Siento miedo, miedo de no saber vivir, miedo de perder lo que tengo, miedo de saber cosas que me hagan sufrir, miedo por pensar mas allá de los demás, miedo de imaginar una vida a la que no quiero llegar.

Siento que no puedo respirar, que mi corazón está oprimido dentro de unos músculos inamobibles, agarrotados, atrapada toda en una inmensa depresión.

Sola, sola paso los días, pues aunque haya gente a mi alrededor, me siento sola en esta batalla diaria.

Amor? Sí, amor es lo que me duele. No, puede que no sea él, puede que sea el miedo a perderlo. Intranquila, desesperada a veces, creo que no voy a poder resistir y que voy a estallar en llanto en cualquier rincón, de echo, ya he estallado.

¿Debo quedarme con lo simple y banal?

Quizá así sea feliz de v erdad, quizá sepa entonces aprovechar el amor que me brindan, sin rencor, sin duda, sólo aprovechar esos momentos tiernos y dulces...