La carroza de la funeraria trepaba por la subida del
tunel que comunicaba la morgue del hospital con la calle.
En su interior,y en un feretro yacia el cuerpo de Luis,un hombre comun, muerto unas horas antes.

Aparte de tener una familia normal,un trabajo normal,en nada especial se habia destacado.Solo que siempre estuvo interesado en las artes de la magia,sobretodo era admirador del gran Houdini,maximo escapista del siglo pasado.
Leia libros y revistas con respecto a escapes de magia,pero sin llegar a concretar sus deseos de llevar a cabo algun acto.
En sus tiempos libres imaginaba grandes funciones,con personalidades de todo tipo que venian a admirar su acto.Mera imaginacion,que se esfumaba al llegar a sus quehaceres diarios,y guardando en su mente el final de ese espectaculo, lo retomaba mas tarde-despues de terminado su trabajo- camino a su casa.
Laura,su mujer le decia que dedicara su tiempo libre en otras cosas mas productivas,que el arte del escape no era mas que un burdo truco,empleado por magos de bajo nivel.
Para Luis, el hecho de escapar o desaparecer,llamo su atencion durante varios años

La sala del luto era espaciosa
Seis candelabros con cirios rodeaban el feretro cerrado
y una cruz de madera en la cabecera del mismo,colgaba de la pared.
Las sillas distribuidas en toda la sala,eran ocupadas por familiares y amigos,que venian a dar su pesame.
Cada uno se acercaba al ataud susurrando algunas palabras o rezos en forma de despedida,sin imaginarse
que la magia del ultimo acto se habia cumplido.
Por que Luis ya no estaba ahi.-