TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / vickyjordan / Algo que me sigue matando de a poco...

[C:854]

Entré al lugar buscándolo disimuladamente con la mirada... no estaba. Llegué hasta la barra y me senté, pedí un trago y no hice mas que observar a mí alrededor. Parecía una loca solitaria, en aquel lugar donde jamas había estado antes... Pasó un largo rato y decidí caminar entre las mesas raramente dispuestas. Las luces eran muy tenues, era dificultoso distinguir algún rostro... pero sabía que él estaba ahí. Lentamente giré en dirección a la puerta del bar y lo vi entrar. Caminaba con aire distinguido, evidentemente era distinto al resto, él se sentía así. Pasó por mi lado y no notó mi presencia. Yo no pude reaccionar y dejé que se me escapara nuevamente de la vista. Torpemente empecé a caminar en varias direcciones, buscándolo. Estaba sentado junto a un grupo de mujeres que sonreían ante cualquier gesto o palabra suya. Me paré justo delante de él y sin percatarse me miró, sonrió y se internó nuevamente en sus asuntos. Comencé a gritar como loca para llamar su atención pero no hubo caso.
Desilusionada, salí del bar. Caminé hacia el estacionamiento, estaba ubicado justo al lado de un inmenso y oscuro bosque que no me inspiró confianza. Mantuve un largo rato la mirada perdida hacia la oscuridad, sin poder entender que había ocurrido adentro. Cuando me disponía subir a mi auto me tiraron fuertemente del brazo y me dieron vuelta... ¡No! ¡Era imposible! ¿Qué hacía él allí? Vos no... no puede ser pero... “Mi amor”, me dijo. Vas a venir conmigo, mientras me arrastraba forzosamente hacia su auto. “¡Por favor, no! No puedo, es que estoy esperando a alguien...” ¡No! Me respondió. “Vos solo me estabas esperando a mí... y acá estoy”. Miraba desesperadamente hacia el bar para ver si lograba verlo aunque sea salir de allí. Ya era tarde, estaba en las garras de ese loco. Yo lo quería a él... ¿Por qué no me había visto allá adentro? ¿Cómo pudo ignorarme de esa manera? No se da cuenta acaso de... Cuando menos me lo esperaba apareció, alcanzó a pegarle en la cabeza de un fuerte codazo desmayándolo. Me abrazó y no paró de pedirme perdón. “Yo te necesito, pero no pude... tuve miedo...” Abrazándolo fuertemente le dije cuanto lo amaba, que yo también lo sentía, que no me abandonara nunca mas”...
Nunca supe donde ni porque ocurrieron los hechos. Solo recuerdo el dolor que me causó sentir su rechazo, sentir que ya no me pertenecía... Lo siento al darme cuenta que en realidad, ya no me pertenece.

Texto agregado el 14-11-2002, y leído por 342 visitantes. (2 votos)


Lectores Opinan
24-11-2003 buen trabajo cosita bonita viajerodebrooklyn
31-10-2003 ¿angel de la guarda? Saludos FranLend
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]