MULATA DE MI TIERRA.

La mulata menea la cintura.
retumba la tambora, güira, acordeón,
contorsiona su cuerpo al sonar el saxofón,
moviendo los pies, la cabeza con elegante soltura.

Improvisa pasos al ritmo del son,
tararea, flexiona su cuerpo con cadencia y dulzura,
acariciando su abdomen con mucha ternura,
caracolea sonriente alzando la falda del camisón.

La música fluye por todo su cuerpo,
trae alegría metida en la sangre,
el merengue la incita, siente calambre,
al cerrar las manos formando un bello cerco.

Su cuerpo excitado entra en calor,
se mueve, suda, respira forzada,
sus pies no detiene, los mueve con firmeza y ardor,
al compás de su cintura acerada.

Su pensamiento vuela agitado,
cerrando los ojos cruza los mares,
toca con la imaginación bellos lugares,
donde sueña ilusionada con ¡El hombre amado!

JOSE NICANOR DE LA ROSA.