo tu rostro y en silencio sigo mi camino, dejando atrás un perfume de papel.