Lolo es un niño muy distraído y debido a eso siempre olvida algo y termina por meterse en problemas, aquella vez, el problema era muchísimo mas serio, pues había dejado de hacer la tarea y tuvo que inventarse algo casi al último momento y se le ocurrió la idea de copiarse de alguien y quien mejor que uno de sus mejores amigos, sin embargo este no parecía muy convencido.
-Mira Lolo, deja de verme la cara de tonto, ¿crees que no me he dado cuenta de tus mentiras? – Lolo mira a Sebastián e inútilmente trata de convencerlo de algo que ni el mismo se lo cree.
-Te estaba simplemente pidiendo un favor, porque como te digo, se me quedo la tarea en la mesa del comedor, y necesito urgentemente que me prestes tu cuaderno de matemáticas para terminar solamente el último ejercicio. –Sebastián se niega rotundamente a prestarle el cuaderno y con conocimiento de causa le dice.
-Lo siento, pero ayer te vi jugando en el patio de tu casa toda la tarde, incluso yo estaba pasando con Joselito cuando habíamos terminado las tareas, y tu seguías allí tan entretenido que ni te inmutaste en saludar. –Lolo le dice con justificación.
-Mira, si estas resentido porque no los salude ayer, esta bien, lo siento, de verdad acepta mis disculpas, pero no te pongas así, y ayúdame. -Sebastián le dice definitivamente.
-No, arréglatelas solo.
Era evidente que aquel día en el bus escolar yendo precisamente al colegio, aun tenia la oportunidad de convencer a alguien mas y fue así como le dijo a Joselito que le prestara la tarea, pero Joselito no la tenia completa pero al menos tenia algo, Lolo escribió todo lo que mas pudo antes de llegar al colegio, pero Sebastián quien había sido regañado por la profesora el otro día que Joselito, víctima de las mentiras de Lolo había dicho que Sebastián le había copiado el examen siendo Lolo quien le había pasado la copia a Sebastián, haciéndolos quedar como unos tramposos. Esta vez Sebastián no le ayudaría mas a su amigo y se encargaría de que Joselito tampoco le ayudara, pues estaba muy ofendido con el y en varias veces le había dicho que se alejara de ellos que ya no le ayudarían mas y que dejara de inventar mas mentiras. Lolo un poco molesto al final del día cuando gracias a la desatención de su amigo había perdido puntuación en las clases, decidió alejarse un poco de sus amigos y fue a buscar otra gente de los otros salones, en la última clase decidió salirse con la excusa de no mostrar que no había hecho la tarea. Lolo le dijo a su profesora.
-Profesora, ¿puedo ir al baño? –La profesora le recordó que quedaba poco tiempo para el cambio de clase y le dijo.
-Mejor espera un poco, luego suena el timbre para el cambio de clase y necesito además ver tu tarea, ya casi estoy que te llamo. –Lolo insistió, hasta que la profesora le dijo.
-Bueno, pero regresa enseguida. -entonces se fue a buscar nuevos amigos, decidió meterse en una clase que no era la de él, pero como esta clase estaba reunida en el patio haciendo la clase de educación física, preparándose para un agotador partido de futbol, entonces decidió meterse ahí, una vez camuflado entre los de octavo grado, pudo notar que era el centro de atención por su rostro desconocido para muchos, entonces una vez el profesor se retira les dice.
-ok, muchachos, iré a mi oficina, mientras lleno estas planillas, espero que se pongan a practicar mientras estoy ausente, espero que se manejen bien. - El grandulón se acerca a él con la intención de interrogarlo con algo de violencia.
-Oye tu niño perdido, ¿Qué haces aquí? – y mientras lo empuja, Lolo busca defenderse sin ningún resultado pues ya el Gorila aquel le ha partido la cara y ha quedado sin conciencia en medio del campo de juego, de inmediato Carmen y Doloritas van a ayudarlo mientras insultan con un gran número de palabras vulgares al grandulón que lo golpeo.
-¿Qué te pasa Manolo? Mira lo que hiciste, eres un desgraciado, pobre chico.- en aquella clase habían más mujeres que hombres entonces era casi obvio que Carmencita y Dolores no eran indiferentes como líderes, de modo que el grupo entero critico la acción del gorila y este se vio desplazado a su vez por sus compañeros de clase y amigos, entonces Manolo quien era el Gorilon, les dice.
-Esta bien tontos, los dejo con ese enclenque bueno para nada.- Mientras Carmen y Doloritas consentían el rostro de Lolo, este haciéndose el adolorido seguía haciendo teatro solo para tener a esas dos mujeres a su lado.
-Me duele, creo que tengo fracturada la mandíbula, no me sale sangre porque tengo muy poca, creo que si me sale me muero, si, creo que me voy a morir… -Una de las chicas le dice.
-Tranquilo chiquito, tranquilo que estas con las mejores enfermeras que has podido conocer, no te abandonaremos en este mundo cruel.-Carmencita le dice muy tiernamente mientras lo mira con lastima pero al mismo tiempo con algo de cariño.
-No te preocupes precioso, que esos golpes serán borrados con estos besitos inmediatamente comienza a besarle el rostro. -De repente el profesor vuelve para ver lo sucedido.
-Bueno, ¿Qué pasa aquí? ¿Qué significa esto? –Doloritas señalando a Manolo y con un dedo inquisidor apunta directamente hacia donde se encuentra Manolo, quien se encuentra bastante retirado del melodrama que se están inventando todos los de su clase, el profesor mirándolo con cara de justicia dice.
-No esta bien, eso no me parece nada bien. –Entonces llama a Manolo.
-Manolo ven, ¿Por qué lo golpeaste? –Manolo se acerca y muy decididamente, lo mira a los ojos y le responde secamente.
-Porque si. –El Profesor, respira profundo como para no exaltarse con dicha respuesta y le vuelve a preguntar, esta vez con una actitud más calmada, pero fingida.
-No, en serio, ¿me podrías decir? –Manolo, se ríe y mientras lo hace le repite.
-Porque si, profe, porque si. –El profesor, mira a Lolo aun haciéndose la victima desangrada, todavía con esas mujeres que no paran de acariciarlo y de consentirlo, todavía acostado en el piso. Mientras Lolo abre un ojo para ver al profesor, Doloritas dice.
-Profesor, Manolo se le dejo venir con todas sus fuerzas y le partió la cara. –El profesor, evalúa lo dicho por Doloritas y viendo la cara de descarado de Lolo, trata de reírse, pero inmediatamente guarda compostura y mira firmemente a Manolo mientras dice.
-No es gracioso Manolo, lo golpeaste simplemente porque si, eso no se hace, ahora bien, si es que son boxeadores y quieren caerse a golpes, no me opongo, pero aquí en este colegio se enseña a jugar futbol, no boxeo, si quieren pelear, muélanse a golpes allá en el parque, no aquí. Manolo baja la mirada y trata de justificarse diciendo.
-Pero ese chico no es de aquí, es decir no es de este salón. –El profesor, mira a Lolo y le pregunta.
-¿y tu que estabas haciendo aquí? –Lolo sigue en su payasada y las chicas en su jueguito, y tratándose de acomodar le dice débilmente al profesor.
-Soy del otro octavo, pero solo iba para el baño, y me dio curiosidad por jugar con ellos. –El profesor lo mira y viendo el teatro que formo, le dice.
-y ¿eres actor? O quizás… -Manolo le dice al profesor.
-Solo lo empuje, profe.-Pero Carmencita dice.
-Mentira, todos vimos que le partiste la cara. –El profesor dice con ironía.
-Bueno, pero aun respira, creo que esta vivo y puedes moverte ¿verdad? –Lolo lo mira con cara de que sufre y con voz entre cortada le responde.
-Eso creo profesor. –El profesor lo toma de la mano y de un solo jalón lo para y le dice.
-Pues no te veo muchos ánimos a jugar, a no ser que quisieras jugar al herido y ellas a las enfermeras, mira aquí se juega un deporte llamado futbol, no a la casita, o al papa y a la mama. –Lolo se queda mirándolo con cara de descarado y a pesar que el profesor esta siendo victima de sus mentiras y viéndose rodeado por sus alumnos quedando como un tonto frente a Lolo este lo invita a jugar.
-Bueno, ¿Qué esperas? Atrapa el balón, juega. –Manolo mira al profesor con extrañeza y el profesor viendo la cara de desconsuelo de Manolo, le dice en voz baja.
-Demuéstrame que no solo estas hecho de problemas. –Manolo le sonríe y sale al campo a patear el balón mientras Lolo parece además entenderse con el juego a la perfección.-Esa misma tarde Sebastián y Joselito estaban conversando mientras Sebastián le cuenta a Joselito la ausencia de Lolo.
-a Lolo lo empujaron al suelo y este le responde al profesor que solo quería jugar ya que la profesora de la clase de matemáticas de donde estábamos, le había dicho que se podía ir a la casa quien fuera respondiendo el examen oral que él estaba evaluando, entonces viendo que se podía quedar más tiempo decidió entrar a jugar un poco; esta respuesta no le desagrado para nada al profesor de educación física, entonces le permitió quedarse hasta la salida, y los otros compañeros de la clase le dieron la bienvenida y le brindaron la posición de arquero, el cual era del gorila, obligando a este a ser de defensa, una vez comienza el partido Lolo se pone muy contento y empieza a jugar como nunca asombrando a sus nuevas amigas quienes no dejaban de echarle porros y animándolo mas y mas, el profesor vio a este nuevo alumno y pidió al coordinador de su clase que se lo dejara para sus clases o al menos que lo cambiara de curso para que estuviera con ellos ya que octavo era quienes iban ganando el torneo inter clases del año pasado y veía en Lolo un gran prospecto de deportista, incluso para que participara más adelante en los torneos inter colegiales.-Joselito mirando a Sebastián, le pregunta.
-¿te estas volviendo como Lolo? –Sebastián mira a Joselito y le dice.
-¿Cómo se te ocurre? Acaso, ¿me vez cara de mentiroso? –Joselito le responde.
-No pero todo eso no lo pudiste ver en un momentico, no seas embustero. –Sebastián le dice.
-quizás no pero conociendo a Lolo, se que le debió haber pintado las cosas al profesor de esa manera, tu conoces que Lolo tiene mucha imaginación para mentir. –Joselito se ríe y le dice.
-Pero recuerda la suerte de Lolo, no es difícil que ahora que ha sido aceptado en el equipo para este año, salga hecho todo un futbolista. –Sebastián sonríe y asienta con la cabeza.- así pasaron varios meses y Lolo descuido sus antiguos amigos y también sus clases, pero esto no le quita el sueño ya que Carmencita y Doloritas iban todas las noches a su casa para ayudarle con las tareas y también a estudiar.
-a ver Lolo, creo que estas un poco flojo en matemáticas y queremos que te pongas a nivel con nosotras, ven Lolito, siéntate a nuestro lado, ven. –Doloritas, toma a Lolo de la mano, pero este se le suelta y sin soltar el video juego les dice.
-sí, chicas, vayan leyendo eso que así voy escuchando, es que esto aquí esta complicado. –Lolo esta mas concentrado en el video juego que en la intención que tienen las chicas en explicarle la tarea.- sin embargo mientras ellas repetían la lección en su cuarto, el se ponía a mover el balón o a jugar atari, ellas solo querían estar con el de todas maneras y a él no le molestaba la compañía ya que además de hacerle las tareas le traían tortas y sándwiches.
-No importa Lolo, pero esta clase la pasas, porque la pasas, solo deja que te ayudemos, ¿verdad Carmencita? –Carmencita mientras terminaba una raíz diferencial y empezaba con ecuaciones lineales y agregaba números y símbolos por toda la hoja, su lápiz parecía volar entre sus dedos, mientras con la otra mano le sacaba humo a la calculadora científica, mientras lejanamente en su pensamiento escucho la pregunta de Doloritas.
-si, amiga, claro que si, este chico no se quedara atrás, Mira Lolo, que buen espacio tienes en tu cuarto, ojala nosotras tuviéramos la mitad tan siquiera. –Doloritas sin haberse percatado de la habitación de Lolo le dice lo mismo.
-Lolo, ¿te has imaginado algo? ¿Qué te parece si venimos todos los días a ayudarte a estudiar? –Lolo sin despegarse de su juego.
-claro que si chicas, lo que quieran, además, con lo bien que la paso con ustedes, jamás me imagine que las niñas fueran así… ¿saben a lo que me refiero? Así de amables. -El caballerito era muy bien atendido, cosa que hasta sus propios padres y hermanos admiraban profundamente en aquellas abnegadas amigas, Con el tiempo no solo esta amistad fue creciendo más y mas, también creció el número de amigos y otras amigas, las cuales querían imitar a Carmencita y Doloritas, mientras más pasaba el tiempo mas y mas amigas tenia. En el parque Sebastián y Joselito les migan pan a las palomas, mientras sentados en una banca miran un grupo de niñas y se acuerdan inmediatamente de los tiempos en que disfrutaban echándolas del parque con su amigo Lolo, entonces Joselito dice.
-¿Qué será de nuestro amigo Lolo? –Sebastián dice con ironía.
-¿Amigo?, ese nos abandono, ahora tiene otros amigos, no se te olvide que ahora es el chico mas popular de nuestro colegio. –Joselito le dice.
-Si, podrá ser muy popular y todo lo que quieras, pero sigue siendo nuestro amigo. –Sebastián le recuerda.
-Pero ya han pasado meses desde aquel día que lo empujo el grandulón y se volvió un “superstar” y solo tiene ojos para sus nuevos amigos, ni siquiera ha vuelto al parque a la hora señalada como siempre después de estudíar. –Joselito se ríe y luego dice.
-¿después de que? Creo que esa palabra no fue inventada para el, pues siempre estaba atento a copiarnos, ¿lo recuerdas? –Sebastián le dice.
-No siempre fue así, creo que todo empezó cuando perdió a su abuelo, el era muy estudioso, incluso mas que nosotros. –Joselito le dice.
-Bueno, ¿tanto así? –Sebastián le responde.
-Las cosas eran al contrario, yo era quien me hice amigo de el para que me ayudara en mis tareas, pero nunca me espere esto… -Joselito mira a Sebastián y colocándole una mano por la espalda le pregunta seriamente.
-¿Qué nos hiciera que?, ¿las tareas?, no entiendo. –Sebastián le aclara.
-es que, eso lo traumatizo, la muerte de su abuelo lo puso así. –Joselito se agarra la barbilla con los dedos y mirando a Sebastián le dice tristemente.
- Creo que lo hemos juzgado mal, al descuidarlo, es una buena persona, deberíamos de visitarlo. -Entonces extrañándolo profundamente fueron a la casa de Lolo, por varios días después de clases a hacerle la visita, pero siempre o casi siempre le decían que estaba ocupado estudiando, los padres de Lolo creían que era Sebastián y Joselito los malos amigos que le robaban las tareas y lo dejaban mal ante los profesores, sin embargo muy en el fondo Lolo extrañaba mucho aquellas tardes en el parque montando bicicleta, comiendo helado y ridiculizando a las niñas diciéndoles cosas, o simplemente tirándoles palitos y piedritas hasta alejarlas del parque, el parque de su vecindario era su territorio y era allí donde comenzó la amistad entrañable de estos tres amigos que separados por inconvenientes académicos, y sumados a las mentiras de Lolo dejo atrás solo la sombra de lo que fue una amistad.
Cierto día Carmencita se asoma por la ventana del cuarto de Lolo cuando estaba escuchando la conversación de Sebastián desde afuera y al capturar la atención de Joselito mientras Sebastián hablaba con los padres de Lolo, Carmencita le dice a Dolores.
-¿te gustaría jugarle una broma a estos dos allá afuera? pues buscan a Lolo.-mientras Dolores y Carmenza ven a Lolo distraído en sus juegos, ellas deciden quitarse la parte superior del vestido y asomándose por la ventana se hacen las sensuales, como si lolo las estuviera poseyendo.
- Si Lolo más, más… -dice Doloritas.
-Toda, hasta el fondo, vamos Lolo. - Entonces Sebastián una vez habla con los padres de Lolo y estos cierran la puerta, voltea para retirarse mientras ve la boca abierta y babeante de Joselito y le pregunta.
-¿Qué te pasa Joselito, viste un ovni? – a lo que Joselito sin emitir palabra alguna estira su brazo y señalando con el dedo le muestra el show que hacen las chicas de Lolo, Sebastián casi con unos ojos desorbitados ve esto.
-Increíble, que Mujeres!. - No era de extrañar ya que Carmencita era de las más hermosas de todo el Colegio, además de la más desarrollada físicamente, Doloritas no se le quedaba atrás, entonces cuando pasa el show, ellos deciden volver a intentar entrar esta vez no pidiendo permiso a los padres de Lolo, sino llamando a Lolo directamente.
– Lolo, ábrenos la puerta, queremos conversar contigo. –Joselito mientras tanto le hace señas a las chicas de que llamen a Lolo. Pero ellas solo voltean para mirarlo mientras se vuelven a vestir. -Lolo quien estaba entretenido voltea a mirar a la ventana y estas dos chicas ya vestidas permanecen sentadas al lado y lado de la ventana de Lolo, el cual al salir a la ventana ve a sus antiguos amigos a los que los invita a subir.
-Ok, Muchachos, veo que ya les dio “Amiguitis” y vinieron buscarme después de tanto tiempo y para mostrarles que no soy rencoroso, pues los hare seguir. -sin embargo Carmencita y Doloritas al ver que ellos iban a entrar deciden despedirse de Lolo y se van.
-Mira Lolo, creo que ya es tarde mañana vendremos nuevamente, ¿quieres que traigamos torta de manzana o de calabaza?. –Lolo con una sonrisa de oreja a oreja, les dice.
-Mitad de una y mitad de la otra. ¿se puede? –Doloritas le dice muy cariñosamente.
-Claro Lolo, para ti, todo lo que quieras. –dicho esto, y en el mismo momento que sus amigos entraban, las dos al mismo tiempo le dan un beso cada una en una mejilla.
-Adiós, Muuua!. -Joselito y Sebastián le piden casi de rodillas perdón a Lolo, el cual sin ningún resentimiento no solo se los concede sino que les da un fuerte abraso.
-Vengan mis amigos, como los quiero. Yo también los extrañe muchísimo. –Mientras las chicas van saliendo de la casa Joselito las observa a ellas desde la ventana. -Joselito y Sebastián quieren saber que hace para tener esas dos conejitas a su lado.
- Lolo les cuenta desde lo sucedido en aquel juego de futbol, ese mismo día que había decidido alejarse del grupo porque no rendía académicamente, les mostro lo que Carmencita y Doloritas hacia por él, las tareas, los exámenes, etc. Joselito creía saber que era en realidad ese tal “etc.” del que hablaba.
-Dime Lolo ¿Qué mas hacen ellas contigo? –Lolo, les repite lo mismo.
-Pues desde que las conocí, hubo química y no solo eso, también me ayudan en Matemáticas, Biología, etc. –Joselito le reitera la pregunta, pero esta vez con más malicia.
-Pero, ¿hacen algo más? ¿Más intimo? –Lolo parecía no entender lo que Joselito quería decir y simplemente dice de un modo inocente.
-Nada, solo jugamos, la pasamos bien, están junto a mi siempre, etc. - Sebastián vio que eso no era una respuesta que lo dejara conforme entonces pregunto de nuevo.
-¿que es en realidad, ese algo que te hace a ti tan importante para las mujeres? -Lolo al escuchar la palabra “Importante” volvió a llenarse de orgullo y decidió mentir pero esta vez de un modo mucho más ambicioso.
- para esto les digo que no les daré la respuesta ya mismo sino que si en realidad quieren saber la verdad, es decir el secreto a toda esta situación de lo que me ha pasado tienen que jurar ante la tumba de mi abuelo Idelfonso y con la biblia Mesiánica en la mano pues no les revelare ese secreto si no hacen eso. -Sebastián y Joselito le prometieron no decirle a nadie.
-Mira Lolo, por la amistad que tenemos, te juramos solamente a ti guardar ese secreto. -pero Lolo les dijo que quería más pruebas.
-Si amigos, eso ya lo se, pero quiero que pasen la prueba de fuego, acuérdense que han pasado muchos meses y creo que son unos espías, o sea no creo puede ser lo mas probable, solo demuéstrenme que son leales. -entonces ellos dijeron que cualquier cosa.
-Lolo, por ti haríamos lo que nos pidas, siempre y cuando tu nos demuestres esa confianza de la que hablas también y nos des el secreto, solo dilo. -Lolo insistió en que ellos tenían que Jurar sobre la tumba abierta de su abuelo Idelfonso y en la mano derecha la Biblia Mesiánica.
-Ya les dije, tienen que llenarse de valor, así como tuvieron el valor de venir aquí después de tantos meses, van a tener el valor de ir allá y hacer esto que les digo. -Joselito le pregunto a Lolo que si era necesario abrir la tumba.
-no solo abrirla, sino sacar los restos de mi abuelo Idelfonso y en la mano derecha del difunto sobre la biblia mesiánica junto con las manos de ellos dos, tendrían que jurar no contarles a nadie. -pero Joselito y Sebastián seguían bregando a bajar la condición en que solo se asomaban por el cementerio y si mucho con los evangelios o la biblia Valera que tenía menos libros.
-Mira Lolo, no exageres, ¿no será que te estas tomando todo tan a pecho, que así de ofendido estabas con nosotros? Bájale, haremos eso pero no de ese modo. -Joselito se rio como diez minutos y dijo.
- lo gracioso del asunto es que primero que todo la biblia mesiánica no es como ustedes se la imaginan, no es una biblia católica tampoco, ni protestante, ni judía… y que mi abuelo Idelfonso había muerto en un derrumbe en una mina de oro y que nadie lo había encontrado aun, por este motivo tienen que hacer lo que les pido. Además es un secreto muy valioso, ya que se trata de atraer a cualquier persona especialmente a las mujeres más bellas y perfectas del planeta. -Ellos le pidieron tiempo para pensarlo.
-Mira Lolo, tienes razón, si, es un secreto muy valioso, y no dudamos en ningún momento de lo valioso que eso es, pero mientras nosotros evaluamos un poco mejor lo que nos pides, tu trata de ser mas comprensivo y de bajarle la intensidad a tu propuesta, ya que no es miedo ni nada por el estilo, sino que necesitamos tiempo, tu me entiendes, ¿cierto? –Lolo se ríe.
-Si muchachos, creo que los entiendo. –Sebastián, se acuerda que tiene asuntos pendientes en la casa y se tiene que ir, entonces le pregunta a Joselito.
-¿quieres quedarte Joselito? Yo tengo cosas que hacer. –Joselito no tenia nada que hacer donde Lolo, pues apenas estaban rompiendo el hielo por primera vez después de tantos meses de silencio, además de la propuesta que Lolo les había puesto, no era fácil para Joselito quedarse para argumentar en lo mismo, entonces considerando la salida fácil de su amigo Sebastián, dice.
-No gracias, también me tengo que ir. - Lolo se despidió de ellos y ellos se fueron juntos discutiendo la propuesta, en el camino a sus casas vieron la invitación a la fiesta de San Valentín o el baile de los enamorados, en city Hall de su barrio, vieron como muchas parejas se aglomeraban a leer y a inscribirse para el concurso de baile, donde todo el barrio y el colegio estaría presente cada cual con su pareja, ellos un poco desconcertados por no tener novia solo sintieron como si un baldado de agua fría les callera por la espalda.
-No se tu pero, tu sabes Joselito que yo no tengo suerte con las mujeres y esta fiesta, me atrae, porque vendrá todo el pueblo, el colegio, y lo peor de todo es que no tenemos a nadie para invitar. –le decía Sebastián a Joselito, mientras Joselito le responde con las mismas palabras.
-Sebastián y que me dices de mi, toda la vida desde pequeños hemos fastidiado a las chicas del parque, las hemos odiado y de repente, nos hemos dado cuenta que son divinas, yo tampoco tengo suerte, o al menos reconozco mi timidez. -la triste situación de estos dos jóvenes llego a tal punto que Joselito no pudo dormir, pensando en Carmencita y Doloritas desnudas haciendo el amor con Lolo, también estaba preocupado porque no tenía pareja para el baile, entonces llamo a su amigo Sebastián el cual le respondió inmediatamente ya que tampoco podía dormir por la situación, estuvieron hablando por horas, hasta que les cogió la madrugada para ir al colegio.
-Sebastián, somos tremendos miedosos, deberíamos ir disfrazados de gallinas al colegio. –Sebastián le pregunta extrañado.
-¿a que te refieres Joselito? ¿a las mujeres o al baile? –Joselito le responde.
-Me refiero a la propuesta de Lolo, para atraer a la mujer de nuestros sueños, imagínate después que lo logremos, podríamos conseguir pareja para el baile. –Sebastián le afirma lo mismo.
-si, tienes razón, le hubiéramos aceptado, de esa manera, hoy mismo nos hubiéramos inscrito para la fiesta de San Valentín, el baile ese de los enamorados. –Con Ironía ríe Joselito.
-Si como no, si antes no tuviéramos que pasar semejante prueba que se requiere para saber el tal secreto, ¿te parece poco? ¿Tener que desenterrar un muerto? –Sebastián se ríe también.
-No creo, más bien lo dice para asustarnos, creo que es parte de la prueba. –Joselito responde.
-¿y si de verdad fuera así? ¿Lo harías? –Sebastián se queda callado y después de un rato le responde.
-Joselito tengo que colgar, ¿ya viste cuanto hemos demorado hablando? Hay que madrugar. –Joselito vuelve a la pregunta.
-No me respondiste, dime. ¿Lo harías? –Sebastián se despide diciendo.
-Ya es tarde, tenemos que levantarnos casi en treinta minutos, no hemos dormido nada, y todo por tus preguntas, no pienses en eso. Chao. –Joselito solo pensaba en lo miedosos que eran al no aceptar el secreto de Lolo por físico y patético miedo a un cementerio, Joselito pensaba solo.
-en los cementerios todos están muertos y los muertos no se pueden mover, mucho menos nos podrían hacer daño, pues solo es un capricho de Lolo, así pues que mas daba hacerlo, siempre y cuando Sebastián estuviera de acuerdo, además pensaba que Lolo no había dicho que si era o no de noche, así que simplemente lo harían en el momento que estuvieran hablando con él y por supuesto seria a plena luz del día. Aunque a mi no me da miedo de la oscuridad, sino de los espacios cerrados, quien debe temer a la oscuridad debe ser Sebastián. - Unos minutos antes de que el despertador sonara para anunciarles un nuevo día lleno de jornadas y aventuras, estos dos intrépidos jóvenes se alistarían a salir de sus habitaciones en sus respectivas casas desde luego y prepararse a sus clases. Una vez en clase, les ha cogido un sueño por el trasnocharse hablando toda la noche por teléfono, de este modo terminaron su jornada escolar, mientras otros de sus compañeros de clase se burlaba de ellos porque habían dormido casi toda la mañana, siendo los hazmerreír del grupo.
-Los Bellos Durmientes! , ¡!Váyanse a dormir donde se trasnocharon!!, Roncancios!! , ¡Estos se duermen hasta cuidando un León! … -Una vez terminadas las clases, estos dos fueron a ver a su amigo Lolo el cual andaba ocupado besando a todas sus compañeritas lindas de su clase, las cuales se escurrían por uno de sus besos.
- por favor, mis princesas, de a una… de a una que para todas hay. No se preocupen que estos labiecitos que me regalo el creador, no se gastan tan rápido, por favor me hacen una fila. –decía Lolo, llevándose un aire de pretencioso. Joselito y Sebastián miraban atentos, mientras sus ojos no podían creer tanta dicha.
-Les informo. –Decía Carmencita mirando a Doloritas con cierta complicidad y agregaba.
-Que Lolo será nuestra pareja para el baile de los enamorados. Así que por favor no nos lo miren mucho porque este chico tiene a sus chicas. – Doloritas miraba a Carmencita mientras pícaramente abrasaba a Lolo como si se lo quisiera comer, mientras Carmencita apartaba a algunas chicas del entorno de Lolo y este solo sonreía.
- No puedo creer lo que veo. – le dice Sebastián a Joselito. Mientras Joselito solo siente un profundo vacio en su pecho de y piensa para si que sus ojos no pueden estar viendo al que antes era un chico tan normal como ellos, que de unos cuantos días para acá se había vuelto tan popular.
- Mira Sebastián, estamos ante un ídolo. –mientras Joselito le dice esto a Sebastián Le pone la mano alrededor de la espalda y mientras palmotea a su amigo en el hombro piensa para si en la propuesta que les había ofrecido Lolo, esa de poder tener a la mujer que ellos quisieran y recordándosela a su amigo Sebastián le vuelve a decir.
-No se tu amigo pero lo que soy yo, me voy hoy mismo para la mina en busca de ese secreto que nos propone Lolo. –Sebastián escuchando esto de Joselito voltea lentamente mientras se sacude del brazo de Joselito y le responde.
-Eres un tonto Joselito, ¿Cómo vas a creer semejante barbaridad? Todo esto es un show. – Sebastián le dice esto a Joselito para persuadirlo, aunque al parecer siente por dentro unos profundos deseos de tener la misma valentía de aceptar el reto que les imponía Lolo. Entre tanta ceremonia de besos y halagos hacia Lolo, este busca a sus amigos con la mirada, los cuales con una sonrisa casi obligada le hacen un saludo. Entre tanto interrumpe el grandulón llamado Manolito, este llega hasta donde esta Lolo y empujándolo le dice.
-Mira cabeza de chorlito, aléjate de mis chicas.-Sin embargo Carmencita y Doloritas le dan un beso a Lolo en la boca para encender más la envidia de Manolito, el cual empujando a todo el mundo intenta salir de allí.
-Esta bien, partida de imbéciles, solo les diré que ustedes se lo buscaron, tengan cuidado que todo se llega a descubrir tarde que temprano. –Mientras Manolo continuaba empujando a la gente y amenazando a las chicas, Estas continúan indiferentes a Manolo y continúan con mayor razón abrasando a Lolo como si fuera de azúcar.- Sebastián y Joselito al ver esto sienten curiosidad en saber quién es el tal Manolito ese, y siguiéndolo con la mirada ven como el empuja a la gente hasta salir del corrillo que le formaron a Lolo a quien lo tienen todas las mujeres en constante adoración. Una vez Lolo se encuentra un poco desocupado, digo un “poco” ya que sus inseparables amigas siguen tan unidas a el más que nunca, ahora para Lolo ellas no son del todo indiferentes ya que al tener la confianza de besarlas y tocarlas, se siente más endiosado que nunca, haciendo de esto una excusa para impresionar a sus amigos quienes al verlo no parecen dar crédito mientras atónitos ven como Lolo les pasa la mano por las caderas y las palmotea.
-Ok Sebastián, ¿quieres ir donde Lolo por el secreto o no? –le dice Joselito mientras con una sonrisa trata de animarlo a decir que si. Pero Sebastián le dice.
-Mira Joselito, déjame llegar a mi casa relajarme un poco, asimilar las cosas y, pues… -Joselito responde instantáneamente.
-si, quizás tu quieras pasarte la vida así, “Asimilando las cosas” pues mientras tu asimilas eso, yo iré por el secreto de Lolo. –Joselito ahora no da crédito a la tranquilidad que asume Sebastián ante semejante hecho tan inverosímil que un simple chico común y corriente, igual o más feo que ellos lo quieran las mujeres de esa manera, si apenas medio lo conocen. Así que Joselito, simplemente hace un gesto de despedida y se va para su casa. -Esa misma tarde Sebastián y Joselito muy decididos van en busca del secreto de Lolo. Una vez en la casa de Lolo, Joselito le pregunta extrañado a Sebastián.
-No entiendo esta mañana no querías venir y ahora… -Sebastián le dice muy seguro.
-Me convenciste, quizás he sido un poco cobarde. –Mientras Lolo sale para recibirlos, Joselito le responde a Sebastián con burla.
-¿Cobarde? Si me pareció ver correr a una gallina… -Joselito sabia que a Sebastián no le gustaba esa palabra, pero sin embargo le salió decírsela desde lo profundo de su corazón para enseñarle a ser mas varoncito, mas decidido para las cosas, No se lo dijo de maldad aunque con cierta burla, se lo dijo como amigo, de todos modos después de tantos años de amistad ya era normal estas confianzas. Lolo alcanza a escuchar algo de la conversación y reservándose la risa que le producía el chiste de Joselito les Saluda.
-Amigos ¿Cómo están? Veo que han venido temprano y los veo muy decididos a conocer el secreto que se oculta en los arcanos de un alma de mujer… Ja Ja. –ríe Lolo como para camuflar la expresión de Sebastián, el mal agrado por un chiste salido de tono al decirle “Gallina”, Pero Lolo sigue riendo, mientras Joselito viendo la cara de Sebastián que se iba enfadando paulatinamente prefiere parar las risas de Lolo y le dice secamente.
-Bueno Lolo, ¿a que nos hiciste venir? ¿a verte reír?. -Sebastián dice para los dos pero dirigiendo su desacuerdo a Joselito.
-Aquí estamos o ¿creerás que le tenemos miedo a…? –Lolo para de reír y muy seriamente les dice.
-ok, vamos al grano. ¿Trajeron lo que les dije? Es decir la pala y la biblia Mesiánica.
-Mira Lolo, para serte franco no porque primero que todo hay muchísimas… -Joselito es interrumpido por Sebastián el cual le dice a Lolo.
- Hay muchas versiones de biblias y no se con certeza cual es la biblia Mesiánica que dices.
-Esta bien, les prestare una pero me la cuidan. Y Bien para empezar tengo mas cosas que deben hacer, cuando estén allá. –les decía Lolo mientras ellos le escuchaban resignados por horas. Mientras a Sebastián solo le preocupa el tiempo pues no quiere que oscurezca demasiado pronto.
-Bueno Sebastián, ya basta de restregarnos en la cara el regalo de tu papa por pasar el año. –le decía Joselito a Sebastián quien no dejaba de mirar su reloj, mientras Lolo guarda con nostalgia en su mente que sin la ayuda de el, Sebastián no estaría luciendo ese reloj, sin embargo le pregunta.
-¿Qué horas son?
-Son las 5:30 PM. –Dice Sebastián. Joselito le pregunta.
- ¿Qué te tiene tan inquieto? –Mientras Lolo le pregunta también.
- ¿acaso le temes a la oscuridad?
-Ok, Ok. NO, lo que pasa es que tengo cosas que hacer, por si no lo saben aun soy un niño, vivo con mis padres y no me mando solo. –Lolo mira a Joselito con gracia, mientras Joselito se ríe y como puede dice.
-¿crees que nosotros no corremos ríesgos también? –Lolo insiste.
-confiésalo, le temes a la oscuridad.
-No, ya les dije que no. Y continua con tus condiciones, si es que hay mas. ¿Saben que? No es miedo, es que ya me esta aburríendo este jueguito. –Lolo le responde a Sebastián.
-Hay mas condiciones, y si estoy haciendo esto, es por generosidad. –Joselito tranquiliza a Lolo y a Sebastián diciendo.
-Miren chicos no nos vamos a acalorar. –y Lolo interrumpe.
-si, y quien se quiera ir a esconderse a las faldas de la mama se puede ir. –Sebastián mira con odio a Lolo y guarda silencio mientras su ira le mueve sus entrañas. Sin embargo Joselito para refrescar el ambiente se coloca de espaldas a Sebastián y de frente a Lolo le dice.
-Mira Lolo, sigue con tus condiciones.
-Dichas condiciones son entrar al cementerio descalzos y con la correa atada en la cabeza, aquella mina tiene muchas higueras salvajes en el suelo y aquellas espinas no serán nada agradables a los pies descalzos, sin embargo es parte de la prueba, otra condición es tomar la mayor cantidad de agua posible por una hora, y dejar una nota de suicidio entre las cobijas envuelto entre las almohadas en forma de que parezca que estuvieran durmiendo. Joselito pregunta.
-¿Cómo así? entonces si estaremos durmiendo quiere decir que… ¿lo haremos a la medía noche?
-así es mis retadores, así es. Lo harán mientras sus padres crean que ustedes duermen y si no regresan obviamente ellos leerán la nota de suicidio y ustedes perderán, porque imagínense el castigo por semejante broma… -de pronto Lolo es interrumpido por Sebastián.
-¿Broma? A mi me parece una satanicada eso de asustar a los padres con una mentira así. –Joselito le dice a Sebastián.
-El fin justifica los medios, además si volvemos antes que amanezca, eso será un verdadero reto, me gusta la idea. –Sebastián da medía vuelta y haciendo un gesto de desaire se despide.
-Pues no cuenten conmigo, adiós. –Sebastián se va sin ni siquiera mirarlos, mientras Lolo y Joselito se quedan en silencio mientras lo ven irse. Tal vez pensando en lo cobarde que era y que había pensado muchísimo tiempo en una excusa tan floja para poder salirse de la situación.
- Me cuesta creerlo. -Decía Lolo mirando a Joselito.
-La verdad no lo vi muy seguro, incluso creo que lo he presionado demasiado, y no es que sea débil, es que… -Interrumpe Lolo
-Es que es una Gallina. Pero no importa, si quieres ir tras el y darle maíz… -Joselito se ríe un poco forzado ya que el chiste ese de la gallina ahora iba dirigido a el, sin embargo le responde con mucha seguridad ya que no tenia nada que temer, ni a la oscuridad, ni a nada, mucho menos a una mina abandonada.
-Por supuesto que no Lolo, Claro que acepto el reto, y me dirás ese misterioso secreto que tanto presumes tener, pero eso si, me lo tienes que decir. –Lolo no le contesta pero abrasándolo lo mira al rostro con una alegría inmensa. Esa misma noche Joselito se dirigía con Lolo a la mina abandonada y Lolo reía calládo sin demostrarle a Joselito la burla, era obvio que Lolo había planeado algo, sin embargo la falta de memoria de Joselito no le permitían encontrar pistas para descubrir que Lolo seguía siendo aquel viejo tramposo. Una vez llegaron a la mina, Lolo le dice.
-entra y busca con esta linterna de petróleo y esta pala el cadáver de mi difunto abuelo. -Joselito esta descalzo con el cinturón en la cabeza y con una lámpara a medía mecha la escasa luz que hace brillar la lámpara amenaza con apagarse rápidamente, el reto consistía en hacer esto lo mas velozmente que pudiera.
-Dame esa pala y esa lámpara y espérame. Traeré hasta aquí el cadáver de tu abuelo. –Lolo no aguanta su risa y casi a punto de delatar el engaño que le había planeado le dice.
-ja ja Mira Joselito… -Lolo por casi poco se delata a si mismo, sin embargo disimula diciendo.
-Solo ten cuidado, hay murciélagos y… -Joselito le interrumpe.
-No me asustas, pues me asustaría mucho mas terminar vistiendo santos toda mi vida, o llegar a viejo sin una mujer que lo atienda a uno a lo bien. Además, es un reto y como varón lo asumo, ¿Qué crees? … Mejor déjame hacer esto rápido, solo mira esta lámpara, pudimos haber traído algo mejor. -Cuando entra, después un rato de estar caminando hacia el centro de la mina, un viento le apaga la lámpara y Joselito se encuentra en medio de la mina completamente a oscuras y piensa en su amigo Sebastián y todos los miedos que le tenia a la oscuridad, de repente aparecen unas luces fosforescentes al final de la mina, estas se mueven y Joselito se trata de acercar con algo de curiosidad pero al descubrir que además se oyen voces se quiere morir del susto, de pronto dichas luces vienen hacia el y ve entre el viento dos sabanas que flotan, cuando Joselito corre hacia la salida de la mina por instinto, ve que una persona grande de pie lo espera, el reflejo de la luz de la luna dibuja una silueta de una persona robusta, sin mirar hacia atrás pero sintiendo que lo persiguen aquellos espectros fantasmagóricos se choca de frente con aquella persona al final de la mina, esta persona lo empuja y lo tumba al suelo, alzando sus brazos muestra un hacha la cual pretende arrojársela a Joselito.
-ay por favor no me mate, se lo suplico. – grita con pánico el indefenso Joselito, después de un rato se pone a llorar. Cerrando los ojos ante el pánico Joselito se tiende en el suelo y no para de llorar mientras con voz temblorosa clama por su vida.
-No me mate, no… - entre tanto se escuchan unas risas y cuando abre los ojos descubre que Carmenza, y Doloritas.
-Joselito, eses muy gracioso. –Dice Doloritas mientras continua moviendo sus sabana y sus luces fosforescentes.
-Mira hasta parece que se hizo pipi del susto, ja, ja… -Carmencita comenta esto señalando los pantalones de Joselito quien al parecer no contuvo su miedo. Entre tanto Joselito recupera un poco el aliento y como puede dice.
-y eso que tengo estos pies todos pinchados por las púas de las higueras, además de la carrera que hice hasta acá. –Entre tanto están hablando el ser robusto que esta parado al frente de ellos, hace un sonido sobrenatural mientras Carmencita dice.
-Que buena actuación la tuya Lolo, ya baja esa hacha… pero… -entre tanto Joselito pregunta.
-¿eres tu Lolo? –El hombre grande descubre su otro brazo mientras con este arroja la cabeza de una persona a los pies de Joselito quien aun continua mirando con incredulidad, las gotas de sangre caen sobre las sabanas blancas de las chicas y con la tenue pero brillante luz de la lula descubren que es una cabeza humana, mientras Joselito se agacha para reconocerla descubren todos al mirarla que se trata de la cabeza de Lolo. El extraño hombre se va caminando despacio mientras ríe así se va internando en la mina abandonada.
-No, esto es más que una broma. –dice indignado Joselito.
- Y ¿ahora que le vamos a decir a sus padres? –Dice Carmencita mientras Doloritas responde.
-mira ahí se aproxima un carro. –Se trataba de la policía junto con los padres de Sebastián, Joselito y de Lolo. Joselito y las chicas empiezan a gritar como locos. Los padres de Joselito descubrieron la nota suicida y fueron hasta la casa de Sebastián, allí hablaron con los padres de el y aunque tocaron en su habitación varias veces este no respondió, entonces uniendo pistas encontraron en uno de sus cuadernos una lista que hablaba de la biblia mesiánica y de la mina abandonada. Y así fue como luego de un rato reflexionaron y acordaron en llamar a la Policía para saber si se trataba de algún chantaje. Así encontraron a las chicas y Joselito escondidos tiritando de miedo mientras miraban la cabeza de Lolo, esta escena fue bien terrorífica ya que sus padres como sus amigos no controlaban sus gritos y casi con un terror de locura se ahogaban en la histeria.
A la mañana siguiente el inspector del pueblo vino a hacer el levantamiento del cadáver y a buscar evidencias del asesino, buscaron por toda la mina pero no encontraron nada, esa misma tarde todo el colegio se reuniría en el cementerio y con una simbólica ceremonia le harían una despedida a su gran compañero Lolo. Sebastián, Joselito y las chicas estaban juntos y no dejaban de llorar y de lamentar la perdida de Lolo, los padres de lolo muy tristes no dejaban de maldecir a quien había matado a su hijo y juraron no descansar hasta encontrar al asesino sin embargo a los dos días se fueron del pueblo por posibles amenazas, una recomendación del alguacil.
-Ya paso una semana después de ese terrorífico día, ¿que opinas Joselito si vamos a llevarle flores a la tumba de Lolo? –Sebastián mira con tristeza a Joselito, como sintiendo su dolor. Y Joselito le pregunta.
-¿Qué hacías Sebastián aquella noche que murió Lolo? –Sebastián sonríe con tristeza y le responde.
-lo que haría cualquier gallina, Joselito, escondido en mi cuarto. Pero no has respondido mi pregunta, es decir, si le llevamos flores quizás nos alivianemos del evento tan espantoso y…
-¿Cómo sabes si fue o no espantoso? Tú no estuviste ahí. –dice Joselito con cierta rabia.
-ok, Joselito, como quieras, nos vemos cuando se te pase la preguntadera. –mientras Sebastián dice esto da medía vuelta para irse, pero Joselito le pone una mano en el hombro y cuando Sebastián voltea para verlo, Joselito le da un abraso y le dice.
-Perdóname, amigo, es que… estoy muy confundido. –Esa misma tarde fueron al cementerio para colocarle flores a la tumba de Lolo y la sorpresa fue para ellos.
-¿Qué hacen aquí chicos? –Pregunta Carmencita quien también se encuentra con su inseparable amiga Doloritas.
-Chicas pero que sorpresa, pues aquí pasábamos a dejarle unas flores a Lolo, veo que ustedes también, ¿cierto?. –Joselito termina una breve oración por el alma de su difunto amigo, entre tanto Sebastián se adelanta y tomando de la mano a Doloritas esta les responde.
-Si, claro que si, y lo haremos siempre que tengamos oportunidad, el para nosotros… -interrumpe Carmencita mientras se acerca un poco a Joselito quien esta un poco tímido.
-el para nosotros estará siempre vivo, en el brillo del los ojos de sus amigos. Muchachos, saben del baile del amor que tendremos aquí en el pueblo, ¿verdad?
-¿quieren ir con nosotros?. – al fin habla Joselito desprendiéndose de la tristeza que le embargaba por la perdida de Lolo y afianzándose aun mas en la mano de Carmencita quien con su mirada parecía redimirlo de sus nostalgias.
-Encantadas. –Responden en una voz las dos hermosas colegialas. Sebastián y Joselito se miran con jubilo y con una sonrisa de triunfo parecen celebrar su victoria. Al fin habían logrado lo tan esperado para ellos. El Famoso Baile.
Una vez en el baile, conocieron mucha gente nueva, gente que solo iba al pueblo a celebrar la fiesta del amor y que luego al otro día se retornaban a sus haciendas o a sus pueblos, aquella noche bailaron como nunca, y mientras se divertían no dejaban de pensar en su amigo Lolo, a quien se les aparecía entre las parejas, o en el baile, también el ponche que tomaban y hasta en las copas de cristal, todo les recordaba a Lolo en especial a Joselito a quien mas le marco en su memoria la cabeza desprendida de Lolo por aquel maniático. Carmencita nada indiferente ante el comportamiento de Joselito le pregunta.
-¿Qué te pasa, parece que estuvieras viendo fantasmas?. –Joselito responde irónicamente con la verdad.
-Si, los veo, y todo esto me recuerda a Lolo. –Joselito sale corriendo a la puerta y allí conteniendo sus lagrimas, coloca sus manos en su rostro, mientras los demás, al verlo parecen entender su dolor.
-No puedes pasarte toda la fiesta así, Joselito, tu no tuviste la culpa. –le decía Carmencita mientras acariciaba su cabeza y trataba de quitarle sus manos de su rostro. Luego el la mira a ella y le dice.
-Era mi amigo. –Carmencita lo besa en la frente y le dice.
-No te culpes y no nos castigues por lo ocurrido, míranos a Doloritas y a mi, no estamos llorando a toda hora, hay tiempo para todo Joselito, ven, volvamos a la fiesta. –Entre tanto el rector del colegio al ver la preocupación de Joselito le dice.
-Mira Joselito, mira a tu amigo Sebastián, el también esta triste, pero se esta divirtiendo. Hare algo por Lolo en este momento, bajare la música y propondré un minuto de silencio, así su alma mitigara un poco el dolor que sientes y te dejara descansar más, ¿te parece? –Carmencita quien abrasa al desconsolado Joselito quien no para de llorar, responde por el.
-Gracias señor. –Luego del minuto de silencio, Joselito quien espera en unas de las sillas a que Carmencita le traiga un trago fuerte de Ron para que pase su tormento moral, el rector se pone a hacer conversación con el y le cuenta que lo extraño del asunto es que Manolito no había vuelto, ni a clases, ni a los entrenamientos por las tardes. Entre tanto Sebastián se acerca para saludar a su amigo Joselito quien estuvo ausente del baile por estar sumido en el dolor, el rector le pregunta a Sebastián si sabe algo de Manolo, pero Sebastián asienta con la cabeza que no. Luego el rector se va. Carmencita y Doloritas vienen juntas con las copas a rebosar de Ron y repartiéndolas a Joselito y a Sebastián, los cuatro juntos brindan por su amistad.
-Brindo por mis nuevos amigos, para que seamos como uno siempre. –Decía Carmencita mientras entusiasmada abrasaba a Joselito y le pedía un beso con la mirada. Al mismo tiempo Doloritas hacia lo propio con Sebastián, mientras Sebastián brindaba.
-y yo brindo por Lolo, para que dios lo guarde en su infinita gloria.
-Yo quiero brindar por los momentos que pasamos junto a Lolo, por mi infancia, jamás hubiéramos encontrado a un amigo tan especial. Se me ha ido un hermano, pero sobretodo hemos perdido a un ser excepcional, que nos hacia reír, con sus mentiras inofensivas… -Joselito es interrumpido por Sebastián.
-¿inofensivas?, Bueno, creo que a Joselito se le subieron los tragos a la cabeza muy rápido. Yo opino que… -Carmencita interrumpe.
-ok, chicos, no vamos a aguar la fiesta. Esta bien, se fue Lolo, déjemelo ir, ¿ok?
-¿y quien lo mato? –pregunta inocentemente Doloritas, a lo que Sebastián intenta decir algo pero Joselito le interrumpe.
-Cualquiera de nosotros, de los que están aquí. –Sebastián interrumpe después.
-¿si? ¿Crees que el asesino esta aquí en esta fiesta junto a nosotros?
-Me refiero que puede ser cualquiera… -Sebastián le pregunta.
-¿y Manolo? – Las chicas continúan con el jugueteo de seducción pero estos dos aun no encontraban nexos con la muerte de Lolo, pero Carmencita les conto como Manolo se sintió muy ofendido por las atenciones de ellas por Lolo, ya que Manolo era el que mas liderazgo mostraba en el grupo y que debido a que Lolo se volvió mas popular fue Lolo quien se gano la confianza del grupo y eso hacia que Manolo sintiera envidia y que quizás esta envidia fue la que desencadeno en Manolo una ira mala a tal punto como para acabar con la vida de lolo; Joselito y Sebastián hicieron memoria y se acordaron de la vez que Manolo se le acerco para reclamarle lo de sus chicas y que quizás por esta razón y su envidia fue la que acabo con la vida de lolo. Todo el baile estuvieron hablando y tomando ponche, se hicieron grandes amigos y con el paso del tiempo llegaron a cerrar lazos más profundos.

Paso un año después del asunto y Sebastián solo tenia ojos para Lolita y Joselito para Carmencita, todo transcurría como en un sueño de hadas y solo faltaban seis meses para salir a vacaciones, pues habían decidido para celebrar ir a acampar a un campamento que quedaba a dos horas del lugar en el cual había un frondoso bosque y agua que brotaba natural de la montaña formando un hermoso lago donde habían botes y se podía pescar, las cabañas eran de techo de paja y paredes de bambú, Todo parecía estar transcurriendo bien, pero una noche…
-¿Qué te pareció la película mi amor? –preguntaba Doloritas a su novio Sebastián, el cual muy entusiasmado por las escenas de la película (la cual era de terror) le responde.
-Si, me gusto la parte de que, que… ese hombre, parece que lleva algo en la mano, pero no lo veo bien, ¿será un… hacha? -Sebastián estaba viendo la silueta de un señor con algo en la mano parecido a un hacha.
-¿de que hablas, nadie en la película llevaba un hacha? Creo que…
-No, míralo ahí al frente, se quedo un rato mirándonos y luego… -Doloritas le interrumpe.
-Mira tesoro, no veo nada mas que tu dedo señalando al vacio, mejor señala esto, que tengo aquí… -le dice Doloritas, pero Sebastián insiste.
-Lo vi, y no estoy loco. –Luego Sebastián accede a las proposiciones de Doloritas y comienza a besarla, luego aquel hombre con algo en la mano tomaba un taxi frente al teatro de la ciudad frente a ellos, y Sebastián al volverlo a ver trata de decirle algo a Doloritas pero esta caya su boca besándole los labios. Luego la preocupación o mejor dicho la corazonada de ese alguien misterioso que había visto se parecía mucho a las versiones que le había dado Joselito, era un hombre alto y espaldón, pero lo que Joselito le decía era solo una sombra, como si no se tratara de alguien real, sin embargo la policía había hallado huellas en la mina, pisadas de un hombre corpulento y gotas de sangre que se perdían misteriosamente detrás de un montón de tierra, la cual estuvieron escarbando tanto hasta que habían encontrado los restos del abuelito de Lolo, Idelfonso. Todo seguía un trayecto misterioso, Sebastián vio innecesario llamar a Joselito para preguntarle detalles de aquel entonces pues por simples sospechas no iba a abrir las heridas que apenas comenzaban a cerrar.
A la mañana siguiente Manolo se presenta después de tanto tiempo en el colegio y desde entonces hasta la salida a vacaciones llega a ganarse nuevamente su liderazgo y popularidad que lo había caracterizado; sin embargo eran Joselito y Sebastián blancos de burla y peleas por parte de Manolo, así pasaron aquellos duros seis meses, que si no hubiera sido por el amor entrañable de sus novias, no hubieran resistido tanta humillación, El rector del colegio había decidido reanudar los juegos inter clases antes que terminara el año, para al menos dejar un ganador a fines de ese año, pero ni Joselito ni Sebastián quisieron participar, sin embargo Manolito si, convirtiéndose en el Libero del Colegio, de este modo ya era casi imposible que Sebastián y Joselito recuperaran algo de respeto por parte de Manolo, quien encontraba cualquier motivo para insultarlos diciéndoles “gallinas” Esto enfermo bastante la paciencia de Joselito.
-Tenemos que hacer algo, no podemos seguir así, ¿no crees que ya es suficiente?
-¿suficiente que? -Preguntaba Sebastián.
-pues de que nos llamen “Gallinas”…
-Muy fácil Joselito, pues no los escuches.
-Pero Sebastián, no puedo creer que estés así de tranquilo, aceptemos jugar, vamos a jugar.
-Solo quiere presionarnos para que entremos. –Joselito le contesta inmediatamente mientras le confirma su desacuerdo.
-No Sebastián, es la verdad, tenemos que jugar, no es presión, es la imagen que dejamos si no accedemos, después de que entremos se acaba todo esto.
-Luego de que entremos le seremos mas fácil a Manolo para que nos destruya, el quiere presionarnos a entrar para luego humillarnos mas. - Sus novias que sin querer estaban escuchando la conversación les propusieron que se prepararan físicamente y que aprendieran a jugar futbol bien para demostrarle a Manolo quienes realmente eran.
-No tienen porque sentir miedo, y no se los decimos porque creemos que tienen miedo de hacer el ridículo, sino porque están con nosotras. –Decía Carmencita, mientras abrasaba a su amiga Doloritas.
-a si, ¿Qué pueden hacer por nosotros? –preguntaba Sebastián.
-pues que van a hacer, Sebastián, por dios! son nuestras novias las mejores porristas del colegio, son nuestro orgullo, quienes nos motivaran con su belleza. Tenemos que probarles a todos de que somos hechos. -Sin embargo Sebastián quería dejar claro que el prefería dejar las cosas quietas por ese lado quedando con una imagen clásica de un chico educado que no le tenia que probar a nadie quien era, a Joselito no le gusto la idea pero no se atrevía a nada hasta no convencer realmente a Sebastián, ya que eran entrañables amigos, pero a su vez también sentía algo de vergüenza que Sebastián pensara de una forma tan cobarde y que lo arrastrara a el también a esos extremos, también le molestaba la idea de que fueran precisamente unas mujeres quienes les enseñaran lo que debe hacer un hombre cuando es retado a un simple juego de futbol, bueno en realidad no se trataba de algo “simple” pero al menos podrían practicar y luchar en el intento, es decir no quedar ridículamente como unas “Gallinas”. Toda esa semana Joselito trataba de tocar el tema del futbol pero Sebastián le cambiaba el tema, El profesor de Educación Física había hecho la convocatoria por segunda vez.
-Ok, clase, faltan solo dos chicos para que el equipo de futbol quede completo, no necesariamente tienen que ser los mejores, les recuerdo que solo necesito que jueguen. –Manolo interrumpe diciendo en voz alta.
-Solo hace falta dos gallinas para el sancocho. –Toda la clase comienza a reír, mientras Manolo señala a Joselito y a Sebastián. Joselito se levanto del asiento valientemente y mirando a Sebastián con decisión dijo en voz alta.
-ok, nosotros entramos al equipo. -Sebastián se levanto del asiento para declarar su oposición, pero Lolita ya lo estaba abrasando y felicitando al igual que Carmencita, su amigo Joselito se le acerco y con un abraso disimulado le dijo rapidito al oído.
-Confía en mi, se lo que estoy haciendo, es por el bien de los dos. -Esto lo hacía por salvo guardar la honra, además del coraje que le daba por quedarse con los brazos cruzados mientras Manolo pisoteaba su dignidad; Sebastián no estuvo muy de acuerdo al principio pero después de un rato se empezó a hacer a la idea y a celebrar con los amigos. Manolo se les acerco en medio de su jubilo y les dijo que se alejaran de esas mujeres, pero ellas antes se pegaban mas de ellos y ellos aprovecharon para besarlas en frente del salón de clases, de este modo Manolo no tuvo mas remedio que retirarse.
Comenzando las practicas el profesor de educación física vio que ellos estaban en muy malas condiciones, así que les recomendó ese fin de semana, correr por varias horas, hacer barras, lagartijas, ejercicio en general; así que las muchachas se ofrecieron muy cordialmente a prepararlos físicamente, solo tenían un fin de semana para dicho entrenamiento ya que el lunes comenzarían con el entrenamiento oficial y tenían que ponerse a nivel de los otros jugadores lo mas pronto posible, entonces Carmencita y Lolita todo ese viernes por la tarde comenzaron con ellos a trotar por el parque donde junto con Lolo en otros tiempos se dedicaban tardes enteras a sacar y molestar a las niñas para poder ser los amos del parque, así que esta vez tendrán que ganarse ese titulo una vez mas pero con esfuerzo y mucho ejercicio, luego intensificarían el ritmo hasta correr a gran velocidad, Sebastián fue el primero que por detalles físicos de sobre peso callo primero sin energía al suelo, luego Joselito que era bastante pálido y flaco fue el segundo en caer, entonces sus novias que les habían llevado unos refrigerios muy ricos, les dieron unas bebidas energéticas preparadas por ellas, cuyo secreto se lo guardarían hasta después de los torneos, luego de tomar aquello estos dos jóvenes estaban hechos unos tigres, y con una energía increíble entrenaron de tal modo que nadie les ganaría, de este modo siguieron por otros ejercicios en general, como agilidad con el balón, velocidad y tácticas, estaban sobre entrenados para ese día Lunes.
-Bueno chicos, veo que están verdaderamente cansados, y eso es bueno. –Decía Doloritas, mientras Carmencita les recomendaba.
-Es mejor que no muestren sus habilidades hasta que no se hayan ganado la confianza del equipo, sobretodo del profesor quien fue el que descubrió que ustedes dos eran unos enclenques, así que no muestren su progreso tan rápido. –Joselito toma aire para hablar y dice.
-Ya se, haremos las cosas como en progreso, para que no parezca que ya somos unos tesos es el deporte, sino que demostraremos que no somos buenos aun. –Sebastián respondió a esto.
-me siento diferente y si me siento así los demás notaran el cambio. -Carmencita y Lolita les hicieron prometer que no mostrarían desde el principio su avance, sino paulatinamente hasta que se habituaran a verlos así de alentados.
Al Lunes siguiente cuando comenzó el entrenamiento Oficial, estos dos jóvenes empezaron con payasadas como auto goles, pases a los contrarios y dejarse golpear del balón, Manolito no podía de la risa y entre que lo hacían a propósito de cuando en vez aprovecharían para coger a Manolo a Balonazos mientras hacia de arquero, también le clavaban unos goles a corta distancia que dejaban al entrenador completamente absorto y confundido, ya que el como muchos se preguntarían el porqué unos primíparos como aquellos que no habían tocado un balón jamás, de un momento a otro hicieran unas jugadas tan lindas. Así que muy paulatinamente estos dos fueron ganando la admiración primero de su grupo y después de todo el colegio. Cuando ya habían descalificado algunos grupos menores, Manolo no tuvo mas opción que estrechar sus manos una vez que jugaron tan supremamente bien que el colegio entero los ovaciono gritando consignas, esto lo hizo Manolo para que el colegio no creyera que el no estaba con ellos, algo así como dirían los políticos, por “protocolo”.
Sin embargo pasadas las octavas de final, Manolo quiso saludarlos muy efusivamente ya que curiosamente se había ganado su confianza, Manolo los había dejado de molestar y de burlarse de ellos, y en vez de eso, había decidido acercarse a ellos para hablar, sin embargo Joselito quien era el mas desconfiado se negó a quedarse escuchándolo un día que Sebastián y el hablaban de cosas que habían sucedido durante ese año, Joselito le pareció que Sebastián y Manolo estaban hablando cosas muy frívolas y se retiro con su novia Carmencita, sin embargo ella le dijo que Manolo estaba muy cambiado con su actitud, que el no era una persona mala como muchos creían, solo era algo diferente porque había tenido una infancia bastante dura y sabia ganarse las cosas a pulso, porque el no había tenido la ventaja que Sebastián y Joselito habían tenido con esas pociones mágicas o Bebidas energéticas como ellas le decían, Joselito mirando a Carmencita le pregunto.
-¿de esta bebida energética, tomo Lolo? –Carmencita lo miro con desconsuelo, pues quizás esa pregunta albergaba algo de desconfianza hacia ellas, sin embargo ella, no tenia mas opción que responderle sinceramente e inmediatamente le dijo.
-¿Cómo crees?, para tu información, Lolo no fue un súper jugador, simplemente jugaba bien, lo que para el era natural, para ustedes parecía no serlo, es por eso que el no necesito nunca de esas bebidas energéticas. –Joselito, le pregunto con duda nuevamente.
-¿estas segura? –Carmencita mira a Joselito y sin debatir con el en lo mismo, le respondió con naturalidad.
-Bueno quizás alguna vez le pusimos un poco en algún jugo, o algo así, pero nunca le dimos a beber oficialmente eso como bebida energética. ¿Satisfecha tu curiosidad?
-pero si no la necesitaba ¿para que? –insistía Joselito.
- algunas veces le puse un poco en el refresco que le llevaba para que corriera mas y fuera “el chacho” del colegio, como todos saben no era el mejor jugador, pero si llego a igualar físicamente a Manolo y esto fue lo que mas le molestaba a Manolo. –Joselito pregunta.
-no entiendo la actitud de Manolo, ¿Por qué el es así?
- porque el solo siente simpatía por quienes lo superan, porque según el de esos es de los que el aprende a ser mejor. –Carmencita un poco obstinada por las preguntas de Joselito se despide y cada uno se va para su casa, luego Joselito fue por la noche a visitar a Sebastián a la casa.
-Mira Joselito, a veces no entiendo ciertas actitudes tuyas.
-¿Cómo así? –Sebastián arquea los ojos mientras le responde.
-es que no entiendo porque no participaste de la conversación de Manolito y yo, ¿sabes? El es una persona bastante social, y conoce muchísimas cosas, habla de video juegos, etc. –Sebastián sabia que Joselito era un fanático a los video juegos, sin embargo a Joselito esto parecía no hacerle ni frio ni calor y le responde.
-y ¿Qué?, puede gustarle los video juegos, pero eso no le quita que siga siendo misterioso, ¿te acuerdas como era al principio?
-Bueno eso fue porque no nos conocía. –Joselito agacha la cabeza y con trémula voz le responde.
-y ¿nos conocemos nosotros?, mira Sebastián, no somos los súper deportistas realmente, la gente esta engañada por una imagen falsa de nosotros. –Sebastián mira con extrañeza a Joselito.
-¿a que te refieres?
-a que no seriamos nadie si no fuera por esas bebidas energéticas. –Sebastián se hecha a reír y le dice.
-Nunca habías tomado una, ¿verdad?, mira todo el mundo la toma.
-¿ahora me quieres hacer pensar que nuestra fuerza sobre natural es completamente normal?, estas loco, Sebastián y estas mas loco al querer ver a Manolito…-aunque Sebastián le contaba que Manolo era una persona bastante normal, Joselito le conto que Manolo tenia una vida bastante misteriosa, sin embargo Sebastián le pregunto que por que, pero Joselito recordó que Carmencita sabia mas de el, incluso que el mismo; Joselito ya estaba hasta confundido de Carmencita y le conto todas estas inquietudes a Sebastián , cuando Sebastián escuchaba esto simplemente no opinaba, guardaba un silencio casi obligado para no perder detalles, los cuales tejía en su interior con los mismos argumentos que acercaban a Manolo cada vez mas a ser el asesino de su amigo Lolo, Sebastián saco a relucir aquel secreto que tanto había guardado en su corazón atormentándolo, aquel secreto de que cuando el estaba saliendo de cine aquella noche, vio la silueta de un hombre con los mismos detalles que le había contado Joselito a la policía, y le pareció que llevaba algo en la mano derecha, algo así como un hacha, Joselito al escuchar esto pensó en Manolo, pues este hombre es fornido y espaldón y tiene el peso y la altura que eran los detalles que faltaba unir en su cabeza, y pensó.
-“¿Cómo no había pensado en Manolo antes?”. -esto tendría que contárselo a Carmencita, sin embargo le reitero a Sebastián que sospechaba de las chicas.
-Mira Sebastián, todo esto me da mala espina, incluso sospecho hasta de las chicas, es que saben cosas de Manolo, son una caja de sorpresas, además estaban ahí. –Sebastián le pone su mano en el hombro de Joselito y mirando hacia abajo, con mucha confidencia le dice.
-¿y no te atreverías a pensar en Manolo? –Joselito hace una pausa y pregunta.
-¿Por qué?
-Pues el día que yo Salí del cine, ¿te acuerdas? Bien no se te hace extraño que esa misma noche que Salí del cine con Carmencita, vi a un hombre con las mismas características que tu le diste a la policía y que tu me contaste después. Y al otro día vimos nuevamente después de casi seis meses a Manolo.
-No recuerdo haberte hablado de las características de ningún hombre.
-Pues el de la mina, el que te arrojo a los pies la cabeza de Lolo… -Joselito no recordaba haberle dicho nada de esto a Sebastián pero sin embargo le pareció algo sin importancia y decidió no cuestionar a su amigo por algo de lo que el había dicho o no, pues su declaración a la policía junto con las chicas fue de una simple sombra, y en ningún momento había dicho si era o no corpulento o espaldón, ni que se tratara de algún hombre.
-Mira, Sebastián, mejor cambiemos el tema, ya se que mi imaginación va mas allá, y es por eso que es mejor parar aquí. Mira que te parece que pronto vamos a tener otro baile.
-Joselito, no vas a dañar la relación con ellas, preguntando bobadas, mira que si ellas se llegan a enterar de… -Joselito se ríe y dice.
-bobo, si solo estamos especulando, ¿me crees así de estúpido? Yo confío en ellas, no dejando de pensar en Lolo y lo ocurrido hay algo de desconfianza, pero quizás se guarden algunas cosas por el bien de los dos, no todo es malo, a veces el misterio es bueno, ¿cierto?
-No se. lo que si se, es que quiero estar en ese baile y gozar lo que no se ha imaginado nunca, pues mira que ese baile será mejor que el del año pasado y no me lo perderé por nada en el mundo.- Joselito estaba muy animado y después que termino la visita, eran como las diez de la noche, se fue para su casa que estaba a dos cuadras de la casa de Sebastián , cuando estaba ya volteando la segunda cuadra, escucho unos pasos de alguna persona que venia detrás de el, Joselito voltio a mirar, pero no vio a nadie, así que no le presto atención y siguió caminando, luego paso por unos tubos de aluminio que estaban apilados para una casa que estaba en reparación, entonces casi a pocos metros de su casa, escucho a alguien tropezar con esos tubos de aluminio que hizo un ruido increíble, Joselito se asusto mas y corrió hasta la casa, entre tanto tocaba la puerta pero no le abrían, mientras sentía que alguien se acercaba, de pronto vio la silueta de un hombre grande acercarse a el, tenia un hacha en la mano, cuando este personaje estaba a pocos metros de el, la Mamá de Joselito le abrió la puerta y Joselito entro como un rayo e instantáneamente cerro la puerta con fuerza tras de el, una vez a salvo, mientras la Mamá, mirándolo extrañado le preguntaba que el porque de su actitud, a lo que Joselito le conto que cuando salió de la casa de Sebastián , alguien lo empezó a seguir, que le parece haber visto al asesino de su amigo Lolo y que estaba ahí afuera, El papá de Joselito decidió llamar a la Policía, los cuales comenzaron a levantar nuevamente la investigación por todo el vecindario toda la noche.
Al día siguiente su amigo Sebastián lo enfrento.
-¿Qué te pasa? ¿Acaso te volviste loco? –Joselito confundido le pregunta.
-no entiendo, ¿Qué me pasa de que?
-¿acaso intentas sabotear el baile?
-¿Cómo se te ocurre? Claro que no. –Pero Sebastián no le cree y le dice.
-si no hay baile, la pagaras muy caro. –Joselito se queda callado y después de un rato le dice.
-Me estaba persiguiendo alguien, creo que fue la misma persona que viste aquella vez que saliste de cine con Doloritas.
-No inventes, eso lo dices porque yo te conté eso. –Joselito muy asustado le dice.
-Me quería matar.-Sebastián le dice que deje la paranoia, que eso son imaginaciones, que se arrepiente de haberle contado lo del hombre ese del hacha porque con esa imaginación tan poderosa lo reviviría nuevamente. Sebastián le pide que por favor se concentre en cosas más productivas y que no se ponga a decir lo que no es. Dicho esto Sebastián intenta caminar con dificultad, pues según el se acababa de aporrear jugando con el balón, Joselito abrasando a su novia, tomo lugar en su pupitre y concentrándose en las clases intento disipar las imágenes de la noche anterior que le trajeron tanto pánico como la primera vez que lo vio. Carmencita no lo podía creer, la primera vez que Sebastián le alza la voz a Joselito y este asustado y con toda razón prefiere quedarse callado. Lolita viendo la actitud de Sebastián intenta suavizarlo.
-Lo único que quiero después de tan agotador año y las eventualidades siniestras ocurridas a lo cual se pego Joselito con sus lloriqueos para sabotear junto con el rector el baile del año pasado, no, no, Doloritas, eso no volverá a pasar. Solo quizás por encima de mi cadáver. Yo quiero que este baile sea el mejor. Quiero estar bailando tranquilo. sin minutos de silencio ni lagrimitas….
-No seas injusto, y reconoce que estas enloquecido con ese famoso baile, y por tu imprudencia ofendiste a tu amigo Joselito quien mas necesita de ti en estos momentos, ¿no ves que trataron de matarlo anoche.? -pero Sebastián insiste que lo único que quiere es poder bailar tranquilo para el día del baile, y terminar el torneo de futbol esa semana como dios manda, como ganadores.
-Buen partido Joselito. hey, voy con Doloritas a la heladería del parque. ¿Quieres venir con nosotros? Llámate a Carmencita y vamos los cuatro. –Inútilmente Sebastián trata de invitarle a salir pero Joselito lo ignora. Entre tanto Carmencita le toca el hombro y le da un beso y le pregunta.
-¿quieres ir con nosotros a la heladería? Me imagino que estas cansado y quieres refrescarte un poco con nosotros, además… -Joselito le responde.
-No esta vez. Iré a mi casa, estoy cansado. Pero llámame mas tarde para ver si estoy de ánimo. Chao mi amor. -Joselito se fue directo para la casa aquella vez luego del último entrenamiento para la final que tendría lugar el próximo día por la tarde después de clases y esa misma noche seria el After party de los ganadores con las chicas porristas y algunos de los colegios competidores, de este modo se despidió de Carmencita con un beso muy romántico, así entro a su casa y cerrando las cortinas, las ventanas y hasta el balcón, se escondió en su cuarto, cuando su Mamá vio la actitud de el, entrando al cuarto de él, ella se asombra al no verlo.
-Joselito. ¿Dónde estas?.
-aquí. Por favor no grites. -entonces Joselito sale debajo de la cama y le pide a la Mamá que cierre la puerta que de pronto se aparece aquel hombre que lo persiguió la noche anterior.
-mira Joselito. La policía estuvo toda la mañana aquí. Hubo reunión de vecinos e hicieron muchísimas preguntas. ¿Sabes que la familia de Lolo se fue hace un año? Pues bien, a ellos los mandaron a investigar también. ¿Te imaginas? Y ahora entro aquí y…
-Esta bien, mama. Si tu no me crees es tu problema.
-No es que crea o no. Mira tu actitud. Acaso crees que ese hombre…
-No es un hombre. –replica Joselito, pero la mama lo mira con extrañeza y le pregunta.
-¿entonces que es? ¿Un murciélago?. Joselito por dios…. Estas paranoico.
-No estoy paranoico, lo que vi aquella noche en la Mina no era un hombre, es una sombra grande. ¿Me entiendes? No le vi la cara. Lo que mas me impresiono fue el hacha y que luego me arrojo la cabeza… -Joselito no puede continuar pues la tristeza derrite sus palabras, luego con gran esfuerzo termina la oración.
-La cabeza de mi amigo Lolo, desprendida de su cuerpo. –Mira hijo, siento mucho hacerte esta observación, quizás este siendo injusta contigo. Pues no me imagino una situación así, me cuesta creerlo, si apenas recuerdo cuando ustedes dos jugaban desde pequeños. Mi corazón se desmorono aquella noche. –ella lo abrasa y lo besa fuertemente mientras el dice.
-mami, estoy asustado.
-Yo también hijo, Yo también… Lolo jugaba tanto y se mantenía tanto contigo que fue tan horrible para mi aquello que sentí desde mi pecho un gran dolor. Me cuesta creerlo aun. Fue como haber perdido un hijo. Pobre familia. –Joselito es consentido por las manos amorosas de su madre, y mientras ella le habla de lo que significaba para ella la perdida de su amigo y todo lo que lo estimaba, Joselito cae rendido en su regazo ella al verlo dormido, lo termina de recostar en la cama y quitándole los guayos y las medías empantanadas y sucias por aquel arduo entrenamiento, lo deja en la comodidad de su cuarto y muy suavemente le da un beso en la frente y silenciosamente cierra la puerta para que nada lo interrumpa. Ella es una buena madre y lo quiere tanto así como para leerle sus pensamientos. Ya que Lolita fue mas tarde a hacerle la visita a Joselito pero la mama le dijo que no quería recibir a nadie.
Entonces “Lolita” como tiernamente le decía Carmencita a su amiga volvió a la heladería donde estaban sus amigos y le explico la situación de su amigo Joselito que no quería salir, a lo que Sebastián un poco culpable por su actitud aquella mañana decidió ir con las chicas a casa de Joselito, así de esta manera le tendría que recibir a todos; pensó Sebastián esto, que una vez allá, la mama no les dirá lo mismo, porque Joselito no es rencoroso con sus amigos. Las chicas lo llamaron y el medio asomándose por la ventana con bastante temor no quiso recibirlos.
-¿Qué pasa? ¿Cuál es el escándalo?
-Vamos Joselito baja o déjanos entrar. –decía Carmencita mientras los otros dos se escondían por si era que tenia algo en contra de Sebastián.
-No quiero, estoy bastante cansado, además… -Sale al frente Sebastián.
-Si lo dices por mi, ya te pedí perdón, es decir te dije que saliéramos, ¿verdad? –Joselito intenta sonreír, ocultando su temor, ya que a Sebastián como a sus amigas los cree sospechosos de la muerte de lolo, claro, indirectamente.
-No tengo nada en contra de ti, Amigo. Todo bien!!, Pero entiéndanme.
-No seas mentiroso Sebastián. –Decía Lolita. –Tú no le pediste perdón.
-Ok, Joselito. ¿Me perdonas? –Entre tanto sale la mama de Joselito y les dice.
-No ven que esta deprimido, lo deje durmiendo. ¿Por qué no regresan después?
-Perdón señora, en realidad no sabia que estaba descansando. Mi intención es que este tranquilo, por eso vine hasta acá para pedirle excusas, creo que exagere mi actitud esta mañana.
-Lo trataste mal Sebastián. –le responde Doloritas, entonces la mama mira a la ventana de Joselito y Joselito la cierra bruscamente.
-Yo hablare con el, esperen aquí. –la mama sube y toca la puerta de Joselito, pero este se niega a abrir, ahora Joselito actúa como si todos ellos fueran sospechosos de la muerte de Lolo. Ellos se retiraron no antes Sebastián le pidió excusas otra vez por el comportamiento de El ese día, las chicas le pidieron varias veces y con mucha insistencia que querían verlo, pero Joselito seguía sin querer salir. Ellos desistieron después y se marcharon, la mama de Joselito y el papa se preguntaron por esa actitud tan maleducada de Joselito frente a sus amigos, ¿que era la descortesía?, Joselito le conto todo lo que preocupaba su corazón, les conto todo lo que sospechaba de las chicas, de manolo y Sebastián quien se había hecho amigo de quien fuera el enemigo numero uno de su ya difunto amigo Lolo, el padre de Joselito le había contado lo que sabia de la vieja mina y las leyendas que ese lugar tenia, y que si era cierto que Lolo había pedido desenterrar a su abuelo pues fue este mismo quien tomo su venganza sobre Lolo y no tendría que tomarla sobre nadie mas, que la prueba de eso es que los restos de su abuelo fueron hallados semanas después de la Misteriosa muerte de Lolo. La mama de Joselito no estuvo muy de acuerdo con esta versión, pero sin contradecir a su marido le propuso a Joselito que tuviera calma y dejara la paranoia.
-Mira hijo, la vida es brillante y hay que respirar libertad y no encerrarse en el pasado, pues cuando uno destapa esas sombras, estas jamás se pierden en el viento, sino que quedan atrapadas en nuestra piel haciéndonos vulnerables a las calamidades, así que hay que dejar las pesadillas a un lado y caminar del otro lado de los sueños, pues mas bien agradece a la vida que tiene amigos y una Novia muy linda para ir al baile y que están a menos de unas cuantas horas para degustar las mieles de la victoria en el torneo de futbol. -Joselito pregunta con inocencia.
-¿entonces las cosas mágicas y misteriosas no existen? - a lo que su mama responde.
-la magia hace parte del misterio pero las cosas que sabemos dejan de ser un misterio. Y pues a veces eso es necesario que para que la magia exista. Es necesario dejarla en el misterio. Sin escudriñar mucho. Entonces es mejor tener fe en algo por pobre que parezca que no tener nada, ni nadie en quien confiar.
-¿te sientes mejor hijo? –le preguntaba su padre mientras abrasaba a su sabia esposa, entonces Joselito responde.
-Si, bastante bien. Gracias por la confianza. -con un gran beso a sus padres se relajo mas y pudo dormir lo suficiente como para recuperar no solo fuerzas mentales sino también físicas como para ganar ese dichoso partido de futbol y celebrar con sus amigos, junto a “Manolo” y Sebastián , que al fin de cuentas termino aceptando también; Al otro día fue la final la cual ganaron victoriosamente, después de la fiesta que les hicieron toda la tarde y parte de la noche, Joselito y Sebastián irían a casa de Manolo para conocer su misterioso mundo, por invitación del mismo Manolo quien solo quería jugar un poco con ellos algo de juegos de mesa y video juegos.
-¿Vienen chicas? –pregunto Joselito, mientras Carmencita haciéndose la difícil le pregunta.
-Ayer no quería recibirnos, no quiso venir a comer helado al parque, ni quiso vernos, sobretodo a mi, dizque su novia. Y a su amigo Sebastián con el corazón desangrándose en su mano quien le pidió perdón casi de rodillas, le suplico perdón…
-Ay, no seas exagerada… -Joselito se ríe, pero Doloritas interrumpe la risa de Joselito.
-el exagerado fuiste tú, ayer Sebastián casi no podía caminar de la lesión en su pierna, y sin embargo no estaba tan cansado como tu y si quiso salir con nosotras.
-Bueno, perdón. –Joselito les ofrece disculpas de un modo seco.
-No señor, ese no es modo de pedir perdón. Si hay algo que no resisto es un perdón mal pedido. –dice Carmencita mientras Joselito vuelve a ofrecer disculpas de un modo mas suave.
-esta bien. ¿Me perdonan?
-NO. –Dice fríamente Carmencita.
-Pero… -entre tanto se acerca Sebastián y le dice a Joselito.
-Mira ya les dije pero, ellas no van a venir con nosotros a casa de manolo, porque se van de shopping.
-Hay cosas que yo no entiendo. –Dice Doloritas.
-¿entender? –Pregunta Joselito, mientras Doloritas dice.
-No entiendo como son ustedes tan volubles, es decir, ayer Joselito no te respondió si te perdonaba o no y ahora andan de amigos y hasta…
-Si me perdono. – responde Sebastián riéndose.
-Yo no vi. –responde Carmencita mientras Sebastián y Joselito se ríen.
-¿de que se ríen? –Joselito responde.
-que ustedes no se dieron cuenta. –Sebastián termina.
-antes de cerrar la ventana me dijo que si, lo que pasa es que ustedes no lo oyeron. Bueno, ahora respóndanme ¿quieren venir con nosotros a jugar a la casa de manolo? - Carmencita y Lolita se negaron a ir con ellos, ya que esa tarde irían de compras, mas bien querían ir juntas a buscar sus vestidos para el baile de ese Viernes que tan animado mantenía a Sebastián quien había tomado unas clasecitas de baile en el colegio gracias a unas compañeras del otro curso. Joselito le pregunto a Sebastián de el porque las chicas no habrían querido ir con ellos a casa de Manolo, pero Sebastián , le repitió que no había ningún misterio, que simplemente iban a buscar sus vestidos, Joselito se acordó de las palabras de su mama, de aquello de conservar la calma y una mente limpia, libre.
Una vez en casa de manolo, este los lleva por un corredor que mas bien parecía un museo, en donde hay una habitación en cuyas paredes hay una colección de armas de todas las edades hasta las mas recientes, entre ellas había un hacha muy parecida a la que vio Joselito en las manos de aquel asesino, entonces Joselito pensando para si, trago saliva y con algo de miedo, intentaba recordar aquello que le había producido tranquilidad, ¿que palabras exactamente que le dijera su madre la noche anterior le había producido tranquilidad?, mientras recordó que debía relajarse y dejar a las sombras del pasado para que no volvieran, para vivir libre y sin preocupación, pensó para si muy débilmente que todo aquello era casualidad y que su mente le jugaba pasadas bastante extremas como la noche que el asesino lo persiguió por la calle; entre tanto Joselito parecía momificado y con los ojos en ascuas mirando aquella hacha, su amigo Sebastián lo sacudía de los hombros mientras Joselito parecía un muñeco de trapo, Sebastián le grito al oído.
-¡despierta!.
-¿Por qué me gritas? – pregunta Joselito mientras Manolo con una risa característica de el y de sus antiguas burlas, le dice.
-es que parecías una estatua. Pero ¿Qué es lo que te hizo ponerte tan nervioso? - a lo que Joselito guardando silencio mientras ordenaba algunas palabras para describir lo que le iba a responder a Manolito, Sebastián se le adelanta respondiéndole a Manolo.
-Pues el hacha que tienes en tu colección de armas allá en la pared. -Manolo le muestra a Joselito que esas armas están muy bien pegadas y le reitera que le muestra que no pueden zafarse ya que son de la colección de su padre quien ni siquiera puede despegarlas para sacudirlas ya que solo son ornamentales, es decir sus detalles las hacen ver reales pero solo son de juguete para hacerle una mejor descripción.
-no estaba asustado, estaba… -Joselito, no sabe como terminar la frase, pero manolo les dice.
- … Impresionado, lo sé. Mejor “impresionémonos” todos allí. ¿Les parece? -y añade que mejor pasan a su cuarto para jugar, una vez en el cuarto de Manolo, descubre encima de su escritorio una biblia Mesiánica como la que le había sugerido su amigo Lolo de llevar a la mina aquella noche, esto también le llamo la atención a Joselito, pero no tanto como el hacha, aunque esto levanto la sospecha que no había podido comprobar de verdad si esas armas eran falsas realmente, tal vez era solo una cuartada, la cabeza de Joselito comenzó nuevamente a tejer dudas, parecía estar en otro mundo y cada vez mas se sumergía mas y mas, Sebastián le dijo a Joselito con algo de desilusión.
-Por favor tranquilízate.
-Estoy bien Sebastián. –le dice Joselito casi al oído, pero Sebastián sabe que no, que algo serio esta pensando, entonces le dice.
-te siento tan nervioso que hasta puedo escuchar tus pensamientos desde aquí. Te conozco porque eres mi amigo. ¿Qué traes esta vez?
-está bien, mira… ¿estás viendo ese libro? –Joselito le pregunta con curiosidad.
-Oh, la famosa biblia Mesiánica. - a lo que Manolo escuchando esto y viendo que se referían a eso les conto.
-chicos, les confesare algo. –Dice manolo mientras se acerca a la biblia mesiánica. –Joselito retrocede dos pasos hacia la puerta del cuarto de manolo, ya que su instinto se ha rebosado de dudas y ante las palabras de manolo, Joselito cree que esta casi por confesar su crimen la noche aquella que degollaron a Lolo, y que quizás para no dejar evidencia de nada posiblemente tenga que eliminarlos después. Manolo continúa diciendo.
-soy Mesiánico, como todos saben esta religión o secta o como la quieran llamar, nació hace diez años en este pueblo luego de que el fundador un tal Idelfonso predijera que el hijo de la luz volvería a través de su generación.
-ese no era el loco que había sido primero raptado por extraterrestres y que luego dijo que había uranio en este pueblo y empezó a cavar hasta formar una mina y morir allí… -dijo Sebastián mientras manolo enojado les dice.
-ningún loco, ese señor escribió muchas cosas y pruebas científicas de que si había uranio, tanto así que ¿Cómo fue que vinieron aquellos científicos?. –Joselito al observar aquella disputa de creencias, extraterrestres y cosas así, relaciona todo con lolo cuando le había hablado del famoso abuelo Idelfonso y dice inocentemente.
-Creo que hablan del abuelo de Lolo, ¿verdad?. –Sebastián propone.
-Miren chicos, dejemos la cosa hasta ahí. Si hay algo que he aprendido de las creencias o Religiones es, que “tendrás la discordia de muchos y la amistad de unos cuantos”, así que limitémonos a ser amigos en el orden común. Propongo que juguemos. – Joselito se relajo más y estuvo atento a los juegos y se divirtió como nunca, aunque seguía de vez en cuando mirando la dichosa biblia mesiánica, hasta que se digno en decir.
-No entiendo que más misterios se encierran allí.
-creí que ya no tocarían mas el tema. –dijo manolo pero Sebastián , con la confianza ganada por Manolo empezó a contarle la historia que les había dicho su difunto amigo Lolo acerca de jurar con la mano de un muerto sobre la biblia Mesiánica, dicho esto se hecho a reír, mientras Manolo se puso muy serio y les pidió que no se burlaran de esta manera ni de chiste, ni siquiera con el pensamiento, porque de este modo es como se le da vida a los muertos y que cuando regresan del más allá, no vienen con sus verdaderas almas, sino con unas almas negras, tan negras como el infierno, y de este modo también buscan salvar la honra del guardián del portal de la muerte llevándose a quien lo coja de burla.
-Pero no le pegue al perro, solo quería ser sincero y decirle los planes de… -Joselito interrumpe a Sebastián.
-Es mejor que dejemos el pasado y a los muertos tranquilos, eso es una lógica natural por siglos, debe estar escrita en cientos de libros religiosos, milenarios, de otras Mesianisuras, etc. Y aunque me ofrecí para profanar el descanso del abuelo de lolo, algo parecido me conto mi papa, la cosa seguro fue con el y es por eso que gracias a dios no me paso nada a mí. –Manolo asienta y palmotea en el hombro a Joselito para demostrarle su acuerdo. Luego Manolo les dice que no les dijo eso para asustarlos, sino para prevenirlos.
Esa tarde Joselito y Sebastián estaban tan asustados como aquel mismo momento que decidieron prestarse para el juego de Lolo, sin embargo jugaron con Manolo, quien además les mostro un mundo normal en su misterioso mundo de armas y religiones Mesiánicas, de este modo Joselito y Sebastián serian más cautos al hacer comentarios y sobre todo a jugar con cosas misteriosas, aunque el mas perjudicado fue Lolo. Joselito sentía que dicha sombra le pisaba los talones también, y Sebastián tenia miedo no solo por el sino por su amigo Joselito a quien comprendió profundamente desde ese día, así como un par de buenos amigos, Manolito los ve irse abrasados desde la ventana. Mientras manolo en la mano sostiene con fuerza su Biblia mesiánica, y besando este libro viejo, lo coloca sobre su escritorio lo abre y se pone a orar.
Sebastián y Joselito están en medio de la noche y sin importar los peligros se juran cuidarse mutuamente, entre hablan de otras cosas para disipar sus mentes del mismo peligro que les jugara sus destinos, deciden recordar cosas bonitas, como los triunfos del partido, el baile que tendrían al siguiente día junto a sus jóvenes Novias tan preciosas y sexis, se pusieron a comentar de cómo se verían talladitas con uno de esos trajes de noche con escotes pronunciados y descubiertos en la espalda, de aquellos trajes que usan las actrices de Hollywood semitransparentes, con lentejuelas y encajes perfectos. De pronto escuchan pasos atrás de ellos y los no muy valientes terminan corriendo y escondiéndose en un zaguán de una casa bajo unas escaleras viejas. De pronto Joselito le dice a Sebastián.
-controla tus miedos.
-¿No es tuya la mano temblorosa que tengo en la espalda? - y en cuanto Joselito voltea hacia atrás descubre que sus novias eran las que los venían siguiendo calles atrás, pero ellos las ignoraron y salieron corriendo como un par de… “Gallinas”.
-ja ja.. ¿Qué les pasa? –dicen ellas, mientras Joselito sigue temblando de miedo les dice.
-eso no son chistes. ¿Por qué no aparecen de frente?
-queríamos dales una sorpresa. –dice Carmencita.
-y vaya que si fue una sorpresa… -dice irónicamente Sebastián. -Ellas se echaron a reír al ver la cara de susto que traían sus Héroes de esa tarde frente a sus rivales de juego, y al parecer tenían sus mentes tan envenenadas por los terroríficos acontecimientos del año pasado con la muerte de Lolo que ya cualquier cosa los espantaría, así que mientras los intentaban tranquilizar, ellas mismas tomarían la iniciativa de proponerles algo después del baile.
-¿Qué será? –pregunta Joselito, pero Carmencita les dice.
-hemos estado estudiando mucho sus estados de animo, y para hacer un punto neutro en sus comportamientos y cerrar de una vez el terrorífico capitulo de Lolo que ensucio por así decirlo sus mentes tan imaginativas, llenándolas de sombras y asesinos en medio de la noche. –Joselito al escuchar esto de “asesinos en medio de la noche” sabia que se referían a el, y aunque quiso hacer una objeción mejor decidió esperar a que Carmencita terminara, aunque otro quien también veía siluetas y sombras era Sebastián, quien no se hizo esperar con sus palabras y dijo.
-Mira, Doloritas y Carmencita, aquella noche después de cine, se lo que vi, ahora bien, no me persiguió con un hacha por el barrio, pero si Joselito dice que así fue, no tengo porque negarlo. Pero… -Doloritas interrumpe a Sebastián y dice.
-Lo que sea chicos, tomemos esta propuesta como un tratamiento psicológico que nos ayudara a todos porque se nos esta volviendo una obsesión.
-Nos vamos a destruir, vamos a terminar en el manicomio, por favor. –dice Carmencita, mientras Joselito pregunta.
-¿y por que no nos cuentan que es?
-No sean curiosos, si les contamos no disfrutaran del baile, solo les adelanto que se olvidaran de todo esto y podremos vivir tranquilos y en paz. –Respondió Doloritas, y Sebastián increpa.
-No quiero mas minutos de silencio, tampoco que nos pongamos aislados y tristes y aburramos la fiesta, no quiero gente llorando y berreando como una magdalena, ¿ok? –Dice esto mirando a Joselito a los ojos.
-No empiecen chicos. –dice Carmencita.
-Mira, Sebastián. No vas a comparar las heridas frescas del año pasado. La muerte de Lolo eran muy reciente, fue inevitable, sabes cuanto lo amaba. –dice sinceramente Joselito, ya que Sebastián solo pensaba en el.
-Perdón Joselito, pero creo que te has dado cuenta de lo importante que es esta fiesta para mi. –dice con honestidad Sebastián y Doloritas se acerca y abrasándolo por detrás lo rodea con sus brazos y le dice al oído.
-Lo sabemos, mi amor y es por eso que te daré una sorpresa, mejor dicho dos sorpresas, la primera es que seré toda tuya, bailaremos hasta desmayar y la segunda…
-la segunda la sabrán a su momento. –Termina por aclarar Carmencita. Joselito les pregunta.
- ¿porque tanto misterio?, lo mismo paso con las dichosas bebidas energéticas y seguimos sin saber nada. -Ellas se ponen algo serias y con una mirada simple hacen que Joselito se tranquilice, pero Sebastián responde.
- ¿cual es ese secreto de las bebidas energéticas? -pero ellas siguen en silencio y mientras se miran mutuamente, Lolita le dice a Carmencita.
- ¿Qué les decimos primero?
-nada. es un abuso de confianza.
-Pero Carmencita, si el abuso es el secreto de ustedes. –dice Joselito.
-Ok, si quieren saber lo de las bebidas energéticas, deben de… -Sebastián se ríe viendo a estas chicas haciendo un papel de misterio, luego de haberles jugado la broma de estarlos persiguiendo y cree que seguro son ellas las que quieren seguir el jueguito diciéndoles que no se asusten para asustarlos mas.
-¿de qué te ríes? –Sebastián ríe aun mas al ver la cara que pone Doloritas al preguntarle y la de Carmencita al cortar lo que venia diciendo. Joselito sin entender nada pregunta.
-a este ya le están atacando los nervios y su mecanismo de defensa es la risa. Yo creo que se esta volviendo loco, rápido chicas digan rápido eso de la propuesta entonces o lo de las bebidas energéticas, rápido… -dice Joselito mientras Sebastián sigue riendo, sin embargo Doloritas les dice.
-ok, veo que no nos toman en serio. –Joselito la mira con extrañeza y Sebastián como puede dice.
-me rio… me rio de que ustedes se ven muy misteriosas y parecen como esas viejas de pueblo que le cuentan historias de miedo a los niños para asustarlos. La verdad gozo un montón con ustedes, pero no acredito tanta inmadurez de su parte, solo vean la cara de ingenuidad del pobre Joselito. –Joselito sigue en el limbo pero agrega.
-Reconozco no entender lo que dices Sebastián, no entiendo tu actitud. –Carmencita dice.
-¿Qué te fumaste hoy Sebastián? Ustedes son los misteriosos, son los que andan con cara de espanto por haber visto sombras y espectros.
-No, no me pongan atención, solo lo decía porque de verdad vi la situación cómica, ustedes no lo entenderían. –Joselito responde.
-se los dije, a este ya se le corrió la teja. –Doloritas les pregunta.
-Ya basta los dos. Tu de hacerte el inocente e indiferente a veces y por preguntar bobadas, haces ver todo como si fuera brujería. y tu por andar asustando a Joselito con espectros y fantasmas, y siguiéndole el cuento con que bebidas energéticas y todo para que luego te pelees con el. Nosotras lo que queremos es tener dos Novios serios y elegantes para bailar mañana y luego…
-¿quieren escuchar? –pregunto Carmencita.
-¿pero? –pregunta Joselito.
-olvídate de la dichosa formula de las bebidas energéticas… ¿quieres escuchar la propuesta? -a lo que ellos responden que sí. Joselito decide escuchar la dichosa propuesta, pues total no ganaría nada con insistirles que le den el secreto de las bebidas energéticas, Sebastián después de interrogarlas varias veces ellas seguían con la negativa, entonces Joselito insistió en escuchar la propuesta, entonces ellas le preguntan una vez mas a Sebastián si quiere o no quiere escuchar la propuesta; Sebastián asienta con la cabeza.
-Esta bien. -Carmencita toma aire para hablar, mientras Lolita saca algo de una bolsa, Carmencita les dice.
- la propuesta es que antes de la medía noche salgamos del baile y vallamos todos a la vieja mina abandonada donde mataron a Lolo para enterrar algunas cosas que nos dio Lolo, ya que el pacto que habíamos hecho con Lolo era para después de un año y después del baile de fin de año.
-están locas ustedes dos. Muestren a ver que quieren enterrar. –Doloritas les muestra una bolsita con tarjeticas y un osito de peluche con un corazón grande que decía: “las amo amigas”.
-creo Sebastián que no están tan locas, se trata de enterrar el pasado, es algo simbólico pero ayuda a la mente.
-¿Simbólico?, Sera “diabólico”. –dijo Sebastián. Y responde Doloritas
-Tu siempre exagerando, ni que fuéramos a desenterrar a un muerto, además esto de colocar recuerditos en los sitios en donde muere la gente violentamente tranquiliza el espíritu de las dos personas, tanto el atormentado como el atormentador. – Joselito responde.
-oh, oh ¡ Si la vaina es con espíritus, creo que no me parece tan…
-No seas bobo Joselito. Además esto que vamos a hacer no es magia ni brujería, según una revista que leímos el mes pasado, una revista de modas y de temas interesantes, habla de los indios y estos enterraban a sus guerreros con todas sus cosas y las cosas que los demás tenían de ellos, de este modo queda enterrado el recuerdo y el tormento no viene mas. -Joselito seguía sin entender estas palabras de Carmencita, y Sebastián ya estaba algo confundido aunque no por lo de los espíritus, sino por algo que se guardaba. Joselito y Sebastián se negaron a ir, incluso no le creyeron, a lo que Carmencita insistiendo en que lo hicieran por su amigo Lolo, por la que fuera la última voluntad de Lolo, ellos se negaron varias veces, mientras Lolita les leyó unas cartas que les había escrito Lolo antes de morir. Lolita comenzó a llorar y le contaron a Sebastián que ella junto con Carmencita eran sus mas eternas amigas y que tanto era el cariño que él les brindo que era casi imposible tenerse que negar incluso teniendo en cuenta el peligro no tanto físico sino psicológico que esto demandara, pues de solo imaginar nuevamente lo sucedido era seriamente para desatar un trauma de por vida, incluso para las personas de muy poca imaginación sería no muy normal volver a ver a su amigo decapitado, e incluso ver al hombre del hacha, así como lo había visto Joselito. Lolita les demuestra la necesidad de enterrar el pasado para ser nuevamente libres y cambiar sus vidas borrando el fantasma de Lolo. Carmencita les dice que después de esto sabrán mas cosas, pero que no sean misteriosos porque de esta manera van a tener prevención de algo, y eso los atormentara, que el miedo es interior y no los dejara ver con claridad.
-¿Qué dices Joselito? –pregunto Sebastián, mientras con una duda transparente casi invisible en sus pupilas borrosas de iluminación o asombro, da a entender su aceptación casi definitiva la cual solo le hacia falta el consentimiento de su amigo.
-Pues, si tu vas… -esta respuesta era casi la cuota inicial de un “si acepto”, sin embargo Doloritas dice.
-Pues nosotras iremos así se abra la tierra y nos trague. –Carmencita reitera.
-No es ninguna Satanada o brujería negra, no estamos profanando el sueño de los muertos ni haciendo ningún ritual de magia para revivir a Lolo. Entiendan.
-Ah, pero ustedes siguen mencionando esas palabras. –Sebastián se ríe de lo que acaba de decir Joselito y le responde.
-Pedazo de zoquete, ¿le tienes más miedo al cari cortado o al que lo corto?, las palabras por si solas no asustan.
-No es que me este empezando a asustar, les cuento que desde hace un año ando con taquicardias. Y no solo por las palabras.
-Mira Joselito, tesoro. Nosotras estábamos ahí también, y vimos al hombre o sombra gigante esa que sostenía un hacha y nos arrojo la cabeza sin vida de Lolo y te recordamos que quedamos con el corazón en la boca del susto, y es exactamente lo que vamos a hacer mañana, vamos a olvidar… -dice Doloritas muy sentidamente, mientras Carmencita vuelve a preguntar esta vez cruza los dedos para que acepte.
-¿entonces?
-está bien, iré con ustedes. –Joselito asienta aunque con un poco de recelo; ellos se ponen a celebrar y abrasan Joselito y le pasan la mano por la cabeza, Carmencita lo besa al igual que Doloritas que de la emoción le dio un beso en la mejilla, mientras que Sebastián, lo apapacha tan fuerte y girando le hace perder el equilibrio, así juegan hasta que ya se pone mas oscuro y se despiden de este modo cada cual se va para su casa.
El resto de noche hasta el día siguiente Joselito no pudo dormir mientras le daban vueltas las imágenes de la cabeza decapitada de Lolo en sus visiones, del hombre misterioso del hacha y de las palabras de Carmencita y Lolita acerca de los recuerdos enterrados, también entro en sus sueños la imagen de la biblia Mesiánica, de los insondables misterios que ocultaba dicha literatura albergada durante diez años y también de las advertencias de un mesiánico como Manolo acerca de no jugar con los muertos ni con la mente.
Aquella mañana mientras se alistaba para ir a clases, vio en el espejo aquel rostro cansado, que no pudo conciliar el sueño por culpa de la dichosa propuesta de Carmencita y Doloritas, que se asemejaba muchísimo a la que les propusiera su amigo Lolo para revelarles el secreto de cómo conseguir mujeres. Mientras Joselito se lavaba los dientes se acordó de esto y debería prevenir a Sebastián del peligro que esto implicaría, Una vez en clases, Joselito nota la ausencia de su amigo Sebastián y de las chicas, sin embargo Manolo se acerca a Joselito.
-¿Por qué traes esa cara de muerto? Parece que no dormiste nada. -a lo que Joselito después de un largo silencio.
-¿te puedo confiar algo?, es decir… -Joselito siente la necesidad de decirle pero a la vez no se atreve ya que la confianza es muy débil, por aquello de que aun quedaban algunas dudas, sin embargo manolo intuye esto y le dice.
-¿Qué si puedes confiar en mí? Por supuesto amigo. –pues el pasado de su rivalidad había quedado atrás.
-es algo muy serio, pues Sebastián y yo, no somos lo que parecemos. –Joselito intenta iniciar el dialogo para contarle lo de las bebidas energéticas. Pero Manolo, mira a Joselito con decepción y con algo de tristeza y le dice.
-Bueno, te confesare algo, se por lo que estas pasando, pues yo también soy así. Pero te lo digo confidentemente. No se lo digas a nadie. ¿Ok?. –Joselito siente que se quita un gran peso de encima y le termina de decir.
-¿entonces tu también probaste eso? –Joselito le trataba de decir que si conocía la formula o el secreto del componente que le había puesto las chicas.
-bueno… -dice ruborizándose manolo. Mientras Joselito le interrumpe diciendo.
-Mira que gracias a eso, pudimos ganar el juego, pero me siento mal ya que no somos los deportistas que la gente cree. –Manolo se pierde un poco de lo que trata de decirle Joselito, pero le contesta.
-Ser Gay no es un problema Joselito, y pues si gracias a “eso” que tu dices que probaron Sebastián y tu ganaron el juego o sirvió para ganar el juego. Pues, te diré que eso no tiene nada que ver una cosa con la otra. ¿me entiendes? Lo que si veo raro es que anden con mujeres.
-¿Qué me estabas entendiendo Manolo? Te estoy hablando de las bebidas energéticas. –Manolo se hecha a reír y entendiendo las cosas ya tarde le reitera a Joselito.
-Ni una palabra ¿ok?.
-Así que tu eres gay, ya entiendo por que no querías que estuviéramos con las chicas. –manolo le responde.
-No es por eso, es otra cosa que te contare mas adelante, ¿Qué tienes contra las bebidas energéticas?
-Pues te decía que gracias a eso fue que ganamos y nos hicimos buenos jugadores. –Manolo se ríe y le dice.
-No son tan “especiales” como te imaginas, le dicen energéticas porque tienen mas cafeína que una bebida normal y produce una sensación de animo, te hace mas rápido, etc. Todos los deportistas o la mayoría las consumen. Eso no es como para poner esa cara de susto. –le dijo manolo, mientras Joselito sonriendo le dice.
-Si el susto es para mi, nunca me imagine que tu fueras…
-Ni una palabra a nadie. –le responde manolo con firmeza. Joselito le pregunta
-¿Por qué no querías que estuviéramos con las chicas? Es decir primero se lo dices a lolo antes que muriera y luego nos lo dices en varias oportunidades a nosotros, acaso ¿era por el rivalismo?
-Nada de eso, en verdad esas chicas son peligrosas. - Manolo lo mira fijamente a los ojos y con profunda seriedad le dice.-no son chicas normales, en realidad han estado en este colegio por varias generaciones, ellas no envejecen como el resto de las mujeres y simplemente aparentan ser jóvenes, se tejen muchos misterios acerca de ellas, por ejemplo viven en el cementerio en una de las casas Panteones que tiene subterráneo y dentro esta amoblada con cosas como si fuera un apartamento.
Joselito se echa a reír incrédulo, mientras Lolita un poco afanada va en busca de Joselito y al acercarse, le dice al oído que la siga, que no haga preguntas y que vaya con ella. Joselito se despide de Manolo pero este le reitera.
-Ten cuidado. - Una vez a solas, se acerca Carmencita . Sebastián le dice.
- esta noche será el baile, y después del baile iremos a la mina y haremos lo que las chicas quieren para que nos revelen el secreto de las bebidas energéticas, y después… -entre tanto Joselito le interrumpe.
-Mira Sebastián, no me importa eso que dices de las bebidas energéticas, ya se la formula. Además no me prestare para pruebas de fuerza, pues simplemente me arrepiento por haberlo hecho aquella vez que Lolo nos había retado a hacerlo y todo por la ambición de poseer un “secreto” que nunca nos fue revelado. - pero Carmencita le dice.
-¿de que hablas? ¿Acaso sabes lo que le echamos a las bebidas para volverlas energéticas? Además, de eso que dices de Lolo, si sabíamos todo acerca del “secreto para conseguir el amor” ya que Lolo no tenia ningún interés por nosotras como mujeres, pero nosotras si hacia ustedes dos y ustedes nos demostraron interés cuando nos miraban, Lolo había planeado bien las cosas.
-¿o sea que ustedes sabían que Lolo iba a ser decapitado? –Pregunta tontamente Joselito.
-No, no me entiendes, quiero decir es que sabíamos de que Lolo les había puesto una prueba. ¿No se te hace raro que nosotras estuviéramos allí?.
-La verdad no solo se me hace “raro” sino sospechoso. –dice Joselito mientras mira a Sebastián y este responde.
-Ahora vas a crear una película en tu cabeza, donde las chicas son las villanas, ¿entonces yo quien soy?
-No se, quizás “la sombra”.
- a ¿si? Y ¿quien llamo a tus padres?. –Joselito y Sebastián comienzan a argumentar, y Carmencita les dice.
-Ya basta muchachos, así no vamos a llegar a ningún lado. No enredemos mas las cosas. Si Lolo nos dijo algo no fue porque intuyera que iba a morir, ni que preparo su propia muerte o que Sebastián lo matara al son de los cocos. NO. simplemente fue que el nos dijo que a partir del momento en que Joselito intentara entrar y se asustara, con la broma que nosotras le habíamos preparado disfrazándonos de fantasmas, entonces yo sería el premio para él y luego que Sebastián se animara a hacer la proeza de Joselito, pues Doloritas seria para él, así de simple. Pero movidas por las circunstancias, decidimos ser sus novias, ¿ok? - Sebastián decepcionado al igual que Joselito discuten con ellas acerca de sus sentimientos todo ese tiempo, pero ellas le confirman su amor, y que si están con ellos es por el amor que ahora le tienen.
Lolita no dice nada como escondiendo algo mas y mientras ella mira hacia abajo como queriendo ocultar su rostro de las palabras de Carmencita, Sebastián la mira, mientras Carmencita le pregunta.
-¿cierto Lolita? - como para confirmar sus palabras que diga si es o no verdad lo que ella dice, pero Lolita rompe a llorar y sale corriendo; Carmencita se despide .
- prepárense para el baile esta noche. - enseguida sale detrás de su amiga Doloritas. Una vez Sebastián y Joselito están solos, suena el timbre para cambio de clase, y su amigo Manolo viene hacia ellos.
-esas chicas se traen algo. ¿Cierto? - a lo que Joselito le intenta decir algo pero inmediatamente Sebastián sobrepone sus palabras callando a Joselito diciendo.
-No. Todo esta bien. Solo discutíamos el color de los vestidos para esta noche. Pero.. tu ¿con quien iras al baile? –Manolo se queda callado, mientras mira confidentemente a Joselito y con una sonrisa de esas de “aquí no pasa nada” hace un gesto y se va.
Mas tarde Manolo busca a Joselito y viéndolo solo estuvo haciéndoles preguntas similares como para entrar en detalles de las dudas que le había quedado por ver la discusión entre ellos, sin embargo Joselito un tanto confundido, solo repetía lo que su amigo Sebastián había dicho.
-Ya te conté lo tramposas que son esas chicas, son brujas y cambian de forma.
-Mira Manolo, no quiero entrar en detalles contigo, pero me parece que no te gustan y es natural, ¿no? Es decir, no voy a hablar mal de los Geys porque no me gustan. –Joselito le dice esto muy valientemente ya que Manolo lo podía superar en fuerza y partirle la cara, sin embargo Manolo vuelve a sonreír y con una expresión de indiferencia se despide diciendo.
-ok, Joselito. Solo ten cuidado con ellas. Pueda ser que te des cuenta antes de que sea demasiado tarde, ya que me dolería mucho, sabes que soy tu amigo y no tengo segundas intenciones si es lo que te imaginas. Cuentas sinceramente con mi amistad. Creo que no encontraras a alguien mas transparente que yo. Te lo aseguro.
-Lo se, no a todo el mundo se le hacen confesiones tan intimas. Pues yo no estaba para saberlo ni tu para contármelo.
-Ya que lo sabes, estoy en tus manos, y espero que valores mi amistad y te cuides. –Manolo se siente como un indefenso gatico en la voluntad de Joselito, pero confiando sin mas alternativa en el, solo espera que guarde su reputación de las burlas y miradas del colegio. Joselito sigue con la cabeza llena de cosas, pero las menos importantes ahora es fijarse en la reputación de Manolo y con un estrechón de manos le asegura su tranquilidad. Entre tanto Sebastián viene llegando.
-¿Qué hacías con Manolo? –le recrimina sospechando que estaba contándole algo de la discusión con las chicas, pues Sebastián también sabe que a manolo no le gustaba ver a nadie cerca a las chicas, como si fueran de el.
-No hacia nada malo. Dice Joselito con naturalidad.
-¿nada? Vi como le estrechabas la mano.
-Bueno, también es amigo tuyo, ¿no? –Joselito defiende su respuesta.
-Si, pero asumo que le contaste algo.
-Si te refieres a lo de las chicas, lo deje hasta ahí. –Joselito fue directo pero Sebastián quiere hondear en el asunto.
-¿sabias que la ropa sucia se lava en casa?
-¿quieres decir que soy un chismoso? Te estoy diciendo que no le dije nada. –dice enojado Joselito.
-nada de que… eso quiere decir que te pregunto algo, ¿cierto?
-¿que si pregunto? Claro que pregunto lo mismo que te pregunto a ti, es claro que quería saber de ellas. Como tu dices, “a el no le gusta que nadie las mire siquiera”. –le aclara con seguridad y firmeza a Sebastián.
-Bueno, ya entendí. ¿Pero tú que le dijiste?
-lo mismo que tu, que hablábamos de asuntos del baile. Mira Sebastián, yo no estoy preocupado de eso, es decir de que si “le conté o no le conté”… Lo que me preocupa en realidad son las chicas. Mira que relación más frívola hemos llevado con ellas.
-¿frívola? ¿En que sentido?
-¿No escuchaste a Carmencita? Todo empezó desde el día que murió Lolo, es decir me parece que andan con nosotros por “Lastima” como si fuéramos unos “Parias” solitarios y abandonados del mundo, de la sociedad. Que tristeza.
-Mira Joselito, creo que ellas han sido muy sinceras con nosotros al contarnos eso, y no solo creo, sino que estoy muy seguro del amor que ellas sienten por nosotros. Aunque…
-Aunque hemos salido y ellas han amanecido en nuestras casas, nosotros no sabemos realmente nada de ellas, a eso me refiero con decir que la relación con ellas ha sido abierta pero frívola, ¿no te da desconfianza? Además dicen que son hermanas. ¿Qué parecido les ves? Mira Sebastián hasta se me hace que son…
-¿Qué? ¿Lesbianas? Ja Ja. No me hagas reír, son todas unas mujeres. - Sebastián reía mientras en medio de sus risas decía que eran muy ardientes con ellos, muy seductivas para ser lesbianas, pero Joselito mirándolo seriamente le dice.
- a lo mejor hacemos parte de este juego.
-Ok, es muy fácil averiguarlo Joselito, les diremos que nos digan todo, que nos hablen o nos lleven donde viven y que nos cuenten sus cosas, asimismo como ellas fueron sinceras con nosotros del mismo modo seremos con ellas. -Una vez fuera del colegio, ellos deciden buscarlas para saber que misterios escondían en sus domicilios, y Joselito le dijo a su amigo Sebastián.
-¿Qué te parece si vamos a visitar la tumba de Lolo? -Sebastián no quería pero luego de un rato acepto pero después de saludar la tumba de Lolo seguirían a buscar a las chicas.
una vez en la reja de aquel cementerio ven a un hombre bastante flaco con una pala en la mano acercarse a ellos, este hombre les pregunta.
-¿Qué se les perdió amiguitos? Estas no son horas de visita, el cementerio esta cerrado. Solo están aquí los que se consideran “Muertos”. Ja Ja. - dicho esto se hecho a reír, mientras Sebastián y Joselito se querían desmayar del miedo, pues el rostro de aquel individuo era bastante demacrado y su risa muy satánica con cierto eco a ultratumba. Sin embargo Sebastián y Joselito insistieron pero aquel hombre se les negó rotundamente, Joselito le dijo a Sebastián al oído.
-no me da buena espina este… ser o cosa que parece hablar, creo que esta bastante rudo.
-Los cementerios son espacios libres. –de este modo Sebastián rompe el silencio de miedo y mirando hacia abajo aun no se atreve a mirar a la cara al señor sepulturero, sin embargo Joselito valientemente lo mira y también le dice.
-Tenemos derecho de visitar a nuestro amigo Lolo, aunque sea por diez minutos, pues no pensamos quedarnos por mucho tiempo.
-Ya les dije que esta cerrado. Son órdenes del alcalde. No quieren vivos a partir de ciertas horas aquí, y también yo decido a quien dejo o no estar aquí aunque sea de paso. –dice en voz alta el sepulturero. Entonces a Joselito se le caldearon los ánimos y le dijo a Sebastián.
-Somos dos contra uno. - y abriendo la reja aquellos dos, en seguida aquel hombre delgado se puso en guardia con la pala mientras Sebastián y Joselito tomaron la pala que el sostenía en defensa y haciendo fuerzas con el lo echaron a un lado, pero este señor se les hecho por la espalda y Joselito no tuvo mas alternativa que noquearlo de un golpe, una vez adentro del cementerio estos dos intrépidos y valientes amigos descubren a su paso unas hermosas tumbas adornadas con unos ángeles gigantes hechos en bronce, también encuentran unas lapidas viejísimas con unos nombres y leyendas escritas en idiomas raros, y entre los cipreses muy alejado del jardín central descubren unas tumbas abandonadas y mientras Joselito aprovecha los últimos rayos del sol que se oculta tras la montaña dejando desolado aquel pequeño pero significante pueblito y aun mas dejando la tristeza de un oscuro cementerio, Joselito se agacha para retirar la maleza que cubre una lapida bastante resquebrajada. Con el animo de leerla y averiguar por su inerte morador. De repente alzando su vista ve a lo lejos a las chicas las cuales llevan un balde con flores y al parecer están limpiando y cambiando unas flores en otra tumba a lo lejos. Sebastián ve lo mismo y escondiéndose de la vista de ellas, se agacha junto con Joselito y le dice.
-¿Qué hacen las chicas aquí?
-Bueno, y ¿tu no me creías?
-¿Qué? –pregunto Sebastián mientras seguía mirando a las chicas.
-No me creíste lo de que esas chicas son bastante misteriosas, ¿no?
-Eso mismo pregunto Manolo, ¿por que todos…? –enseguida Joselito le interrumpe.
-Mucha gente no puede estar equivocada. Mejor salgamos de la duda afrontando esto de una buena vez, ¿quieres?
-¿Qué propones? –Sebastián pregunta como asumiendo la respuesta de llamarlas, sin embargo Joselito queda atónito mientras ve desaparecerse las chicas ante sus ojos y le dice a Sebastián.
-Vamos donde ellas, pero… -Joselito le señala con el dedo lo ocurrido como si todavía estuvieran allí. Sebastián queda asombrado también.
-bueno, ya esto no me esta gustando. Pero.. Vamos hacia allá. –Al acercarse descubren la tumba de Lolo la cual esta perfectamente arreglada, la loza esta limpia y brillante, las flores están recién cambiadas, muy frescas y aun con el aroma de flor de cementerio, de pronto un viento helado toca las mejillas de Joselito y Sebastián y con los ojos como discos empezaron a llamar a sus novias, de repente Sebastián se separa un poco de su amigo y se pierde por un rato, entre que Joselito grita mas y mas fuerte, de ese modo llega a un panteón familiar y recordando lo que le había dicho Manolito alguna vez de que ellas eran brujas revisa por todos los lados, cada esquina del dichoso panteón pero no se veía nada ni se escuchaba nada, cuando da medía vuelta para salir de allí, escucha un grito mudo de auxilio, entonces empieza a buscar entre las tumbas que están tapadas por la maleza espesa que las cubre en su totalidad y descubre atrapado en una enredadera a su amigo Sebastián , Joselito lo saca de allí y cuando están a punto de salir del cementerio ven a lo lejos la reja de la salida y al hombre flaco siendo atendido por dos mujeres que lo levantan del suelo donde callo, Joselito y Sebastián se esconden mas adelante tras una de las lapidas para ver quienes son esas dos mujeres, y logran distinguir que son sus novias a quienes no habían reconocido bien por la tenue oscuridad y porque están vestidas con una elegancia sin igual. Sin duda alguna eran las mismas que le parecían haber visto en la tumba de Lolo.
-Manolo tenia razón, ¿te has dado cuenta? –decía Joselito mientras abrasaba a su amigo y le hablaba en voz baja.
-¿razón? Manolito es un envidioso. ¿No te has dado cuenta?, dime ¿Qué te dijo esta vez?
-Ellas son brujas y viven en este cementerio. O ¿es que no viste bien lo que yo también vi? –Sebastián siente mucho miedo. Miedo a que eso sea verdad. Miedo a que ellas los vieran y otro miedo muy suyo que solo su pensamiento sabría.
-Y ¿Qué hay si es verdad?
-¿no te asusta? –Joselito responde con otra pregunta acorralando a Sebastián en otro miedo mas, sin embargo ya Joselito parece estar curtido por el miedo y en medio de sus temores y de los de su amigo decide hacer frente, Sebastián le responde de inmediato.
-No, claro que no.
-Entonces vamos hacia allá y las saludamos. –Joselito dice valientemente sin entender de donde saca tal fuerza para serlo. Mientras caminan hacia la reja también aprovecha ante la valentía de Sebastián para contarle lo que Manolito le había contado acerca de sus novias, que en realidad no eran tan jóvenes, sino que eran algo así como unas brujas de cementerio que conservaban su juventud, Sebastián empezó a temblar con la sola idea de que ellas eran seres malignos, o una especie así de Zombis, o Vampiras, aunque en realidad tenia mucho que ver con las dichosas propuestas de Lolo y de ellas, pues nada era como lo había pensado antes, es decir tan normal y dándole la razón a Joselito le propuso que salieran de allí mejor antes que ellas los vieran.
Sin embargo volvieron a desaparecer de sus vistas, dejando al sepulturero solo, cuando se acercaron a el inmediatamente el alcalde intervino con la policía y fueron a buscar al hombre del cementerio para preguntarle el porque el cementerio estaba abierto y había gente adentro, pero el sepulturero declaro que aquellos dos jóvenes mientras los señalaba, le habían golpeado y que gracias a dos mujeres que pasaban cerca al cementerio le ayudaron a recuperar el sentido, instantáneamente Sebastián y Joselito quedaron detenidos, Joselito no paraba de hablar. Luego en prisión el guardia de la cárcel no paraba de reír pues al parecer Joselito y Sebastián pretendían distraer a la justicia desviando su atención a las chicas y las cosas insólitas que habían visto.
-Miren chicos porque no guardan esas historias espeluznantes para una película. - y seguía riendo hasta que se quedo dormido, mientras tanto Sebastián se mordía la mano de arrepentimiento, pues había perdido la noche del baile, Joselito también lo recrimino diciéndole.
-¿viste? por tus fabulosas ideas estaremos aquí presos toda la noche. -entre tanto escuchan unos silbidos por la ventana enrejada de la celda que era bastante alta entonces Sebastián le presto sus hombros a Joselito para que pusiera sus pies y de este modo poder llegar hasta arriba, una vez arriba Joselito descubre que son Carmencita y Lolita con un lazo atado del bomper de un carro.
-Miren mis primores, ya creo que tenemos suficiente y no quiero mas problemas.
-¡vamos! Solo deben amarrar este lazo a los barrotes de la ventana para derribar el muro. - Joselito mira a su amigo Sebastián quien lo sostiene y este le dice que si con la cabeza, que lo haga, que es buena idea. Entre tanto Joselito un tanto dudoso de romper la ley de esta forma, es avisado por Sebastián de que el guardia ya se dio cuenta y que esta abriendo la reja, entonces sin darle tiempo a Joselito este cae trayendo el lazo y lo ata rápidamente de una de las piernas del guardia y gritándole a las chicas estas halan y dejan colgado de una pierna al guardia de la ventana de la celda, mientras Joselito y Sebastián escapan.
Una vez afuera las chicas se suben con ellos en el carro y escapan de allí en el carro los chicos se cambian de ropa rápidamente dentro del coche y entran como si nada hubiera ocurrido al baile, allí comienzan a bailar y a tomar licor hasta perder el juicio, entonces Manolito se acerca a ellos para insistirles de los peligros que estas chicas representan pero Sebastián lo interrumpe diciendo que el es un mentiroso, que nada de eso es verdad, que por culpa de sus habladurías estuvieron presos pero que gracias a esos dos angelitos, lograron escapar, Carmencita y Lolita los abrasan y los besan haciendo que Manolo desista de hablar mal de ellas y decide irse; Joselito un tanto borracho pero con algo de duda le pregunta a Carmencita que porque nunca los han invitado a ellos a sus casas, que si ellas viven juntas o que.. Lolita y Carmencita les dicen que si quieren pueden amanecer con ellas después de que salgan de la mina, a esas alturas de los hechos ya Joselito y Sebastián no tenían nada que perder, pues se sentían comprometidos con ellas por el simple hecho de liberarlos de la cárcel y de hacer de su fiesta de baile anual la mejor fiesta aunque no dejaban de pensar en lo ocurrido en el cementerio, pues habían bailado a mas no poder y tomado hasta caer, se habían ganado la atención de todos sus compañeros de clase y de algunas personas del pueblo, mas entre tanto casi unos minutos antes de acabarse la fiesta, el Alcalde irrumpe y manda a parar. Joselito que estaba dormido es despertado por Carmencita mientras ve a Sebastián arrojándose con Lolita por una ventana y seguidamente ellos hacen lo mismo huyendo de este modo de la vista de la justicia, caen en un jardín de gardenias que rodeaba la casa justo con una cerca de madera que adornaba y daba vida al city hall del pueblo, luego montándose en el auto salen a toda prisa para la mina, una vez allí, Lolita saca un termo con café caliente y se los da a tomar para que se les quite la borrachera, ellos se toman eso y acto seguido quedan despiertos. entran a la mina, una vez dentro, mientras Joselito intenta con dificultad recordar lo sucedido aquella vez hace un año, logra encontrar la vieja lámpara de petróleo y tomándola se la entrega a Carmencita para que la encienda, al encenderla, ven la famosa hacha clavada en una de las vigas de madera aun con sangre fresca, entonces Carmencita les dice que se preparen para lo próximo a ver y adentrándose mas en la mina encuentran una gran piedra. Sebastián le dice.
- ¿que tiene eso de extraordinario? –responde Lolita.
-es un pasadizo. -ellos se detienen allí.
-Ya entiendo, aquí fue donde Lolo les había dicho que esperaran detrás de esta piedra para así salir con unas sabanas y lámparas fluorescentes para asustarme. -dice Joselito. Y las Lolita contesta.
- la parte extraña fue cuando vimos al hombre del hacha pues al parecer creímos que se trataba de Lolo disfrazado tratando de asustar a Joselito y luego cuando nos arroja la cabeza de Lolo rompimos a gritar, este hombre avanzo dentro de la mina y parece ser que escapo por este pasadizo. -La roca era una roca falsa que en realidad no tenia mucho peso, debajo se ocultaba unas escaleras que bajaban a otra mina y esta terminaba junto a un rio que llegaba a una carretera, sin embargo una vez estos jóvenes exploraban la segunda mina, Lolita quiso enterrar algunas cosas allí, entre ellas algunas cartas y ositos de peluche, Carmencita coloco tierra encima de eso e hicieron un minuto de silencio, entre tanto Joselito viendo que no era un ritual de brujería ni nada por el estilo, decidió tomar las cosas con naturalidad y aun con la vista borrosa por los efectos del alcohol le parece ver moverse una sombra tras la roca que dividía estas dos minas. su amigo Sebastián se percata de lo mismo y le pregunta a Joselito.
-creo que estamos viendo lo mismo, ¿verdad? - pero Joselito al saber que no es el único le entra un pánico enorme que le congela sus palabras y se queda mudo, La sombra se aproxima cada vez mas, hasta que con mayor claridad ven ante ellos al hombre del hacha.
-Apúrate Joselito. –Todos comienzan a gritar sin dejar de correr pero Joselito es atrapado por este hombre corpulento y dándose cuenta que no es ninguna sombra le dice.
-Suélteme señor. –pero este responde.
- ¿a donde cree que va? -Sebastián y las chicas salen a la carretera y entre tanto comienzan a pedir auxilio. un carro se aproxima. es una patrulla de policía que por casualidad pasaba por allí. Sebastián es reconocido inmediatamente y al darse cuenta de esto es capturado enseguida y sin mas opción para salvarle la vida a su amigo les dice.
- Joselito esta atrapado en la mina por el hombre corpulento. - la policía no sabe si hacerle o no caso, pues así mismo ya se habían volado dos veces; Las chicas le dicen lo mismo y ante tanta insistencia los patrulleros deciden hacerle caso, y al entrar en la mina para su sorpresa no encuentran a nadie.
A Sebastián lo encerraron en la cárcel junto con las chicas por mentirle a la autoridad y por engañarlos con cosas tan delicadas como desobedecer y atacar a un simple enterrador de un cementerio donde de verdad estaba prohibido entrar, sin embargo este señor misterioso del cementerio no quiso aparecer para testificar o levantar cargos en contra de Sebastián pues el que lo había golpeado había sido Joselito y además no era para tanto; sin embargo los padres de Joselito se hicieron presentes al desconocer los actos de su hijo, ellos muy ofendidos con Sebastián y las chicas por embrollarlo en semejantes andanzas les exigieron que les dijera en que lugar estaba su hijo, ellos les contaron todo, hasta lo de enterrar los ositos de peluche y las cartas, en la mina para borrar con el pasado de Lolo, pero la policía ya sabia que esa mina estaba por completo vacía, entonces por orden del alcalde hicieron varias inspecciones mas y la cerraron oficialmente, para que la gente no fuera allá a tomarla como lugar de recreo. los padres de Joselito estuvieron de acuerdo. Mientras tanto Joselito seguía desaparecido.
Las clases habían terminado y las chicas estaban junto con Sebastián muy tristes por la misteriosa desaparición de Joselito, sin embargo ya había pasado una semana después de lo ocurrido y Sebastián viendo que las chicas eran sus confidentes y le habían contado que el supuesto secreto de las bebidas energéticas eran asteroides con cafeína para que cogieran mas fuerza y músculos y que el pacto con Lolo solo era de amistad ya que a Lolo solo le gustaba la amistad de ellas porque eran ellas las que le ayudaban con las tareas y que la popularidad que el tenia era porque ellas eran las que se encargaban con las otras chicas de encenderle los celos a Manolo quien era el chico popular por tantos años, y que en sus casas habitaban unas familias destruidas por el dinero, ya que sus padres se habían divorciado y se habían quedado con todo y las habían desplazado a ellas hasta dejarlas a la merced de la caridad de un viejo enterrador de cadáveres en el cementerio del pueblo a quien ellas pagaban mal obligándolo a decir que en caso tal que algo las delatara como sus hijas adoptivas lo negara diciendo que eran ellas unas simples amigas o que mejor no dijera nada.
Luego una vez fuera de la cárcel Sebastián fue a conocer al señor enterrador y se dio cuenta que lo que ellas decían, era verdad. eran dos familias diferentes que habían abandonado a estas dos mujeres cuando solo eran unas niñas. sus cuartos estaban con fotografías de Sebastián y de Joselito, donde antes estaba la foto de Lolo.
luego fueron a visitar la tumba de Lolo y encontraron que era la mas bonita, siempre con flores frescas. Estando reunidos Carmencita empieza a llorar a lo que Sebastián abrasándola y consolándola, le pregunta que porque llora y ella le responde que era por el plan de ir de camping a aquel sitio con el lago al que con tanta ilusión le había dicho Joselito.
-Tranquila amiga, que si esto te había dado ilusión, pues a mi también, que irían ese mismo fin de semana. -entonces faltando un día para salir de viaje, la mama de Joselito llama a Sebastián y le pregunta que si con lo locos que se habían vuelto por alguna circunstancia ellos habían decidido entrar a la casa directamente al cuarto de Joselito por la ventana y envolviendo en las sabanas de su cama un hacha vieja de juguete, manchada con sangre de pollo; que si lo que pretendían era asustarlos no lo conseguirían.
-Mire señora cálmese, nosotros no somos así, además sabemos que Joselito anda desaparecido pero no sabemos donde esta y no nos prestamos para ese tipo de situaciones. –Las chicas estaban ahí también y Lolita también le pidió a la señora que se calmara.
-Nosotros no hemos hecho nada de eso, pues por el respeto que sentimos por nuestro amigo Joselito le decimos la verdad. -entre tanto interrumpió el papa de Joselito quien dijo.
-¿será que por accidente se hubieron llevado algo de la ropa de Joselito?.
–No. Como se le ocurre. –dice Sebastián, luego del altercado con los padres de Joselito, Sebastián le dice a Lolita que valla con Carmencita a seguir el plan, Las chicas continuaban con preparar el viaje hacia el lago, sin embargo Lolita le cuenta a Carmencita que Sebastián está hablando con los padres de Joselito y que parece que algo se mueve por la ventana de la habitación de Joselito, Carmencita suelta lo que estaba haciendo y sale corriendo con Lolita a avisarles a los padres de Joselito y a Sebastián , una vez ellas les avisan del hombre extraño en la habitación de Joselito, todos entran y cuando están a punto de entrar al cuarto de Joselito ven a alguien saltando por la ventana rompiéndola por completo y cayendo sobre el frondoso pasto del patio de esa casa.
el padre de Joselito vuelve a llamar a la policía y estos recogen la evidencia diciendo que el mismo Joselito hizo todo eso, pero que no lo hizo solo. Sebastián se le ocurrió la idea de visitar a Manolo para saber que sabia el, pero las chicas no querían que fuera solo y tampoco querían ir con el porqué a Manolo se sentiría celoso y no le iba a gustar, entonces Sebastián le pareció buena idea que no fueran junto con el pero al menos esperaran cerca por si pasaba algo, y de este modo lo hicieron, ellas se esconderían cerca a la casa de Manolo, mientras Sebastián entraba a la casa a visitar a Manolo.
Una vez dentro Manolo se alegro bastante de la visita y le conto a su amigo Sebastián que se iría de vacaciones al mismo lugar al que había ido por aquellos días en que habían matado a Lolo el año anterior, ya que sus padres les gustaba ir de cacería a ese lugar y este año habían aplazado la temporada por problemas con los permisos del estado.
-Este año será diferente. Pienso cazar un venado bien grande. No sabes lo emocionante que es ese deporte.
-Bueno, la verdad para mí no es un “deporte” aunque respeto mucho el simple hecho de esperar a que un animal se le ocurra posar para uno tan inocentemente.
-¿lo dices por el cazador o el animal?
-en realidad por el arte en sí.
-oh, ya entiendo, lo dices por “Al arte de Matar”, en realidad creo que más que un deporte es un arte. –decía convencido manolito pero Sebastián tenía otro punto de vista.
-No entiendes, me refiero al arte natural en su forma inocente, pues a los animales los matan y aunque se asustan un poco por los tiros, no están prevenidos de que los mataran de esa forma, es decir no sienten la amenaza, o la presencia inteligente que los observa, no con inteligencia, sino con brutalidad. Eso es lo que nos hace “animales” pero en otra vibración diferente a la de ellos, pues ellos aunque salvajes son inocentes, es decir más puros.
-y ¿Qué me dices de los animales feroces?
-Lo mismo, solo que ellos usan sus sentidos para la defensa, se defienden del hambre y defienden su especie protegiéndose desde ellos mismos hasta llegar a sacrificarse por la manada. Seria “deporte” como tú dices, si ellos les gustara jugar a conciencia de perder la vida. Y si nosotros como Asesinos contáramos con su misma suerte. –Sebastián parece ser un gran defensor ecológico, sin embargo Manolito le dice.
-Mira Sebastián, la verdad no practico la cacería para destruir, en esto también se aprende a sentir, ¿no sabes que hasta la tierra palpita igual que nosotros? La madre tierra tiene sentimientos también. Podrías trabajar como guarda bosques o como Ecologista, si quieres te doy unos contactos…
-Manolo, no vine para eso. No me interesa. Lo que te vine a preguntar es por la suerte de Joselito. ¿sabes algo?
-¿Por qué me preguntas a mi?
-No te imaginas el agarrón feo que tuve con los padres de Joselito, al parecer están apareciendo cosas, como Vudú y se pierden cosas, ¿sabías que apareció sangre de pollo y se perdió algo de la ropa de Joselito?
-Bueno, pero no imagines cosas, además…
-Además nada Manolo, todos somos sospechosos ahora. Alguien salto por la ventana de la habitación de Joselito y se llevo la ventana también de frente y cayó en el jardín de flores, es decir eso allá se formo fue un problema. –Sebastián estaba muy ofendido por la actitud de manolo queriéndose zafar del lio.
-Mira Sebastián, Desconozco eso que me dices. Honestamente y ya para concluir si supiera algo te lo decía. Sabes que mi religión me prohíbe mentir…
-No conozco tu religión. Yo tengo la mía propia y no he conocido alguna que permita mentir, la mayoría de la gente tiene una religión y mienten descaradamente a sabiendas que se pudrirán en el Infierno.
-Bueno, en mi religión no hay infierno.
-No me cambies el tema. –Sebastián está bastante iracundo.
-y No me dilates mi viaje, me tengo que ir. Me da tristeza lo de Joselito, es que… -Sebastián se empieza a calmar y aunque sigue escuchando las explicaciones de Manolo, no queda muy convencido pues Manolo no lo mira a los ojos es decir como ocultando algo. Sebastián quien ya conocía bastante a Manolo en su modo de hablar y decir las sinceridades pudo notar que algo tenia el la desaparición de Joselito, entonces para hacer mas tiempo y tratar de sacarle más información le dijo a Manolo que estaba un poco aburrido sin hacer nada y quería jugar uno de sus video juegos en su habitación, entonces Manolo le dijo.
-Me encantaría Sebastián, pero tengo que empacar y esperar… está bien si pero solo dos horas porque mi padre pronto vendrá del trabajo y tendremos que salir rápido para aprovechar la luz del día.
-Vamos. - Sebastián acepto y cuando estaban entrando por el corredor aquel que tenia cuadros pudo notar que en la colección de armas de su padre faltaba el hacha, y enseguida comprobó que era el hacha que había encontrado la mama de Joselito envuelta en la sabana, luego cuando entro a la habitación de Manolo no encontró el libro Mesiánico, sin embargo decidió ignorar eso y se puso a jugar como si nada, entre tanto le preguntaba por mas indicios que lo llevara al lugar donde estaba Joselito, pero Manolo solo le conto que la ultima vez que lo había visto era la noche del baile.
Afuera donde aguardaban las chicas, frente a ellas pasa muy campante Joselito, como si nada hubiera pasado y estas sin hacer ruido ven como el entra a la casa de Manolito por la puerta de atrás, entre tanto por la puerta de adelante Manolo despide a Sebastián , quien sin llamar la atención sigue derecho saliendo de la casa de Manolo y pasando por el lado de las chicas, luego que Manolo se entra a la casa, Sebastián se reúne con las chicas y le cuenta lo que vio, pero para el asombro de Sebastián se da cuenta que la verdadera primicia la tienen las chicas cuando le cuentan que vieron a Joselito entrar a la casa de Manolo por la parte de atrás.
-ok, mujeres, si Joselito esta allá en esa casa bajo algún conjuro, debo ir a rescatarlo. - Sebastián decide devolverse pero las chicas lo detienen.
-No seas tonto, hay que elaborar un plan.
-¿Qué?.
- que no puede ir así como así, porque incluso hubiera sido muy fácil hablar con Joselito cuando lo vimos pasar pero algo se trama. –dice Carmencita. Sin embargo Lolita indiferente contesta.
- Bueno ya sabemos que Joselito está bien, pues avisemos a sus padres. Y nos vamos riendo al lago. Tenemos que organizar más cosas para el viaje.
-¿Estás loca Lolita? Yo sin mi Joselito no voy ni a la esquina. -entonces Sebastián le dice a Carmencita y Lolita.
- vayan a ver a Manolo. y sin avisar entren y los sorprendan a los dos y de ese modo pues ya Joselito les dará una explicación.
-pues hazlo tu.
-No ya me despedí, además quedaría como un espía, es decir llamaría mucho la atención, levantaría indicios. –justifica Sebastián, pero las chicas no muy conformes con la respuesta le dicen.
-No entendemos. - pero él les repite que daría muchos indicios de sospecha puesto que ya se había despedido de manolito y pues así quedaría él como un espía, en cambio a ellas se les vería mas natural y como por lo general las mujeres son más curiosas pues no quedarían mal, ellas siguen sin entender pero deciden ir.
-ok, vamos Carmencita pero solo acerquémonos, ya sabes que Manolo nos odia a muerte. –dice lolita quien acercándose a la casa y al mirar por una de las ventanas del piso de abajo de la casa de Manolito, ven que Manolo y Joselito están luchando y Manolo tiene en la mano una hacha, ellas de inmediato empujan la puerta y sorprenden a estos dos y Lolita le grita a Manolo.
-No lo mates. - mientras Carmencita levanta a Joselito quien estaba en el piso, pero Joselito le da una explicación a Carmencita y junto con Manolo deciden contarle como fueron las cosas.
-pues esa noche en la Mina Manolo nos había seguido y en ese momento en que vino la policía me saco de la Mina y me llevo a la casa porque me había desmayado, Manolo decidió tomarse esos días que no había que ir al colegio para enseñarme a mí a Luchar, y a poderme defender la próxima vez que me atacaren o me viera en peligro y de este modo demostraría menos miedo a las cosas reales. -Carmencita y Lolita entendieron, sin embargo seguían desconociendo el porque rompió la ventana de su cuarto y escapo dejando algunas evidencias.
-¿Bueno y el descontrol que se formo en tu casa? Hasta vimos saltar a un hombre de la ventana tuya que se quebró en pedazos. -Joselito les aseguro que no fue el y que ese hombre que salto por la ventana era Manolo a quien le había encomendado la misión de sacar cosas de el como algo de ropa para vivir en la casa de él.
-Miren chicas guarden el secreto pero Gracias a la generosidad de Manolo y sobre todo por la confianza ya que se va de camping con sus padres y me dejara cuidando la casa esta, pues necesitaba algo de mis cosas para quedarme aquí unos días. Pero no le digan a nadie. –Manolo les confirma lo dicho.
-yo sé el desorden que hice y lo reparare en cuanto me sea posible. Pero quiero que entiendan que yo no tengo segundas intenciones con Joselito pues a cambio de que me cuidara la casa por una semana yo le enseñe a él Lucha libre para que se aprenda a defender.- Las chicas le piden a Manolo.
-Mira Manolo deja a Joselito quieto, que nosotros andamos planeando un viaje también. Mejor te recomiendo al enterrador del cementerio.
-pero no lo conozco ¿Qué referencias tiene?.
-Bueno, es un amigo. –Lolita mira a Carmencita y le dice que mejor sean sinceras. Entonces Carmencita rompe el silencio y dice.
-Es nuestro padre adoptivo. –Joselito empieza a entender muchas cosas y manolo se queda calládo confirmando así otras sospechas que siempre tuvo. Lolita reconfirma.
-Nos ha cuidado desde que éramos unas niñitas, es una persona muy honrada. -Joselito extrañado les escucho toda la vida de ellas en un resumen con muchos detalles, el cual despejo muchos mitos que Manolo tejía sobre ellas, de este modo Manolo confeso haber estado celoso de ellas por su falta de atención hacia el y pidiendo excusas también a Joselito le permitió que estuviera con su novia, quien había demostrado realmente amarlo; entre tanto llegaron los padres de Manolo quien a su vez se despide de sus amigos; asombrado Sebastián ve como las chicas salen de gancho con Joselito y despidiéndose de beso con Manolo.
Una vez en el auto rumbo a la cabaña del lago, van felices las dos parejas, mientras Carmencita conduce por un sendero que se oculta cada vez mas en el bosque, la noche parece querer entrar también en su alegría y así mismo horas más tardes estos alegres amigos, encienden una hoguera frente a la choza y frente al lago, en medio de su fiesta privada, Sebastián destapa una botella de champaña y con la música del carro a todo volumen y en medio del licor y la diversión, pasan las oscuras sombras de la noche y un nuevo día se levanta con la sonrisa de un sol naciente, en medio de un bosque sacado de un cuento mágico, los altos pinos, los pajaritos y el perfume a naturaleza mas el refrescante y cristalino lago que refleja la inocencia, la pureza de los desnudos cuerpos de dos esplendidas mujercitas en flor que se deleitan en el agua que lava mas que su juventud en piel todo el abrumador pasado, los meses de estudio y el dolor causado por el luto de su gran amigo Lolo, sin lugar para la tristeza o la memoria, Sebastián y Joselito despiertan y hacen lo mismo. Aquí solo se recrea la diversión pero también hay lugar para el amor.
Al año siguiente Joselito se prepara para su último año de preparatoria, mientras Sebastián es condenado a la silla eléctrica por homicidio en primer grado contra Lolo, sin embargo se sigue investigando la muerte misteriosa de dos ancianas con identidades falsas encontradas sin cabeza flotando sobre el lago del bosque. Mientras Manolo no corrió con suerte de salir librado de las balas perdidas en la temporada de caza, después de un tiempo Joselito empieza a tener visiones y pesadillas. Su cargo de conciencia pesa más que su secreto. Las sombras del pasado claman…
Justicia.
FIN
Stephen Betancourt